Incentivar y apoyar la producción e investigación de los académicos y docentes del Departamento de Artes Visuales es el principal objetivo del Concurso de Creación e Investigación Artística, que durante el 2015 fue implementado por el director del DAV, Luis Montes Becker y el subdirector, Daniel Cruz.
Esta iniciativa busca cultivar la disciplina, motivo por el cual se ha convertido en el único concurso de esta naturaleza en la Facultad de Artes, que considera a los docentes a honorarios para participar tanto del Concurso de Creación, tal como ocurrió durante el año pasado, y del Concurso de Investigación, que se incluyó en esta segunda versión gracias al aumento del presupuesto para estos fondos en un 35%.
De esta forma en el área de Creación los artistas beneficiados fueron los académicos Catalina Donoso, Arturo Cariceo, Daniel Cruz, Adolfo Martínez, y los docentes a honorarios, Rodrigo Vargas, Juan Céspedes y Carla Motto. En el área de Investigación las ganadoras fueron, la académica Mónica Bate y la profesora Francisca Montes.
Algunos de los proyectos favorecidos
Luxembourg se titula la iniciativa de la académica Catalina Donoso que conecta dos esferas simbólicamente antagónicas: el diseño del ornamento, elemento suntuoso, prescindible, asociado al poder, que pone énfasis en lo exquisito y el deleite; y la basura, que es el último estado de la materia, la presencia no deseada que difama la limpieza, la asepsia, el orden, y es condenada en muchos casos por su consistencia no sustentable y no degradable.
Para ello instalará en la sala Juan Egenau contenedores de escombro y basura construidos de estructuras de fierro y malla, siguiendo patrones con diseños florales provenientes del mundo textil, comúnmente denominados brocato, que se dispondrán a ras de suelo sobre una cubierta de madera terciada pintada de color verde inglés, y serán rellenadas con escombro, basura, conchas, desechos plásticos etc., hasta una altura de 50 centímetros, desplegando el modelo de referencia de muro a muro.
“La idea es construir estos estilizados diseños en volumen, permitiendo desplazarse entre sus gráciles curvas, observando el contenido escatológico e inmundo de los desechos, a través de la malla de contención y desde la superficie que quedará abierta”, plantea la artista en su proyecto de creación.
Con esta obra la artista intenta replicar en algo los parques de las antiguas casonas tradicionales de familias acomodadas de Chile, haciendo alusión a la altura de los contenedores, que más o menos replican las columnas de boj recortado que bordean los jardines, siendo también, el alto oficial para camas, sillas y otros elementos ergonómicos con los que uno se familiariza.
Sinestesia
El académico Arturo Cariceo es otro de los favorecidos que desarrollará el proyecto Sinestesia, basado en la historia de una reunión que el profesor del DAV sostuvo con el Premio Nacional de Música, Fernando García, luego de haber encontrado las partituras de su obra para flauta sola Reencuentro con el pintor Vergara Grez, mientras era co-curador de la retrospectiva de su antiguo mentor, Ramón Vergara Grez (1923-2012), realizada en el Museo Ralli el año 2015.
El objetivo del proyecto es grabar la pieza musical, que nunca ha sido interpretada, siguiendo las indicaciones del maestro García. De esta forma la pieza musical Reencuentro con el pintor Vergara Grez, podrá ser escuchada en línea, desde la plataforma patrimonial de la Universidad de Chile, Artificios, donde también estarán las sesiones de ensayo y grabación junto a los testimonios de cada uno de los protagonistas de esta historia.
En Coliumo
Por su parte la docente Carla Motto, fue beneficiada para realizar el proyecto Simbiosis del habitar, en el que explora el sentido de lo humano de la península de Coliumo, VIII región, cuyas características territoriales y la manera en que sus habitantes se relacionan y conviven con ese territorio -sobre todo desde los oficios particulares que allí se desarrollan por su geografía- le permiten a la artista la creación, en múltiples sentidos, de un proyecto que considera el espacio, las personas, el desarrollo social y cultural, así como también el experienciar la vida en comunidad que allí se genera.
