Hallazgos fueron reconocidos por revistas internacionales

Arqueólogos de la U. de Chile encuentran herramientas y armas de hace 12 mil años

Arqueólogos de la U. de Chile encuentran armas de hace 12 mil años
Durante los últimos diez años, el equipo de investigadores del que participa el Prof. Méndez y el Prof. Donald Jackson, además de estudiantes de pre y postgrado, trabaja en los hallazgos de cuarzo.
Durante los últimos diez años, el equipo de investigadores del que participa el Prof. Méndez y el Prof. Donald Jackson, además de estudiantes de pre y postgrado, trabaja en los hallazgos de cuarzo.
Parte de los hallazgos del Prof. César Méndez han sido publicados en las prestigiosas revista Science y Nature.
Parte de los hallazgos del Prof. César Méndez han sido publicados en las prestigiosas revista Science y Nature.
Otra de las investigaciones encabezada por César Méndez, según consigna la revista Science, es la realizada en el sur del país, específicamente en los valles del Río Cisnes y del Río Ñirehuao.
Otra de las investigaciones encabezada por César Méndez, según consigna la revista Science, es la realizada en el sur del país, específicamente en los valles del Río Cisnes y del Río Ñirehuao.

“Extreme living” se llama el artículo publicado por Barbara Fraser en la reconocida revista científica Nature, donde el arqueólogo y académico de la Facultad de Ciencias Sociales (FACSO) de la Universidad de Chile, César Méndez, narra el importante descubrimiento de restos de cuarzo, herramientas y puntas de proyectil que fueron confeccionadas en un antiguo campamento de cerca de 12.600 años de antigüedad llamado “Valiente”, ubicado en la Quebrada Santa Julia en la provincia de Chopa, IV Región.

El hallazgo ha permitido profundizar el estudio de los primeros poblamientos americanos que se asentaron en los distintos territorios de Sudamérica y que ha sido realizado por el Prof. Méndez y el Prof. Donald Jackson, además de estudiantes de pre y postgrado. Este trabajo se enmarca en el proyecto FONDECYT titulado “Primer Poblamiento en el Semiárido de Chile: Interacción seres humanos y fauna extinta”.

El cuarzo fue muy utilizado en la zona central de Chile, desde Los Vilos hasta la VI región. Los primeros pobladores lo empleaban para confeccionar puntas de proyectil e instrumentos de corte. En Valiente incluso se registraron herramientas que estaban en un proceso más avanzado de manufactura. Los investigadores además descubrieron otros importantes restos de los primeros habitantes, por ejemplo, "en la Quebrada Santa Julia también se han encontrado restos de caballo nativo, mientras que en San Vicente de Tagua Tagua se han descubierto restos de mastodonte, lo que sugiere que ellos tenían dietas diversificadas, que no solo consumían grandes bestias, sino que también restos de zorro y otros animales”, explica el arqueólogo.

Relación entre seres humanos y el ecosistema

Otra de las investigaciones encabezada por César Méndez, según consigna la revista Science, es la realizada en el sur del país, específicamente en los valles del Río Cisnes y del Río Ñirehuao, cerca de Coihaique.

El proyecto “Dinámicas humanas y ambientales durante el Holoceno en el norte de Aisén continental” (FONDECYT 1130128) tiene por objetivo analizar y evaluar cómo los antiguos pobladores interactuaron e incidieron en el medioambiente. “Por una parte, nos interesa esclarecer de qué manera los cambios climáticos afectaron a los seres humanos, visto tanto a través de los cambios en la vegetación, en el tamaño de los bosques o su ubicación”, detalla el académico.

De acuerdo a los datos recabados, hay un sitio arqueológico localizado en el bosque de río Cisnes, Alero Las Quemas, cuya mayor ocupación ocurrió hace 2800 años y las reconstrucciones de clima efectuadas señalan que antes eso no era bosque. En este sitio se registraron pinturas rupestres de pisadas de ñandú, siendo que los ñandúes viven en estepas abiertas.

Según los estudios del equipo, los cambios en el ecosistema se enmarcan en una serie de transformaciones ambientales ocurridas 19 mil años atrás. Desde que se retiraron los hielos de los glaciares que cubrían la región, el clima ha cambiado constantemente.
“A veces con más lluvia y menos frío, se ha visto que los bosques crecen, mientras que en periodos con más frio y menos lluvia, los mismos bosques se contraen, produciendo cambios en el paisaje y en la distribución de los recursos. Mutaciones ambientales que, por consiguiente, afectan la vida de los seres humanos”, describe Méndez.

Incendios que marcaron la zona

Con la llegada de hombres y mujeres a la zona durante el periodo de primer poblamiento americano hasta la actualidad han habido impactos de distinta magnitud en el entorno natural, de los cuales destacan especialmente los ocurridos 2.800 años atrás y las quemas históricas iniciadas casi a comienzos del siglo XX, cuando los colonos chilenos(as)/europeos(as) quemaron gran parte de la región para sus asentamientos.

Otras de las interrogantes planteadas por los investigadores tienen relación con cómo los seres humanos afectaron al medioambiente. “Sabemos que ellos desde el momento en que ingresan a un ecosistema lo afectan. Esa idea del buen salvaje, del cazador recolector primitivo que vive en armonía con la naturaleza está refutada por muchas líneas de investigación”, enfatiza.

En este sentido, una de las directrices que se trabaja es el estudio de las frecuencias y números de incendios en la región. Méndez relata que “a partir de sedimentos extraídos del fondo de las lagunas de los valles, se concentran los carbones de los distintos incendios, esto permite analizar la historia de 19 mil años de incendios en la Región de Aysén”.

Sorprendentemente para el equipo, los incendios comenzaron a desarrollarse con las primeras ocupaciones humanas, por lo que pensamos que “los seres humanos efectivamente afectaron los ecosistemas y definitivamente los modelaron”, comenta Méndez. La última expedición realizada en la zona fue en enero de este año.

Descubrimiento de restos de 10 cuerpos humanos

Anteriormente, antropólogos, estudiantes e investigadores de otras instituciones encontraron un total de 10 restos de cuerpos humanos en el sitio Baño Nuevo 1 excavado por el Dr. Francisco Mena. A principios de este año fue publicado en International Journal of Osteoarchaeology, un trabajo titulado “Isotopic Ecology and Human Diets in the Forest-Steppe Ecotone, Aisén Region, Central-Western Patagonia, Chile” donde se discute la alimentación de este grupo enterrado hace 10200 años. Contrario a lo que se pensaba, estas primeras poblaciones, según César Méndez, “no se alimentaban solamente de guanacos, sino que cazaban diversos animales como zorros, chingues (zorrillos), piches (armadillos) y aves, entre otras especies”.