Este 24 y 30 de noviembre la Sala Museo Gabriela Mistral, espacio en Casa Central de la U. de Chile construido en homenaje a la primera poeta latinoamericana en recibir el Premio Nobel, abrió sus puertas a más de cien escolares de Santiago que disfrutaron del rescate patrimonial a través del teatro y la lectura. “Laura Bustos, palabras de una niña del siglo XIX” es el título de la obra que congregó a los estudiantes del Liceo Experimental Manuel de Salas, y “María Monvel Alma de poesía”, el cuentacuentos que la escritora Isabel Ossa presentó a las alumnas del colegio Madre Ana Eugenia de Pudahuel.
“Para nosotros son muy importantes estas actividades, por el aporte que pueden significar para la democratización de la cultura y la generación de experiencias para las y los estudiantes”, señaló Nathaly Calderón, investigadora guía de la Sala Museo, perteneciente al Archivo Central Andrés Bello de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones.
“Laura Bustos, palabras de una niña del siglo XIX” corresponde a una dramatización inspirada en el libro “Rimas de Laura Bustos”, que recrea la historia de esta joven que vivió y escribió poesía hasta los doce años, transformándose en la poeta de menor edad de Chile. Mientras que María Monvel fue una poeta chilena considerada por Gabriela Mistral como “la mejor poetisa de Chile, pero más que eso: una de las grandes poetisas de América”.
A partir de las obras y figuras de las escritoras presentadas, Laura Bustos y María Monvel, las y los estudiantes se acercaron a la literatura femenina e infantil de otras épocas, al mismo tiempo que a una parte poco conocida del patrimonio cultural nacional, como son las vidas y obras de importantes mujeres chilenas en la literatura. “Creo que fue una buena experiencia para los estudiantes, profesores y también para nosotros. Me parece que los profesores están abiertos a que sus estudiantes participen de instancias pedagógicas fuera del aula”, afirmó Calderón.
Frente a ello, Johanna Lizama, profesora del colegio Madre Ana Eugenia, que la actividad fue "muy motivadora para el tema de la lectura y lo interesante que es conocer la historia de las mujeres. Ahora las niñas también van a poder enseñarles a otras personas que no sólo hay hombres importantes en este país, sino que también mujeres muy importantes. Y eso mismo las impulsa a averiguar más”.
“Creo que el que niños y niñas conozcan lo que las mujeres han hecho en la historia de Chile sienta las bases para un progreso enorme a nivel social”, compartió Ossa, autora de “María Monvel Alma de poesía” y de otros cuentos de mujeres importantes y no tan conocidas de la historia chilena.
Por su parte, Alejandra Araya, directora del Archivo Central Andrés Bello, se refirió al valor de acercar a los estudiantes a lugares patrimoniales. “El patrimonio cultural es un espacio donde deben converger distintas miradas, es la posibilidad de construir diálogos para construir una memoria común y eso no se puede concretar sin jóvenes. Los estudiantes deben ser nuestros interlocutores principales y la Sala Museo Gabriela Mistral convoca a nuestra poeta, educadora e intelectual, justamente por el llamado que ella realiza a dialogar con los 'mozos' y a convocarlos en la construcción del presente de manera dinámica y activa”.
Una vez terminadas las actividades, los estudiantes tuvieron espacios para hacer preguntas y compartir sus reflexiones a raíz de lo que habían visto y oído. “Nos impresionó la gran cantidad de inquietudes que la obra provocó, desde el contenido hasta técnicas de actuación, esto nos deja ver el interés de los estudiantes”, señaló Calderón.
Sala Museo Gabriela Mistral
La Sala Museo Gabriela Mistral es un proyecto institucional dependiente de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, cuya gestión y concepto está a cargo del Archivo Central Andrés Bello. A un año de su inauguración, el núcleo patrimonial de la Casa de Estudio trabaja en consolidar el área educativa de este espacio, junto con generar formas más permanentes de relación con un público amplio y diverso.
Frente a ello, la directora del Archivo destaca el valor de la Sala Museo ya que “ésta permite explorar la dimensión educativa del patrimonio cultural, iniciando por su propio lugar de emplazamiento, la Casa Central de la Universidad de Chile y lo que ella representa hoy para la educación pública. En medio del tráfico y en el incesante movimiento, la Universidad de Chile les regala un espacio para detenerse, reflexionar y sorprenderse. Compartir lo que sabemos y tenemos, efectivamente es un mandato de origen: hacer de la Universidad de Chile el lugar de todos y todas”.
La Sala Museo rememora tres hitos de la relación de Gabriela Mistral con la Universidad de Chile: 1923, reconocimiento de su calidad de profesora; 1954, creación del grado Doctor Honoris Causa para ella -siendo la primera en recibirlo-; y 1957, velatorio de sus restos en el Salón de Honor del Palacio Universitario, única persona en recibir tal homenaje y oportunidad en que cientos de miles de personas entraron a darle un sentido adiós.
