Laboratorio Social del Deporte de la U. de Chile

Cómo descifrar el fútbol a través de la sociología

Cómo descifrar el fútbol a través de la sociología
A través de los movimientos y dinámicas de los jugadores en la cancha es posible encontrar ciertas acciones que remiten a lo social.
A través de los movimientos y dinámicas de los jugadores en la cancha es posible encontrar ciertas acciones que remiten a lo social.
El fútbol es el deporte más popular en Chile, por lo que su estudio genera una gran relevancia para la sociología.
El fútbol es el deporte más popular en Chile, por lo que su estudio genera una gran relevancia para la sociología.

Toda la emoción propia del fútbol comenzará a vivirse desde el 11 de junio cuando comience la Copa América 2015, que se extiende hasta el 4 de julio en ocho ciudades del país. Este importante evento deportivo y el desempeño de sus equipos, a juicio de investigadores, genera la posibilidad de plantear la estrecha relación entre fútbol y sociedad.

Paulatinamente, las ciencias sociales, la historia y el periodismo se han interesado en estudiar diferentes aspectos del futbol como práctica social y su impacto en diferentes esferas de la sociedad, como los procesos de identificación con los clubes, el rol de las barras bravas, o la emergencia y reforzamiento de identidades nacionales.

Sin embargo, ¿Qué ocurre en la propia cancha de fútbol? ¿Cuál es el rol del entrenador? ¿Cómo se desarrollan las relaciones interpersonales en un equipo de fútbol? ¿Cómo esto se expresa en el rendimiento deportivo? ¿Y cuál es el significado y proceso que hay detrás de un pase o de los movimientos con o sin balón en un equipo de fútbol? Estas y otras interrogantes relacionadas al juego propiamente pueden ser investigadas y respondidas desde la sociología.

La interacción, clave de la sociedad y el juego

Comúnmente, el fútbol se define en torno a cinco dimensiones básicas para su desarrollo: la técnica, lo físico, la táctica, lo psicológico y lo reglamentario. Sin embargo, desde lo sociológico se puede agregar un sexto elemento, indican los investigadores del Laboratorio Social del Deporte: esta es la interacción: “La naturaleza colectiva del fútbol es tan o más importante de analizar en este deporte que los aspectos individuales. El pase, por ejemplo, es un acto comunicativo entre dos jugadores que supone reflexividad sobre a quién dirigir el pase y añade, entre otras cosas, un lenguaje corporal”, comenta el prof. Rodrigo Figueroa, del Departamento de Sociología, quien además dirige el equipo de trabajo del Laboratorio Social del Deporte.

“El pase de fútbol, por ejemplo, puede ser analizado desde un punto de vista sociológico pues en este juego hay elementos de interacción que traspasan las vivencias individuales de un jugador”, comenta el Prof. Rodrigo Figueroa. En este sentido, prosigue, el entrenador es fundamental para desarrollar la interacción; él mismo se transforma en un objeto de observación sociológica ya que posee, al menos, tres funciones que podrían ser analizadas desde esta perspectiva: observar, liderar y coordinar. “La síntesis de esas tres funciones puede decantar en un método”.

Precisamente, el pase y los movimientos colectivos suponen un desarrollo de reciprocidad, comunicación y de interacción social, todos objetos de estudio de la sociología. Por eso es que se puede asimilar el trabajo del entrenador con la planificación y construcción de pequeñas sociedades o asociaciones competitivas al interior de un equipo, facilitando los procesos de toma de decisión del líder, que en este caso sería el entrenador”, explica Patricio Carvajal, sociólogo egresado de la Universidad de Chile e investigador del Laboratorio Social del Deporte.

También “este pequeño sistema de interacción que es un equipo de fútbol, como es el caso de la selección nacional, tiene oposición de rivales en donde también quedará expuesto a condicionantes del contexto societal, que se expresan en 'exitismo' o 'nacionalismo'”, complementa.

