Acuerdo de paz en Colombia: disyuntivas y consecuencias sociales que se aproximan para el pueblo afectado por la guerrilla

Consecuencias para el pueblo colombiano tras el acuerdo de Paz
La firma histórica hará oficial el Acuerdo de Paz el próximo 26 de Septiembre, y el 02 de Octubre se desarrollará un plebiscito en el cual el pueblo colombiano podrá revalidar dicho acuerdo.
La firma histórica hará oficial el Acuerdo de Paz el próximo 26 de Septiembre, y el 02 de Octubre se desarrollará un plebiscito en el cual el pueblo colombiano podrá revalidar dicho acuerdo.
Un aspecto a considerar dentro de las consecuencias de la guerrilla es la situación que viven las víctimas.
Un aspecto a considerar dentro de las consecuencias de la guerrilla es la situación que viven las víctimas.
Víctor Reyes Morris posee una vasta experiencia de 41 años como profesor Universitario del Departamento de Sociología de la U. Nacional de Colombia.
Víctor Reyes Morris posee una vasta experiencia de 41 años como profesor Universitario del Departamento de Sociología de la U. Nacional de Colombia.

Las últimas semanas han estado marcadas por el anuncio del término del conflicto entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) y el gobierno de Colombia. La firma histórica hará oficial el Acuerdo de Paz el próximo 26 de Septiembre, que ya fue entregado por el Presidente Juan Manuel Santos a la Asamblea General de la ONU, y el 02 de Octubre se desarrollará un plebiscito en el cual el pueblo colombiano podrá revalidar dicho acuerdo.

En medio de este proceso, el sociólogo Víctor Reyes Morris dio la conferencia “El proceso de paz en Colombia” en la Facultad de Ciencias Sociales y concedió una entrevista a Radio Universidad de Chile, donde analizó las repercusiones en términos políticos y sociales de dar término a la guerrilla, especialmente, para los(as) ciudadanos(as) que vivieron el conflicto armado que se arrastra hace más de cinco décadas.

Dentro de dos semanas se dará una elección inédita, pues no se trata de una consulta ciudadana donde se escogerán personas sino que para responder a una pregunta clave, cuya respuesta mayoritaria para el académico de la Universidad Nacional de Colombia es difícil de predecir.

En entrevista con Patricio López de la Radio U. de Chile, Reyes explicó el impacto de votar por el Sí, significando, desde luego, “una ganancia para el Estado colombiano porque el mayor opositor o retador del Estado eran las FARC, un grupo armado de mucha trayectoria, con casi 60 años de oposición al Estado. De este modo, desparecerá como grupo armado y, con ello, el aparato estatal podrá dominar totalmente el territorio”.

Por otro lado, quienes opten por el No implica continuar la guerra para conseguir la paz. Es decir, esta postura tendría por objetivo principal no derrotar militarmente a las Fuerzas Armadas Revolucionaras hasta hacerlas desparecer, con el costo económico y, más aún, en vidas que conllevaría prolongar el conflicto.

La vida cotidiana sin la guerrilla

Al igual que el resto de los países de la región, Colombia mantiene una serie de problemas sociales como la desigualdad o concentración de la tierra por parte de ciertos grupos socioeconómicos. En este sentido, más allá del desarme este acuerdo de paz no cambia el modelo económico colombiano, a diferencia de lo señalado por quienes se oponen a él aseverando que “se entregaría el país al regimen Castro-chavista”, indicó el profesor Reyes.

“Yo creo que el sentido del acuerdo mismo es básicamente alcanzar un desarme y una participación política de este grupo”, señaló. Sin embargo, hay consideraciones necesarias de tener en cuenta. “El primer acuerdo -de seis que componen el gran acuerdo- sobre aspectos de desarrollo rural y la creación de un fondo de tierras de tres millones de hectáreas busca repartírselas a campesinos(as) desplazados(as), porque a través del fenómeno paramilitar en Colombia se desarrolló una reforma agraria “al revés” al no producirse una distribución territorial, sino más bien una concentración”, explicó.

Al respecto, otro problema que surge es la titularidad de la propiedad rural. Existen -por lo menos- siete millones de hectáreas con títulos dudosos de propiedad, por lo que hay que comenzar a legalizarlos y examinarlos para definir a quienes les pertenecen dichos terrenos. La actividad paramilitar le arrebató las tierras a muchas personas. "El actual gobierno colombiano ha desarrollado a través de dos organismos -una unidad de víctimas y una unidad de restitución de tierras- iniciativas para devolver las tierras a quienes les fueron despojadas", explicó el académico.

Otro aspecto a considerar dentro de las consecuencias de la guerrilla es la situación que viven las víctimas, “pues en Colombia se habla de unos seis millones de desplazados debido a la acción de los grupos violentos. Pero, en general, reitero que el acuerdo no cambia el modelo; es simplemente crear las condiciones para que las FARC puedan participar como partido político”, puntualizó Víctor Reyes Morris.

¿Acuerdo de la impunidad?

Tras el anuncio de paz, han surgido diversas declaraciones y reacciones, entre ellas la de José Miguel Vicanco, director de Human Rights Watch para América Latina, quien dijo que este era un acuerdo de la impunidad, que los crímenes de lesa humanidad eran imprescriptibles y la paz no podía consagrarse a cualquier precio. No obstante, según Víctor Reyes, todo está consagrado en el acuerdo de tal manera que no habrá impunidad.

Lo que si habrá es un sistema de justicia transicional que “exige verdad, reparación y el compromiso de no repetir esas conductas violentas. La mayor impunidad es la guerra misma, porque la guerra significa eso: ¿quién va a juzgar a los integrantes de las FARC estando en situación de guerra o en situación de conflicto como ha ocurrido hasta la actualidad?”, cuestionó.

El pueblo colombiano quiere la paz, incluso quienes votarán No en el plebiscito, aseguró el sociólogo. “Lo que pasa es que la quieren de otra manera. De una forma equivocada porque uno no puede prolongar la guerra para, aparentemente, lograr la paz. Esta es una paz posible que depende de la decisión de los(as) colombianos(as)”.

El ex decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la U. Nacional de Colombia recordó el fallecimiento de dos miembros de su familia a manos de las FARC. Ante estos casos, “ni mi familia ni yo podemos vivir del resentimiento y considero que la mejor salida es este acuerdo de paz”, enfatizó.

Víctor Reyes Morris posee una vasta experiencia de 41 años como profesor Universitario del Departamento de Sociología de la U. Nacional de Colombia. Ha participado en diversos proyectos de Investigación para diagnóstico y evaluación de Políticas Públicas. Fue Director del Departamento de Sociología de la Universidad Nacional y también Decano de la Facultad de Ciencias Sociales de dicha institución universitaria. Fue Representante a la Cámara y Concejal de Bogotá por tres períodos.