“Que un pedagogo se forme en un ambiente donde hay investigación le da claramente una connotación muy distinta de que el conocimiento es algo que se crea, de que hay cuestionamientos permanentes de qué es lo que hoy día aceptamos como verdades, en contraposición a una idea más primitiva de que hay ciertos conceptos que hay que aprender y responder”, señaló el Rector Ennio Vivaldi en el marco del programa radial “Quiero ser Científico” de la Facultad de Ciencias. El espacio, que es transmitido por la Radio Universidad de Chile, se centró en la creación nueva carrera de Pedagogía en Biología y Química que comenzará a impartirse desde el año 2015. La nueva carrera es un trabajo conjunto de la Facultad de Ciencias y la Facultad de Filosofía a partir del Departamento de Estudios Pedagógicos.
El programa, conducido por la Directora de Extensión de dicha unidad, Hortensia Morales, contó además con la presencia de la Decana de la Facultad de Filosofía y Humanidades, María Eugenia Góngora, el Decano de la Facultad de Ciencias, Víctor Cifuentes y el jefe de la División de Educación Superior del MINEDUC, Francisco Martínez.
La instancia, que se realizó en la Sal Master con la presencia de público, se constituyó en un diálogo conjunto entre el panel y los asistentes, quienes hablaron sobre la nueva carrera y de otros temas como calidad de la educación y los criterios que se entienden por tal, el rol de la actualización de los profesores y las tecnologías en la formación.
Respecto a la nueva carrera de Pedagogía, la directora de Pregrado de la Facultad de Ciencias, Profesora Margarita Carú, señaló que una de las principales características de ésta “es que participan dos facultades, que es un modelo nuevo en pregrado, donde cada una de las unidades académicas pone lo mejor y sus fortalezas”.
“Que sean dos disciplinas, química y biología va a tener una repercusión en el campo laboral porque los profesores en ciencias trabajan áreas que tienen pocas horas por lo que deben ir de un colegio en otro, en cambio un profesor que toma estas dos disciplinas puede permanecer en el establecimiento, lo que lo hace más cercano al ambiente escolar y a sus estudiantes. Esas son fortalezas que nos imponen exigencias mayores pero es una buena manera de elevar el sentido que tiene la sociedad de formar pedagogos, que es la profesión más importante y clave de la sociedad”, agregó.
Entre los temas tratados los participantes refirieron a la necesidad de una constante actualización de los docentes. Al respecto, la Decana Góngora dijo que esta “es una tarea muy grande y que todas las universidades estatales deberían enfrentar con mucha seriedad”.
Por su parte, el Decano Cifuentes se refirió a la importancia de la experiencia empírica en el proceso de aprendizaje, la que su Facultad ha venido apoyando a partir de cursos “donde los profesores tienen la posibilidad de asistir a los laboratorios, pero además de experimentar con sus propias manos lo que es hacer investigación, aunque sea en un corto periodo de tiempo. Esto ayuda a que puedan enseñar con más propiedad”.
Desde el Ministerio de Educación, Francisco Martínez se refirió a la relación de las universidades públicas en el ámbito de la educación y a la nueva carrera de Pedagogía en Biología y Química. “Iniciativas de esta magnitud hay que ponerlas en la mesa y mirarlas desde la perspectiva de una institución que está al servicio del sistema y del objetivo del país que es dar un salto en educación, si no no lo vamos a lograr o lo vamos a lograr a medias”, indicó.
Aspectos claves en la calidad de la educación
El Director del Departamento de Estudios Pedagógicos, Profesor Ernesto Águila Zúñiga, indicó que la calidad de los profesores “está en directa relación con las condiciones de trabajo. Necesitamos hoy día pasar a un 50 por ciento de horas lectivas y un 50 por ciento de horas no lectivas para liberar tiempo y energía de los profesores para que puedan formarse, preparar sus clases y dialogar”.
Entre otros aspectos que determinan la calidad de la educación, el Profesor Águila se refirió a la cantidad de niños en las salas y en el aumento de los salarios. “Si vamos a un mejoramiento sustancial del sueldo de los profesores, también estamos dando una señal potente que esta es una carrera que la sociedad valora”.
“Hay muchas respuestas para dar de cómo mejorar la educación pública pero una fundamental es mejorar la calidad de la formación, lo que es responsabilidad nuestra, de la Universidad de Chile”, finalizó.
Una experiencia previa: Pedagogía en Matemática y Física
Desde el año 2005 la Universidad de Chile imparte la carrera de Pedagogía en Matemática y Física gestada igualmente en el marco de un trabajo conjunto de la Facultad de Filosofía y Humanidades y la Facultad de Ciencias. Su coordinadora, la profesora Johanna Camacho, destacó las fortalezas del programa, entre las que se encuentran “la sólida formación disciplinar, cercana a cómo se desarrolla la investigación científica. Esto para nosotros es una gran ventaja porque nos permite situar la enseñanza y aprendizaje en la ciencia, en el desarrollo de habilidades de pensamiento científico, más que en los contenidos como tradicionalmente se ha hecho”.
“Otra fortaleza tiene que ver con la reflexión de la actividad pedagógica, en particular entendiendo que el profesor o profesora que se está formando es una persona que es capaz de investigar y tomar decisiones acerca de su quehacer profesional. Esto es importante destacarlo porque es el núcleo duro de la formación profesional que se desarrolla en el Departamento de Estudios Pedagógicos”, agregó.
Finalmente se refirió al sello que le otorga la Universidad de Chile a los perfiles de egresados de sus carreras, el que “aparte de reconocer la importancia de lo público, lo lleva a tener un rol protagónico en los contextos escolares, conllevando a que el profesor sea una persona preocupada por transformar y participar en el proceso educativo donde trabaja”.