Luego de que el Senado Universitario no ratificara el Presupuesto 2016 de la Universidad de Chile presentado por Rectoría, fue constituida una Comisión Mixta, mandatada por el Estatuto de la Universidad de Chile para resolver finalmente la aprobación de la situación presupuestaria de la institución. Tras las citas, se dio por sancionado el Presupuesto 2016, acordándose además la creación de un Grupo de Trabajo que se enfocará a los temas que hicieron que la instancia normativa universitaria no lo ratificara en primera instancia.
De acuerdo a lo señalado por el informe de las reuniones de la comisión, "las observaciones formuladas por el Senado Universitario al Presupuesto Universitario 2016 están fundadas sobre la necesidad de construir este instrumento en concordancia con el objetivo estratégico del PDI 4.1", el cual plantea "ser efectivamente una institución integrada y transversal".
Ante esto, se determinó la creación del Grupo de Trabajo permanente para delinear los cuestionamientos que dicen relación con la inestabilidad financiera de las unidades que conforman la Universidad, los criterios históricos en la conformación y distribución del Fondo General y las pautas de endeudamiento.
Esta instancia se dedicará a "analizar y proponer el fortalecimiento de las medidas de seguimiento y control que procuren evitar que las unidades alcancen umbrales de desequilibrio financiero, entregando herramientas proactivas al Nivel Central para que el presupuesto sea una expresión fidedigna de los ingresos esperados y los gastos proyectados por la unidad. Esta tarea descansa sobre la idea de unidades responsablemente autónomas".
Según el texto, esta noción involucra los siguientes componentes:
- Las unidades no podrán presentar presupuestos deficitarios.
- La ejecución presupuestaria en cada unidad y a nivel central es el instrumento para asegurar que la Universidad se está ciñendo a su presupuesto.
- La autonomía financiera de las Unidades no es compatible con el desequilibrio financiero, en particular cuando este presenta una amenaza a la estabilidad financiera de otros organismos de la Universidad.
Asimismo, el Grupo de Trabajo deberá "revisar y proponer modificaciones a los parámetros generales a partir de los cuales se construye y ejecuta el presupuesto".
En este ámbito se pronunciará especialmente sobre:
- La estructura y montos de los peajes u overheads que se aplican a los ingresos de las diferentes actividades que realiza la Universidad y sus unidades.
- Los mecanismos que se utilizan para un uso adecuado de los recursos que se perciben por este concepto, en consideración tanto a las prioridades institucionales como al compromiso de mejorar y perfeccionar la gestión al interior de cada unidad, poniendo siempre el ejercicio financiero al servicio del desarrollo académico de ellas, estableciendo el costo de los programas de desarrollo institucional de cada unidad.
- La definición de mecanismos que permitan ponderar de manera adecuada eventuales presiones presupuestarias de las unidades a la luz de su desarrollo académico e identificar las condiciones bajo las cuales determinados gastos, propios del desarrollo académico, deberían ser cubiertos por el nivel central.
- Las condiciones bajo las cuales se puede hacer uso de líneas de crédito y aquellas bajo las cuales se requeriría contratar nuevos créditos que podrían requerir de trámites contemplados en los Estatutos.
Según el informe, el Grupo de Trabajo deberá entregar, a más tardaren octubre, sus conclusiones para que sean sometidas a consideración del Consejo Universitario y del Senado Universitario durante el mes de noviembre.
La instancia estará integrada por tres representantes del Consejo Universitario, tres del Senado Universitario y tres de Rectoría, eligiéndose un suplente por cada órgano.
Hablan los Senadores miembros de la comisión
El secretario del Senado Universitario, Willy Kracht, manifestó que "el mandato con que salimos finalmente de esa comisión fue trabajar en revisar cómo se estructura el presupuesto".
El rol de la comisión "es más acotada esta vez y lo interesante es que, a diferencia del año anterior, se le pide que tenga un documento entregado en octubre, de modo tal que pueda ser revisado por los distintos órganos que están sentados ahí, que son el Consejo Universitario y el Senado, y que sirva de insumo para la preparación del presupuesto del año siguiente".
Con respecto a lo que espera del Grupo de Trabajo, el Senador Kracht consideró que " nosotros veamos una primera señal que marque el inicio de un camino que haga de la Universidad un poquito más equitativa entre unidades".
"No tengo claridad de cuánto tiempo pueda tomar llegar a tener un presupuesto que sea más equilibrado en esos términos, y sí soy muy cauto en la proyección de expectativas porque la discusión que tenemos hoy es la misma discusión que había en los años 60, entonces probablemente hay otras cosas que mejorar o modificar para llegar a tener una Universidad más equitativa, no solo el presupuesto", agregó.
En tanto, el Senador Daniel Burgos, representante de los funcionarios de la Universidad de Chile, indicó que el trabajo "se desarrolló sobre las observaciones que realizó el Senado Universitario, las cuales, a grandes rasgos, dicen relación con la distribución presupuestaria y su coherencia con el PDI".
El Senador Burgos manifestó que "nosotros buscamos que las unidades tengan un desarrollo armónico y coherente, y vemos que las unidades no tienen su desarrollo armónico y coherente en virtud del presupuesto que existe (…) debemos de hacer una coherencia entre ese PDI más la forma de distribución presupuestaria".
Respecto al tema de los overheads o peajes, Burgos sostuvo que "lo que se abrió es un espacio de reflexión para cambiar en algún minuto, de manera mancomunada, porque es una decisión de carácter ejecutivo, no es una decisión del normativo estratégico, esta estructura de overheads que estamos conversando".
Además, señaló que "se hizo especial hincapié en la relación autonomía/responsabilidad que tienen las unidades académicas, que tienen una amplia autonomía en el manejo de sus recursos, pero esa autonomía siempre tiene que ir asociada a la responsabilidad financiera universitaria".
Para finalizar, se refirió a lo que hará el Grupo de Trabajo creado tras la aprobación de la comisión. Dijo que "esa instancia de diálogo nos va a permitir visibilizar, conversar y tomar medidas concretas, habiendo ya pasado por una etapa importante de diagnóstico en el último tiempo".