Diabetóloga Gloria López:

"La diabetes es la causa de ceguera más importante en personas adultas"

"La diabetes es la causa de ceguera más importante en adultos"
La doctora Gloria López, es académica de la Facultad de Medicina y especialista en Medicina Interna y Diabetología del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.
La doctora Gloria López, es académica de la Facultad de Medicina y especialista en Medicina Interna y Diabetología del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.
Según la especialista, la diabetes tipo 2, ha tenido un fuerte aumento en nuestro país debido a los altos índices de obesidad y sedentarismo.
Según la especialista, la diabetes tipo 2, ha tenido un fuerte aumento en nuestro país debido a los altos índices de obesidad y sedentarismo.

En la actualidad la diabetes afecta a 415 millones de personas en el mundo, y se preveé alcanzará los 642 millones el año 2040. La principal característica de la diabetes son los niveles elevados de glucosa en la sangre, lo que se produce tanto por un defecto en la secreción de insulina como en la acción de esta hormona en diferentes órganos.

“Está demostrado que el nivel de azúcar alto, por un período prolongado provoca daño en todos los órganos, pero en los órganos en que más se nota ese daño es en los riñones, en el sistema nervioso -especialmente la circulación hacia los pies-, y en la retina porque se alteran las arterias, empiezan a romperse, y pueden provocar ceguera. La diabetes es la causa de ceguera más importante en personas adultas”, advirtió la doctora Gloria López especialista en diabetología de nuestra Universidad.

La diabetes tipo 2, que es la más común, se desarrolla debido a que el cuerpo no produce suficiente insulina o las células no hacen uso de ésta.

Este tipo de diabetes está ligada a diversos factores que incluyen a la herencia genética, el sedentarismo, la obesidad y la edad. La diabetes tipo 1, en cambio, se caracteriza porque el cuerpo no secreta insulina, y por lo general es diagnosticada en niños, adolescentes y jóvenes.

Para hacer frente a esta enfermedad es crucial que los pacientes conozcan a tiempo su diagnóstico, sigan los tratamientos indicados y asistan regularmente a los controles establecidos por el cuerpo médico, señaló la profesora López, quien enfatizó en que las consecuencias de esta enfermedad, “son totalmente evitables, pero como la gente no siente nada importante directamente por el azúcar alta, llegan a saber su diagnóstico muchas veces porque se fue a operar de una hernia, porque fue al dentista que lo mandó a hacer un examen de sangre, y así se encuentran con que tienen diabetes. Entonces, llevan años con la diabetes y el tratamiento en ese caso muchas veces no alcanza a prevenir las complicaciones”.

¿Cuándo uno debiese hacerse un examen para saber si tiene diabetes?

Todas las personas que tienen antecedentes familiares directos de diabetes, como papás hermanos o hijos, debieran hacerse un control para descartar que tengan diabetes o no. Si sale normal y no hay ningún cambio en la persona, se puede hacer cada tres años. Ese es un grupo que tiene que siempre hacerse exámenes desde los 11 años de edad. Y sobre los 45 años cualquier persona tiene que hacerse exámenes, independiente si tiene familiares con la enfermerdad y de su contextura física.

¿Por qué después de los 45 años?

Porque la diabetes es una enfermedad que aumenta con los años, ya que los factores que la desencadenan se relacionan también con factores que ocurren con el envejecimiento: se pierde masa muscular y aumenta la resistencia a la acción de la insulina, también se secreta un poco menos de esta sustancia. Entonces, es más fácil que sobre los 45 años aparezca la diabetes. Y si uno mira la curva, sobre los 65 años, aumenta mucho, tanto que según la Encuesta Nacional de Salud, uno de cada cuatro adultos mayores tiene diabetes.

Y cómo se explica este aumento tan importante de la diabetes en Chile en los últimos años.

La obesidad y la vida sedentaria, esos son los dos factores más importantes.

¿Por qué el sedentarismo influye en la diabetes?

Porque la actividad física mejora la acción de la insulina, entonces al actuar mejor, la propia insulina hace que se regule mejor la glicemia.

¿Cuál es la recomendación de actividad física en este caso?

Está demostrado que 150 minutos semanales de una caminata vigorosa, dividida por lo menos en tres veces a la semana, es muy bueno. Si se agrega a eso ejercicio de resistencia de brazos o piernas, dos veces a la semana, mejor todavía. Bailar también es una muy buena forma de no ser sedentario. Lo importante es que los períodos entre los ejercicios no sean mayores de tres días.

¿Qué porcentaje de la gente que sufre obesidad desarrolla una diabetes?

Si lo comparamos con personas que tienen un peso normal, es el doble.

Y si esas personas obsesas que desarrollan la diabetes bajan de peso, ¿desaparece la diabetes?

Eso se ha demostrado que puede ocurrir cuando el diagnóstico es muy precoz, y no se alcanza a tener mucho tiempo con azúcar alta en la sangre. En esos casos, bajar de peso puede hacer que desaparezca la diabetes.

Respecto a la diabetes tipo 1, ¿cómo es posible detectar esta enfermedad en lactantes o niños pequeños?

Nadie que tiene diabetes tipo 1 puede dejar de darse cuenta, o los papás o el propio niño. Los síntomas son que empiezan a orinar mucho, a comer mucho al principio, pero después ya no comen y empiezan a vomitar, y hacen lo que se llama una cetoacidosis diabética, que si no se pone insulina, eso tiene riesgo de mortalidad. Si un niño empieza a decaer y a verse mal, deshidratado, se debe llevar a urgencia y se le hace el examen. 

Las personas con diabetes tipo 1 que siguen su tratamiento, ¿pueden vivir una vida normal, tener las mismas expectativas de vida que el común de la gente?

Sí, si están bien tratados. Por eso que es muy importante que al principio los padres estén bien alertas sobre eso. Hoy existen sistemas cada vez más sofisticados para que uno pueda tratar de reproducir la normalidad desde afuera, con insulina, que se inyecte varias veces al día, que se aprenda a contar la cantidad de carbohidratos que tiene cada alimento que va a comer, y según eso sea la cantidad de insulina que se ponga, etc. Hay muchas formas que han permitido que los niños y jóvenes con diabetes puedan tener una vida que es totalmente normal, siempre que se acepten estas limitaciones que implica el control.