"Como trabajadores que nos desarrollamos en el ámbito del deporte estamos expuestos a convivir en una dinámica muy distinta a quienes trabajan en oficina o en proyectos. Hay un vínculo más estrecho con los estudiantes y debemos interiorizarnos en estas temáticas y ajustar nuestras metodologías de enseñanza para prevenir cualquier problema". Con estas palabras Daniel Muñoz, director de Deporte y Actividad Física de la Universidad de Chile, explicó la importancia del taller realizado hoy en la Casa Central, y en el que participaron alrededor de 40 personas.
Los convocados fueron profesores, entrenadores, técnicos y administrativos del área del deporte, quienes luego de recibir una charla introductoria a cargo de Carmen Andrade, directora de la Oficina de Igualdad de Oportunidades de Género de la VEXCOM, se dividieron en grupos para trabajar algunas preguntas propuestas, realizando una presentación final con las conclusiones y respuestas consensuadas.
El objetivo de este primer taller fue obtener algunas luces respecto a cómo se enfrenta cotidianamente este tema en el deporte universitario, de manera de generar otros talleres que permitan profundizar en la materia. "El proceso preventivo es de los más significativos para influir en prácticas que están interiorizadas entre las personas, y que por falta de conocimiento o diálogo se siguen produciendo", aseguró el director Muñoz.
Carmen Andrade destacó el interés de la Dirección de Deporte y Actividad Física por realizar esta capacitación en acoso sexual, y el entusiasmo para enfrentar un problema que afecta al conjunto de la comunidad universitaria. "Estas son disciplinas donde hay mucha interacción en un ambiente entre comillas menos formal que en una sala de clases, por ejemplo en campeonatos o giras, entonces deben informarse y establecer protocolos y las conductas apropiadas para que no se incurra en ningún tipo de abuso", afirmó Andrade.
Junto con ello, la directora de la Oficina de Igualdad de Oportunidades de Género aseguró que la realización de este tipo de instancias es el camino para enfrentar el acoso sexual. "Apuntamos a la aprobación de una política integral de prevención que contemple actividades de capacitación que esperamos llegue pronto al Senado, para que se discuta y sea mejorada. Parte de esa política implica realizar formación, capacitación y prevención de manera permanente".
Esta actividad se enmarca en los esfuerzos de la Casa de Bello en esta materia, incluyendo la generación de un manual con orientaciones para enfrentar el acoso, la capacitación de fiscales que puedan hacerse cargo de sumarios relacionados a este tipo de temas, y la reciente aprobación de un protocolo para realizar denuncias de acoso sexual, laboral y discriminación arbitraria.
El acoso en cifras
En su presentación introductoria, Andrade explicó que constituyen acoso sexual conductas explícitas o implícitas como contactos físicos innecesarios, la discusión de actividades sexuales, la utilización de términos humillantes y/o de connotación sexual y lenguaje ofensivo, el trato preferente o ventajas a quienes consienten en participar en actividades sexuales, las amenazas para exigir conductas no deseadas y las insinuaciones o proposiciones sexuales.
Según cifras del Servicio Nacional de la Mujer (Sernam), un 63 por ciento de las personas, mujeres en su mayoría, opina que el acoso sexual es frecuente en el trabajo, mientra que el 44 por ciento declara haberlo experimentado. Además, un 80 por ciento de las situaciones de acoso se da contexto de poder.
Otro dato importante dice relación con las situaciones de acoso que suceden en el espacio público. Así, en el transporte público y espacios adyacentes hay alto grado de violencia y acoso sexual (10 por ciento de los hombres y 28 por ciento de las mujeres reconocen haberlo sufrido, mientras que los agresores son mayoritariamente hombres). De estas situaciones de acoso, entre un 40 y 50 por ciento de las agresiones ocurren en las micros, mientras que entre un 20 y 30 por ciento en la calle y entre un 15 y un 20 por ciento en el metro.
En cuanto al espacio universitario, diversas investigaciones internacionales señalan que en universidades norteamericanas y europeas un 27 por ciento de las estudiantes declaran haber sufrido algún tipo de acoso, y un 58 por ciento asegura haber vivido o conocido alguna situación de violencia de género en la universidad.
En la Universidad de Chile, por su parte, un cuarto de las personas declararon conocer historias sobre acoso y agresiones sexuales perpetradas en espacios universitarios, viajes de estudios y fiestas de estudiantes, mientras que un 14,7 por ciento aseguraron haberlos sufrido directamente en su trayectoria universitaria.