“Todos estos elementos micro y macroestructurales que definen la interacción en un equipo de fútbol suponen un desafío enorme para los sistemas y metodologías de entrenamiento. En este sentido, las metodologías para desarrollar un equipo han cambiado y algunas de ellas, como la periodización táctica, se estructuran a partir del paradigma sistémico, algo que todos conocemos en la sociología contemporánea”. Uno de los desafíos que tienen estos sistemas de entrenamiento es cómo mejorar la toma de decisiones de jugadores y también de técnicos de fútbol. En ello algo puede ayudar la sociología, dice Figueroa.

Por ejemplo, Marcelo Bielsa, durante su periodo como director técnico de la “Roja”, utilizaba el concepto de asociaciones para referirse a su metodología de trabajo y la capacidad de construir parejas o tríos de futbolistas que cumplían determinadas funciones dentro del sistema de juego. Esto es una perfecta metáfora sociológica y que describe la naturaleza de la asociación competitiva de la que hablaba Bielsa.

Valoración del entrenamiento

Rodrigo Figueroa además de sociólogo es entrenador de la serie sub11 de AC Barnechea. Según su experiencia, tradicionalmente los entrenadores ordenaban a los niños en filas para que practicaran el pase del balón. Actualmente, esos sistemas analíticos están siendo desplazados por otros, donde el aprendizaje del juego se hace justamente jugando. Jugar para aprender, lo cual estimula el proceso de toma de decisiones. Pero se hace la siguiente pregunta ¿Qué factores facilitan o dificultan este proceso de aprendizaje basado en juego? El profesor Figueroa responde que su experiencia siendo entrenador en los Estados Unidos con niños de la misma edad (11 años) le ha indicado que hay un valor o una cualidad de la sociedad que es fundamental: el valor de entrenarse. Y agrega que en Chile tenemos un escaso valor por la idea de entrenarnos. Justamente la principal diferencia entre los niños chilenos y los de Estados Unidos era el valor a la preparación y al entrenamiento que le daban los segundos.

“La sociedad chilena produce niños, en este caso, que son poco entrenables porque el chico o la chica se insertan, al igual que nosotros(as), en una sociedad autoritaria, y esta característica se traduce en subordinación. Lo que uno aspiraría es que los equipos de fútbol en vez de tener una relación de subordinación entre el entrenador y sus dirigidos tuvieran más bien una relación interactiva basada en el valor de entrenarse para crecer y ser mejores”, subraya.

Ganar o perder parece ser vital en la sociedad chilena, por lo que tras los partidos sólo se comenta sobre los resultados, pero no acerca del proceso que condujo a tales resultados. Y es por ello, según Figueroa, que no se habla de lo mal que nos entrenamos, ya que siempre estamos funcionando en términos del reproche o el castigo. “Ellos siguen al entrenador cuando los retan, me doy vuelta y ellos se ríen; esto hay que romperlo, porque es un signo que algo nos pasa como sociedad con el líder o con la organización y creo que las herramientas sociológicas nos pueden ayudar a cambiar en algo esto”.

En la misma línea, Patricio Carvajal, quien desarrolló durante casi dos años su memoria de pregrado, titulada “El entrenador de fútbol como síntesis de la relación entre fútbol y sociedad. Una aproximación sociológica a la praxis social de entrenadores profesionales y amateurs”, concluye que la concepción del entrenador como un estratega que enseña el fútbol se desarrolla desde el recurso de La Disciplina para la subordinación del jugador, “entendiendo que el otro está a gusto en esa posición de subordinado. Esto es un rasgo propio de la sociedad chilena”.

Oportunidades de los entrenadores

Para Patricio Carvajal, los entrenadores actualmente tienen una gran oportunidad: “Las funciones que desde el discurso de los entrenadores se desagregaron, que son la observación, el liderazgo y la coordinación pueden potenciarse mucho más si se desarrolla la reflexividad que ofrecen las herramientas sociológicas para la construcción de un equipo de fútbol. Esto tanto en el plano amateur como en el profesional”.

Hoy, el entrenador puede expandir su capacidad de observación, su talento, que es ver lo que otros no ven. “Un pase nunca será sólo técnica y movimiento: es complicidad, reciprocidad, interacción social. Un equipo es una pequeña sociedad, donde lo individual se somete a lo colectivo, donde emerge una moral y una inteligencia colectiva”, determina.