La larga relación que existe entre Chile y Francia en materia educacional, que en el caso particular de la Universidad de Chile incluye la existencia de más de 70 convenios y acuerdos de colaboración con más de 60 instituciones francesas, fue uno de los ejes en la reunión que el Rector Vivaldi sostuvo el 23 de abril con la ministra de Educación Nacional, Enseñanza Superior e Investigación de Francia, Najat Vallaud-Belkacem.
En la ocasión participaron en representación de la Universidad de Chile, además del Rector Vivaldi, el vicerrector de Investigación y Desarrollo, Flavio Salazar, el decano de la Facultad de Ciencias Sociales, Roberto Aceituno, el decano de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, Patricio Aceituno, la decana de la Facultad de Filosofía y Humanidades, María Eugenia Góngora, el director del Centro de Modelamiento Matemático, Alejandro Jofré, y la directora de Relaciones Internacionales, Pía Lombardo. Por parte del Ministerio de Educación estuvieron presentes la subsecretaria de la cartera, Valentina Quiroga, y el jefe de la División de Educación Superior, Francisco Martínez.
En sus palabras de apertura la máxima autoridad de la U. de Chile enfatizó en la importancia que las universidades estatales tuvieron en el marco de la construcción de las repúblicas hispanoamericanas y de las instituciones republicanas. Así “nos hicimos responsables de la historia de Chile hasta que fuimos apartados en 1973, momento en el que se instaló un sistema de valores acorde con el nuevo modelo” impuesto durante la dictadura.
Ante esa situación, el Rector aseguró que la visita de la ministra Vallaud-Belkacem “es una fuente de inspiración” en momentos en los que se discute la reforma de la educación superior. En su opinión “entre los temas en que Francia nos puede aportar su experiencia se cuenta la descentralización de la ciencia y el conocimiento”, en vistas de la necesidad de reconstruir el sistema nacional de universidades estatales en Chile.
Recogiendo el espíritu del mensaje del Rector y tras agradecer la oportunidad de conocer la Universidad de Chile, la ministra Vallaud-Belkacem enfatizó en que se “vive un momento muy importante en la relación entre las universidades de ambos países”. Ejemplo de ello son los 900 jóvenes chilenos cursando estudios en instituciones francesas, y la visita que el ministro Eyzaguirre realizó a su país en noviembre del año pasado, momento en que la ministra se interiorizó en el proyecto de reforma educacional.
“Es desde ese momento que deseé apoyar sus esfuerzos de cambios en diversas temáticas como la formación docente, aumentando el volumen de la movilidad estudiantil entre ambos países, respecto a la educación técnica profesional y avanzando en un acuerdo de reconocimiento mutuo de diplomas gracias a nuestra experiencia”, aseguró Vallaud-Belkacem.
Respecto a las perspectivas que se abren a raíz de la relación entre ambos países en torno a la educación, el vicerrector de Investigación y Desarrollo, Flavio Salazar, aseguró que se debe buscar aprovechar las distintas oportunidades que sea abren para “poner a la Universidad pública al servicio de las necesidades de Chile, aprovechando la versatilidad de nuestra institución a través de proyectos de investigación multidisciplinaria”.
La subsecretaria de Educación, Valentina Quiroga, destacó que “Francia ha dado muchos pasos que nos gustaría dar a nosotros en materia educativa en el contexto de la actual reforma educacional” en especial en lo que se refiere a inclusión y educación técnico profesional.
En la misma línea opinó el jefe de la División de Educación Superior, Francisco Martínez, quien aseguró que los esfuerzos invertidos en la reforma buscan “superar el actual estándar de la calidad en las instituciones de la educación superior, así como lograr la equidad en todo el sistema de educación superior, dejando atrás la actual situación de créditos y deudas”. Por el contrario, afirmó que mediante la gratuidad y un sistema renovado de ingreso “se podrá captar a todos los talentos que hoy no tienen posibilidades de estudiar”.
Finalmente, destacó que la reforma educacional planteada implica “un drástico cambio que va en la dirección contraria a la que han adoptado la mayoría de los países en el último tiempo, que es ir hacia una mayor presencia del mercado, lo que hace que nuestro proyecto de cambio sea muy valorado”.
