Acompañaron a ministro Nicolás Eyzaguirre:

Académicas de la U. de Chile integraron delegación educacional en Finlandia

Académicas integraron delegación educacional chilena en Finlandia
Prof. Alejandra Mizala, el ministro Nicolás Eyzaguirre y la prof. Salomé Martínez.
Prof. Alejandra Mizala, el ministro Nicolás Eyzaguirre y la prof. Salomé Martínez.

En medio de la discusión y diseño de la reforma educacional, una delegación de expertos, políticos y académicos liderados por el ministro de Educación Nicolás Eyzaguirre viajó a Finlandia para conocer la realidad educativa de ese país. Un modelo público que es mirado como ejemplo para los cambios que desea realizar el gobierno de Chile. Entre los representantes estaba la investigadora Salomé Martínez, directora del Laboratorio de Educación del Centro de Modelamiento Matemático (CMM) de la Universidad de Chile y Alejandra Mizala, directora académica del Centro de Investigación Avanzada en Educación y directora del Departamento de Ingeniería Industrial.

“En la gira participó un grupo muy importante de ‘stakeholders’ (actores) en la educación de Chile. La posibilidad de compartir la experiencia del modelo finlandés con esta amplitud de personas y poder discutir acerca de temas de educación es sumamente rico”, contó Martínez desde Helsinki.

Por su parte, la profesora Mizala explicó que “lo que tratamos es aprender de la experiencia de los países que tienen las mejores prácticas en políticas educacionales, porque los desafíos que enfrenta el país no solo requieren diseñar políticas basadas en evidencia científica, sino también ser capaces de implementarlas exitosamente, y para ello la experiencia de otros países puede ser muy relevante".

Finlandia tiene un sistema educativo que ha sido calificado como ejemplar. No solo porque este país suele ocupar los primeros lugares en pruebas estandarizadas como la del Programme for International Student Assessment (PISA), sino también porque ha logrado eliminar el estrés de la sala de clases, la selección y el cobro en la enseñanza. Los alumnos finlandeses gastan menos tiempo en la sala de clases, entran más tarde al colegio (a los siete años) y se llevan menos tareas para la casa que el promedio de los países de la OCDE. El Estado, además, otorga libros, material escolar, alimentación y transporte a sus estudiantes.

“Es un sistema con una gran coherencia, donde la política educativa es un consenso nacional y no depende de gobiernos. Su financiamiento es estable y se invierte en todos los niños, materializando los principios de equidad en la educación. Se basa en la confianza, donde los profesores tienen una excelente preparación y gozan de un alto reconocimiento social. Pienso que esos son todos elementos clave para mejorar nuestro sistema educativo”, afirma la investigadora del CMM.