Para ello Carla Motto, además de examinar el territorio local, reflexiona sobre la adaptación del hombre con los artefactos tecnológicos con los que convive a diario, lo cual cambia y se acentúa al cambiar el territorio y estilo de vida de cada persona.
“Planteo la idea de la búsqueda de un ‘Ser Simbionte’, metáfora que me acerca por un lado, al vínculo y la necesidad que se produce entre el ser humano y la máquina, y por otro, me lleva a cuestionar qué es lo que sucede producto de esta relación o simbiosis”, explica la artista.
A partir de diversos cuestionamientos Motto levanta el imaginario visual mediante la fotografía, que se suma a la interactividad y al uso de la síntesis gráfica con la técnica del esténcil.
Si bien este proyecto es de carácter individual, propicia la participación de los estudiantes Romina Tapia Candia, (segundo año) y Daniel Estrada de la Cruz (cuarto año). Además la iniciativa se vincula directamente con el taller de Reprografía que la profesora realiza en el DAV.
Cabe destacar que Simbiosis del habitar también resultó beneficiado con las residencias artísticas que anualmente impulsa la institución cultural Casapoli, ubicada precisamente en la península de Coliumo, comuna de Tomé, región del Bío-Bío, en donde la artista se estableció por todo el mes de mayo para realizar la primera parte de la residencia, siendo la segunda parte y final en marzo 2017.
En Las Encinas
Recuperación de un lugar, se titula el proyecto del docente del DAV, Rodrigo Vargas, que busca recuperar un terreno abandonado ubicado en dependencias del Departamento de Artes Visuales, precisamente entre las salas de coordinación docente y la biblioteca.
La idea es convertir ese espacio en una pequeña plaza, para que los estudiantes y docentes hagan uso de ésta. Para ello, el artista realizará una intervención a través de una escultura hecha por Vargas, la que además de respetar el entorno natural, exigirá la participación del espectador no solo mediante la observación, sino que también deberá adentrarse en el interior de la obra, que aludirá a la esencia sensitiva para transmitir al visitante una serie de sensaciones íntimas y esenciales, que recupera a través de la propia memoria del espectador.
“No pretendo un objeto evidente ni de una captación inmediata, busco el acercamiento del espectador, una visión pausada, no de reconocimiento inmediato si no de conocimiento lento, constante y profundo”, dijo Vargas y agregó: “Este trabajo ya no es el elemento circunscrito a un espacio arquitectónico establecido, sino, es parte esencial del conjunto del espacio urbano en tanto que lo define y lo valida. Quiero que establezca un sentido en el transeúnte de nuestra facultad, entre escultura y parque”.
Área de Investigación
La profesora Mónica Bate, resultó beneficiada con su proyecto The Life of Crystals: indagaciones tecnológicas, exploraciones contextuales, con el que busca dar continuidad al proyecto The Life of Crystals, por medio de una investigación de procedimientos y lenguajes que explore materiales y tecnologías para conseguir una mejor sonoridad de una instalación, cuyo recurso principal son los cristales piezoeléctricos.
“La piezoelectricidad es una propiedad de algunos materiales que, al ser presionados (stress mecánico), emiten electricidad de bajo voltaje. Esta propiedad es reversible, por lo que si al mismo material se le aplica electricidad, este vibrará. Materiales de este tipo son profusamente utilizados en micrófonos, parlantes y sensores de vibración”, aclara la artista.
Con este proyecto también se busca reunir testimonios de especialistas que converjan en un texto de reflexión interdisciplinar acerca del planteamiento de este fenómeno físico-químico, como generador de sentido y de imaginarios que tienen que ver con la naturaleza, la tecnología, la vida y el comportamiento orgánico. Para ello la profesora Bate trabajará junto a Álvaro Pimentel, estudiante de cuarto año del área de fotografía del DAV y del egresado Claudio Muñoz.