Durante dos días la Casa Central de la U. de Chile recibió a las y los campesinos de la Reforma Agraria y junto a ellos conmemoró los 50 años de este hito, considerado uno de los más relevantes del siglo XX en Chile. Con más de nueve mesas de conversación, una exposición fotográfica y un ciclo de cine pensado en este proceso, la Casa de Bello rindió homenaje a quienes fueron protagonistas de esta historia e invitó a pensar el futuro a partir de esta revisión. El ex ministro de Agricultura, Jacques Chonchol; el ex vicepresidente ejecutivo de la Corporación de Reforma Agraria (CORA), Rafael Moreno; así como los dirigentes campesinos Juan Enrique Mellado, Óscar de la Fuente y Quielo Ribera fueron parte de estos reconocimientos y actividades.
“Creo que cada época tiene sus tareas. La Reforma Agraria cumplió la suya en los años ‘60 y ‘70, terminando definitivamente con el viejo latifundio que venía casi de la época colonial y que concentraba la tierra en las pocas manos de una oligarquía poderosa que tenía poder político, económico y social y que no contribuía al desarrollo propiamente del país”, señaló el ex ministro Chonchol, quien también se refirió a los desafíos de la época actual, consecutiva de una contrarreforma instaurada en dictadura.
“¿Cuáles son las tareas que yo veo para adelante? Primero, tenemos que recuperar definitivamente para la nación el uso del agua. La segunda, que a mi juicio es muy importante y suele ser olvidada, tenemos que defender la tierra cuando hoy se está perdiendo gran parte de ella, especialmente por un negocio que se está instalando: la expansión urbana que no tiene límites. Y tercero, fundamental, hay que recuperar para los campesinos un poder sindical. Esto es crucial en una sociedad capitalista donde si los campesinos no tienen sindicatos poderosos con los que poder negociar mejores condiciones para ellos, simplemente van a ser dominados, explotados y no vamos a poder seguir adelante. Estas son las tres tareas que tenemos por delante en la nueva etapa de la Reforma Agraria”, expresó Chonchol.
Sus palabras estuvieron en el marco de la primera mesa titulada “El proceso de Reforma Agraria en Chile”, la cual contó con la presencia de los ya mencionados Jacques Chonchol y Rafael Moreno, el profesor Manuel Antonio Garretón, Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales, y Óscar Valladares, dirigente fundador de la Confederación Nacional Unidad Obrero Campesina, UOC.
Por su parte, el profesor Manuel Antonio Garretón reflexionó en torno a la Reforma Agraria como expresión de la problemática del “desarrollo y la revolución” en Chile. El sociólogo destacó que son precisamente sus hitos “los puntos claves de los cuales se carece hoy: el término de un mundo social y cultural; un ejemplo muy significativo de la predominancia de proyectos históricos globales colectivos de transformación; y la expresión de una relación particular entre el mundo político partidario, el mundo intelectual y el mundo social”.
En esa misma línea, el ex senador Moreno se refirió a los logros de la Reforma Agraria, reconociéndolos como cimientos para el modelo actual. “Hoy hay una sociedad estructurada sobre la base de reconocer que todos son dignos de un tratamiento no sólo en Derechos Humanos sino en sus derechos políticos y sociales. Esa es la razón por la que sentimos alegría de poder recordar lo que fue, probablemente, la liberación del 40 por ciento de la población chilena”.
“Movilización Campesina y Reforma Agraria” fue el título de otra de las mesas que, al igual que el resto, llenó el salón de honor de la Casa Central. “Había que tener valentía para enfrentar lo que se enfrentó para levantar la dignidad de la población campesina. Porque no es fácil, conociendo la estructura de este país. Para eso se necesitó consciencia social, y los campesinos no fallamos”, señaló Quielo Ribera, dirigente de la Confederación Nehuén y tesorero nacional del Movimiento Unitario Campesino y Etnias de Chile, MUCECH.
¿Reforma Agraria para el Chile del siglo XXI?
El cierre de las instancias de conversación estuvo enfocado en la pregunta “¿Una nueva Reforma Agraria para el Chile del siglo XXI?”, donde expusieron el subdirector general y representante regional de FAO para América Latina y el Caribe, Julio Berdegué; el presidente del Movimiento Unitario Campesino y Etnias de Chile, Orlando Contreras; el presidente de la Federación Red Nacional Apícola, Misael Cuevas; la directora de la Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas (Anamuri), Francisca Rodríguez; la directora del Núcleo de Estudios de Política Agraria de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, Maruja Cortés; y el presidente de la Corporación Alianza para la Innovación y Desarrollo Rural, Patricio Molina.
“En la Reforma Agraria las mujeres fuimos omitidas, no ausentes, pero sí omitidas. Hoy sería impensable una nueva propuesta de transformación en la cultura y el desarrollo rural que perfile una Reforma Agraria integral y popular hecha por la gente sin que nosotras estuviéramos. Nadie hoy podría desconocer que en los periodos más difíciles las mujeres hemos sostenido las familias campesinas. Por tanto, la presencia de las mujeres hace más participativa la acción del mundo rural y hace más integral la lucha de los campesinos y campesinas. Las mujeres hemos contribuido y queremos desde esa mirada plantear una nueva reforma”. Esas fueron parte de las palabras de Francisca Rodríguez al reflexionar sobre los nuevos desafíos de una Reforma Agraria para el presente.
En esta línea, los panelistas también abordaron la necesidad de una reforma integral para el país, donde se trabaje la soberanía alimentaria, las problemáticas y los fenómenos que ha traído el desarrollo urbano, el cambio climático, la concentración y calidad del agua, el recambio generacional, el desarrollo tecnológico, entre otros temas. “El Estado no debe tener miedo de desarrollar a este sector -campesino-, este que cumple un papel importante en la alimentación del pueblo”, expresó Orlando Contreras.
Una reflexión oportuna
Expositores y asistentes expresaron sus agradecimientos hacia la U. de Chile y a los organizadores de esta iniciativa en cada uso de la palabra. La actividad fue producto del trabajo conjunto de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la U. de Chile, el Ministerio de Agricultura, la Dibam, la FAO, Flacso y el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos.
Las palabras finales del seminario estuvieron a cargo de la vicerrectora de Extensión y Comunicaciones, Faride Zeran, quien destacó la participación de cada una de las personas y valoró el desarrollo de este encuentro. “Estos días abrimos la memoria, abrimos una interrogante sobre nuestro pasado, y lo hicimos sobre una de las reformas, sin duda, más relevante del siglo XX. En ese sentido, este interrogar es también una forma de mirarnos y ver desde qué país estamos observando estos 50 años de la Reforma Agraria”.
El Salón de Honor cerró sus puertas luego de la proyección de la película “El Chacal de Nahueltoro” (1969) de Miguel Littín. El director asistió a su presentación y compartió con el público en compañía de Guillermo Cahn, asistente de dirección del filme, y el reconocido actor Luis Alarcón.