Arte y tecnología

Profs. Francisca Morand y Javier Jaimovich muestran su trabajo en ISEA

Profs. Francisca Morand y Javier Jaimovich muestran su trabajo en ISEA
Los académicos realizaron una charla en la que demostraron el uso de las herramientas tecnológicas empleadas en su proyecto "Emovere".
Los académicos realizaron una charla en la que demostraron el uso de las herramientas tecnológicas empleadas en su proyecto "Emovere".
Durante el taller los profesores invitaron a los asistentes a interactuar con los sensores fisiológicos para percibir sus propias bioseñales.
Durante el taller los profesores invitaron a los asistentes a interactuar con los sensores fisiológicos para percibir sus propias bioseñales.

Sistemas de medición de pulso cardíaco y tensión muscular incorporados a la creación artística fueron algunas de las herramientas que los académicos de la Facultad de Artes, Francisca Morand y Javier Jaimovich, dieron a conocer a los asistentes del taller y la charla realizada en la versión 2017 de ISEA (International Symposium on Electronic Art), uno de los encuentros más importantes de arte y tecnología en el mundo.

En el evento realizado en Manizales, Colombia, la académica del Departamento de Danza y el académico del Departamento de Sonido hicieron una demostración del uso de las herramientas tecnológicas empleadas en su proyecto Emovere, que se centra en el desarrollo de danza interactiva, empleando señales fisiológicas para amplificar, entender y conectarse con las funciones internas del cuerpo humano para la generación de ambientes sonoros.

"Fue una experiencia súper completa que nos sirvió para observar el panorama y poder ubicar nuestro trabajo dentro del contexto de lo que se está desarrollando en distintos países, de acuerdo a las tendencias, y a las universidades también. Hay gente que está reflexionando sobre estas nuevas interdisciplinas que se generan entre arte y tecnología", destaca la profesora y subdirectora del Departamento de Danza, Francisca Morand.

La académica valora la oportunidad de haberse encontrado con diversos tipos de expresiones artísticas en un mismo lugar y sostiene que realizar una actividad de esta envergadura a nivel local sería complejo, pues habría que garantizar condiciones de infraestructura y organización  que respondan a las exigencias tecnológicas que implica "producir un evento que congrega 350 artistas, estudiantes y académicos de todo el mundo en torno a las nuevas artes y la tecnología."

Bioseñales para crear

En su charla Self- Intersection: interactive design for biosignals, dance, sound and voice, los académicos expusieron cómo han desarrollado un proyecto de investigación y creación artística en torno al uso de señales fisiológicas y las tecnologías disponibles para medirlas. Se trató de "una presentación académica, donde hablamos del proyecto Emovere, de las obras que hemos hecho y de lo que estamos trabajando actualmente", afirma el Prof. Javier Jaimovich.

En tanto, en el taller Interactive Performances for Dance, Sound and Biosignals los profesores invitaron a los asistentes a interactuar con los sensores fisiológicos para percibir sus propias bioseñales y luego, ver cómo estas son capaces de generar un sistema interactivo de danza y sonido.

"Durante el taller pudimos estar en contacto con un grupo de 30 personas, aproximadamente, durante toda una mañana, lo que nos permitió tener tiempo para generar más conversaciones y tener una mejor llegada con los participantes. En términos generales el taller resultó sumamente enriquecedor", señala el Prof. Jaimovich.

"La idea era que los asistentes entendieran, primero, qué es una bioseñal y supieran que ésta provee toda una fuente de información numérica que está hablando de los estados del cuerpo, y que esos estados del cuerpo –según el tipo de bioseñal- generan un patrón que es especial y especifico, de acuerdo al tipo de sensor", explica la Prof. Morand.

Además de esto, los talleristas pudieron probar un sistema que los académicos están comenzando a desarrollar para una nueva fase de Emovere, sumándose a una experiencia cocreativa que utiliza el ritmo cardíaco y el habla con el objetivo de crear un ambiente de sonido basado en la exploración sonora y el biofeedback.

"Hicimos un ejercicio de selección y de elaboración de algunas palabras. Invitamos al público a medir sus propias señales de pulso cardiaco y a expresar diversas palabras frente a un micrófono”, explica el Prof. Jaimovich. "Luego, yo utilizaba esas grabaciones para generar una especie de atmósfera sonora con las voces de todos los participantes", complementa la Prof. Morand.

"Ambas actividades fueron muy bien recibidas, especialmente el taller”, afirma el Prof. Jaimovich. "Fue muy interesante poder conocer qué se está haciendo en otros países latinoamericanos y para nosotros, como proyecto, fue muy interesante contactarnos con otros creadores y poder intercambiar opiniones, visiones. Esperamos poder seguir en contacto con ellos en el futuro", añade.