“La calidad del proceso formativo tiene relación con el trabajo educativo en grupos diversos. En ese sentido, abrir o generar diferentes tipos de ingresos a la Universidad no sólo tiene que ver con temas éticos o pendientes respecto de generar equidad, sino que con una concepción de calidad educativa que está a la base de esa decisión". La directora de Pregrado de la Universidad de Chile, Leonor Armanet, señaló además que la institución al generar una política de equidad e inclusión, se compromete con un sello en la experiencia educativa del pregrado.
Dentro de esta versión del proceso de matrículas, uno de los hitos es que por primera vez en nuestra Universidad la mayoría de las personas matriculadas son mujeres, con un 51,89 por ciento. Esto es resultado de un esfuerzo sostenido de la institución por contar con una composición más equitativa en materia de género en sus aulas, a partir de iniciativas como el Programa de Equidad de Género de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, mediante el cual ingresan 40 mujeres al programa de Ingeniería y Ciencias Plan Común.
Otro de los datos destacados de este año es que los matriculados que son primera generación de estudiantes universitarios en sus familias son un 45,6 por ciento.
Además, por sexto año consecutivo, el número de matriculados a nivel de la Universidad a través del Sistema de Ingreso Prioritario de Equidad Educativa (SIPEE) aumentó, totalizando 313 matriculados. Esta iniciativa busca que aquellos jóvenes que cursaron sus cuatro años de enseñanza media en liceos municipales, pero que no lograron el puntaje necesario para ingresar de modo tradicional a pesar de poseer excelencia académica, puedan incorporarse a la Universidad de Chile.
En cuanto al tipo de colegio de los que provienen los estudiantes matriculados, los jóvenes provenientes de establecimientos particulares pagados, subvencionados y liceos municipales están representados en porcentajes similares, siendo los primeros un 30,26 por ciento, quienes vienen de particulares subvencionados un 39,90 por ciento, y los de liceos municipales un 27,98 por ciento.
Respecto a los indicadores socioeconómicos, la tasa de estudiantes pertenecientes al 53 por ciento más vulnerable del país, según el Indice de Vulnerabilidad de Establecimiento, parámetro de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb), alcanzó a un 28,8 por ciento de los matriculados, cifra similar a la del proceso 2016, reafirmando el destacado lugar de estos estudiantes en la Casa de Bello y aportando a la diversidad de la comunidad universitaria.