Ubicado en China

Universidad de Chile exporta tecnología para mejorar mediciones del radiotelescopio más grande del mundo

U. de Chile será parte del radiotelescopio más grande del mundo
Franco Curotto, estudiante del Magíster en Ingeniería Eléctrica; Ran Duan, investigador del radiotelescopio FAST; y Ricardo Finger, académico del Departamento de Astronomía.
Franco Curotto, estudiante del Magíster en Ingeniería Eléctrica; Ran Duan, investigador del radiotelescopio FAST; y Ricardo Finger, académico del Departamento de Astronomía.
Con un diámetro equivalente a 30 canchas de fútbol, el radiotelescopio FAST es considerado el más grande del mundo y es una de las principales apuestas del ambicioso programa espacial chino.
Con un diámetro equivalente a 30 canchas de fútbol, el radiotelescopio FAST es considerado el más grande del mundo y es una de las principales apuestas del ambicioso programa espacial chino.

Eliminar la contaminación electromagnética de origen humano de las mediciones astronómicas realizadas por el potente radiotelescopio FAST, es el objetivo del filtro creado por Franco Curotto, estudiante del Magíster de Ingeniería Eléctrica de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile y miembro del Laboratorio de Ondas Milimétricas del Departamento de Astronomía (DAS). La nueva tecnología fue adquirida por China para garantizar el correcto funcionamiento del Telescopio de Apertura Esférica o FAST (así denominado por su sigla en inglés), considerado el más grande del mundo con un diámetro equivalente a 30 canchas de fútbol.

El radiotelescopio, ubicado en la provincia de Guizhou, en el suroeste de China, se ha transformado en uno de los principales instrumentos del ambicioso programa espacial con el cual China aspira a liderar el área de innovación científica. Su principal misión será detectar la existencia de hidrógeno neutro en galaxias distantes, púlsares lejanos y ondas gravitacionales de baja intensidad, además de ayudar en la búsqueda de señales de vida extraterrestre.

Según explicaron desde el DAS, el radiotelescopio fue desarrollado en un área de roca kárstica que le aísla de vientos y contempló el desalojo de habitantes en cinco kilómetros a la redonda para evitar interferencias de radiofrecuencia, pero las perturbaciones electromagnéticas continuaban siendo un problema para el proyecto. En este contexto, la solución llegó desde la innovación desarrollada por la Casa de Bello.

El principal responsable de esta tecnología, Franco Curotto, explicó que "por interferencia electromagnética se entienden todas las emisiones de origen humano que contaminan las observaciones en radioastronomía, como -por ejemplo- las transmisiones de radio, de TV, comunicación celular, señales de GPS, Internet móvil, etc. A diferencia del radiotelescopio ALMA, que observa en frecuencias donde hay pocas aplicaciones comerciales y por tanto no sufre mucho de contaminación, el FAST lo hace justo en las bandas de radio, televisión y telefonía móvil, por lo que es uno de los telescopios más susceptibles a esta interferencia, especialmente hoy en día que existen tantas formas de comunicación inalámbrica y esto fue la inspiración para iniciar este proyecto".

De acuerdo al investigador, el filtro diseñado es un sistema electrónico que se agrega a la parte digital de los telescopios. "Al agregar una segunda antena similar a las antenas de radio de los autos, que mida la interferencia en el ambiente, el filtro es capaz de comparar la señal del telescopio y la antena, detectar qué señales del telescopio son interferencia y restarla de ambas señales para obtener una señal astronómica limpia", profundizó respecto a su funcionamiento.

Actualmente el equipo del Departamento de Astronomía vinculado a esta iniciativa se encuentra en China, donde permanecerá hasta mediados de diciembre para realizar las pruebas preliminares en el telescopio FAST antes de la instalación definitiva del filtro. Ricardo Finger, académico del DAS y supervisor de este trabajo de tesis, manifestó el orgullo por participar en una misión de esta envergadura. "Que tecnología desarrollada por nuestro grupo sea exportada a uno de los mayores observatorios en el planeta, en mi opinión demuestra una vez más que el grupo de instrumentación astronómica de la Universidad de Chile es un actor relevante en el mundo", aseguró.