En el mundo se realizan alrededor de 6.500 producciones cinematográficas anuales, reflejando el crecimiento sostenido que ha experimentado el campo audiovisual durante los últimos años y donde el ejercicio de formar e integrar a públicos se ha convertido en un problema en sí mismo, al requerir estrategias para formarlos en el conocimiento de este lenguaje, además de construir espacios comunes que reflexionen sobre el área.
Con el objetivo de comparar experiencias entre países y visualizar el circuito chileno en cuanto a estrategias y perspectivas de trabajo, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA), junto al apoyo de la Universidad de Chile, organizó el Primer Seminario de Formación de Públicos para el Audiovisual, que contó con exposiciones, conferencias y mesas de diálogo presididas por expertos de Francia, Alemania, México y Chile.
Durante la actividad, realizada el martes 28 y miércoles 29 de noviembre en Casa Central, se revisó la Política Nacional del Campo Audiovisual 2017-2022, lanzada por el CNCA en diciembre de 2016, para obtener conclusiones e impulsar lineamientos conjuntos hacia nuevas estrategias estatales. También se discutieron fundamentos teóricos con el fin de levantar información sobre acceso, participación, institucionalidad, inclusión de niños y jóvenes, y el rol de los festivales o espacios de exhibición para la formación de públicos.
De acuerdo al ministro presidente del CNCA, Ernesto Ottone, quien inauguró el seminario, “uno de los temas más relevantes de las políticas quinquenales lanzadas el 11 de diciembre de 2016 fue la falta de formación para nuevos públicos o mediación en lo audiovisual, es decir, de qué modo podíamos avanzar para crear un usuario cautivo que no sólo fuera a ver películas nacionales, sino también entender lo que hay tras las producciones. Todo lo que ha crecido este ámbito en producción y circulación aún no logra hacer crecer a los espectadores a la par, por lo que el Consejo decidió adelantarse con instancias de participación y diálogo, además de crear un plan nacional territorial que irá mutando de acuerdo a las necesidades de las localidades”.
En tanto, el Rector de la U. de Chile, Ennio Vivaldi, enfatizó que “hablar de formación de públicos surge con la esperanza de revertir un ambiente de desinterés por la cultura y volcarla hacia otras actividades. Es nuestro deber tomar una actitud positiva e invitar a ciudadanos que puedan reflexionar de forma introspectiva. En la medida en que tengamos un público más crítico, tendremos una sociedad mucho más activa, preocupada y con más herramientas para entenderse a sí misma. Pareciera ser que actualmente no sabemos lo que la sociedad chilena piensa, pues lo ocurrido con las encuestas para las elecciones sugiere que estamos haciendo políticas a partir de supuestos equivocados, siendo importante que las experiencias culturales lleguen a todas partes”.
Entre los expositores destacó la académica de la Universidad Autónoma Metropolitana de México, Ana Rosas, quien dictó la conferencia inaugural “Formación de públicos: fundamentos y perspectivas”. En sus palabras señaló el caso de Chile como una realidad en toda Latinoamérica, pues aumenta la producción, existe un avance en la presentación del cine chileno en festivales o mercados internacionales, pero en la taquilla nacional todavía sigue débil su presencia.
Rosas comentó que “la idea es pensar que no son suficientes las políticas culturales que se enfocan exclusivamente en la producción, ya que éstas deben construir puentes con los públicos que las leerán o que las verán en el cine y en múltiples plataformas disponibles actualmente. No es suficiente pensar en cómo llevar la oferta y proyectar el cine o la literatura chilena, por ejemplo, ya que también tenemos que reflexionar en cómo el Estado se hace cargo de proveer habilidades, capacidades y sensibilidades en espacios informales para relacionarse con esas ofertas culturales”.
El presidente de la Organización Mundolibre y director del Campamento-Festival de Cine Infantil Pichikeche, Rolando Carileo, afirmó que “buscamos que el cine sea una materia en la sala de clases y tenemos que re direccionar esto, ya que actualmente en los colegios se trabaja de forma muy individual, mientras que el proceso de creación requiere una dinámica de equipo. Por tanto, lo que planteamos es una revolución que busca incidir en la metodología educativa del país y donde hemos trabajado desde 2011 con talleres para niños y jóvenes del sur de Chile, intentando también abrir la mente de aquellos que toman las decisiones a nivel gubernamental”.
Por su parte, la directora de la Cineteca Nacional de Chile, Mónica Villarroel, concluyó que “este seminario es una iniciativa fundamental, pues se instala como una oportunidad para reflexionar en conjunto entre los distintos sectores. La idea es que nuestros públicos se acerquen a las producciones audiovisuales del país y tenemos que partir por pensar sobre el rol de las propias instituciones y desde una política de derechos culturales. Esta discusión tiene relación con ampliar el acceso, democratizarlo, educar y mantenerse presente en los diálogos sobre programas o estrategias de futuros espectadores”.