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Profesor Luis Montes Rojas: "La escultura hoy es un lugar privilegiado para pensar el presente"

Profesor Luis Montes Rojas reflexiona sobre la Escultura Contemporánea
El escultor y académico del DAV, Luis Montes Rojas, encabeza el tercer módulo del "Diplomado de Extensión en Artes Visuales".
El escultor y académico del DAV, Luis Montes Rojas, encabeza el tercer módulo del "Diplomado de Extensión en Artes Visuales".
En él aborda la producción escultórica moderna en Chile, desde sus orígenes en la fundación de la Cátedra de Escultura en la Academia de Bellas Artes.
En él aborda la producción escultórica moderna en Chile, desde sus orígenes en la fundación de la Cátedra de Escultura en la Academia de Bellas Artes.
"Este curso no adscribe a una perspectiva construida desde la historia del arte, sino más bien está orientado a referir procesos, diálogos e interjecciones que subyacen en la producción de obra", dijo
"Este curso no adscribe a una perspectiva construida desde la historia del arte, sino más bien está orientado a referir procesos, diálogos e interjecciones que subyacen en la producción de obra", dijo
"Hacer escultura hoy significa comprender nuestro momento histórico desde una incomodidad, desde un contrapunto", afirmó.
"Hacer escultura hoy significa comprender nuestro momento histórico desde una incomodidad, desde un contrapunto", afirmó.
El curso toma como referentes a Rebeca Matte, Virginio Arias y Nicanor Plaza, Samuel Román, Marta Colvin y Lily Garafulic.
El curso toma como referentes a Rebeca Matte, Virginio Arias y Nicanor Plaza, Samuel Román, Marta Colvin y Lily Garafulic.
Para el artista visual del DAV, no se puede entender una noción contemporánea de arte, sin atender el desarrollo de las prácticas escultóricas.
Para el artista visual del DAV, no se puede entender una noción contemporánea de arte, sin atender el desarrollo de las prácticas escultóricas.

Escultura Contemporánea se llama el tercer módulo del Diploma de Extensión en Artes Visuales, que actualmente imparte el artista visual y académico del DAV, Luis Montes Rojas. En él aborda la producción escultórica moderna en Chile, desde sus orígenes en la fundación de la Cátedra de Escultura en la Academia de Bellas Artes, hasta la instalación de una noción de contemporaneidad a mediados de los 90, lo que incluye la producción escultórica hasta nuestros días.

“Este curso no adscribe a una perspectiva construida desde la historia del arte, sino más bien está orientado a referir procesos, diálogos e interjecciones que subyacen en la producción de obra, en las relaciones que existe entre institución y producción artística, entre artistas; sus acercamientos y distancias; las rupturas que permitieron transformaciones, etc.”, explicó Montes Rojas.

De esta forma el curso analiza ciertos períodos artísticos, pero en tensión con la historia política, tomando en cuenta que según el artista visual “no se puede pensar el desarrollo de la escultura sin considerar, por ejemplo, la apertura de la cátedra de escultura en 1854, pero también el cierre de la Academia en 1928, o la intervención de la Universidad y la Facultad en 1973. Creo que se van proponiendo expresiones de una voluntad del Estado que va imprimiéndose en el desarrollo o la supresión de ciertos procesos”

Desde esa misma perspectiva y en base a la especial situación de la escultura respecto de su vinculación con el mundo material y del objeto, la sitúan en una ventajosa situación para visualizar las implicancias de la implantación del modelo neoliberal en nuestro país, y por ende, su presencia se hace relevante en la producción artística en Chile en los últimos 30 años.

“Hacer escultura hoy significa comprender nuestro momento histórico desde una incomodidad, desde un contrapunto. La escultura está a contratiempo, y es en esa adversidad donde se hace contemporánea porque está obligada a reflexionar permanentemente su situación. La escultura hoy es un lugar privilegiado para pensar el presente”, expresó el profesor Montes.

De este modo el curso “Escultura Contemporánea” comprende una lectura general del panorama de la escultura chilena para comprobar la manera en que se instala una noción contemporánea durante los años noventa, leyendo las obras de los artistas que conformaron una nueva escena que se contrasta con una noción moderna predominante la producción escultórica en Chile.

Así el curso toma como referentes a Rebeca Matte, Virginio Arias y Nicanor Plaza, Samuel Román, Marta Colvin y Lily Garafulic. También a Juan Egenau, Carlos Ortúzar, Pablo Langlois Vicuña, Valentina Cruz, escultores que según Montes Rojas “permiten establecer un relato sobre la escultura”.

Y agregó que: “Los tres primeros como artistas que materializaron el academicismo. Después Román, Colvin y Garafulic, como artistas que dotaron de un lenguaje y una poética particular a la escultura chilena. Posteriormente a Egenau y Ortúzar como artistas que desarrollan la escultura en aspectos particulares pero sin desprenderse totalmente de una concepción moderna de la misma. En el caso de Langlois Vicuña y Valentina Cruz son artistas que marcan un afuera que tensiona las prácticas y que anticipa una voluntad política de la obra. Estos escultores son relevantes, pero también consideraremos la revisión de artistas de la talla de Lorenzo Domínguez, Mario Irarrázabal o Federico Assler, entre otros”.

Para el artista visual del DAV, no se puede entender una noción contemporánea de arte, sin atender el desarrollo de las prácticas escultóricas; sin comprender sus implicancias y la manera en que sus cuestionamientos permiten entender nuestra situación histórica. Por ese motivo en la última clase además se aborda la trayectoria y obra de escultores como Pablo Rivera y Adolfo Martínez, también académicos del DAV.

En el caso de Pablo Rivera, me parece que su trabajo aborda decisivamente la reflexividad en vinculación con la escultura, vale decir, no sólo la construcción de un discurso desde la obra sino también la posibilidad de establecer el cuestionamiento al interior de la propia disciplina, implantando una visión crítica en y desde las prácticas. La obra de Adolfo Martínez por su parte, representa la instalación de una referencia subjetiva que comporta una poética, la que intenta abordar su realidad más próxima desde una perspectiva singular, pero que termina por extrapolarse para interpelar al espectador en la comprensión de un presente lleno de complejidades”, afirmó el escultor.

Finalmente, al ser consultado por la importancia que hoy en día tiene la escultura, Luis Montes Rojas concluyó diciendo que, “nadie puede negar la relevancia que ha tenido en la construcción de una idea de arte contemporáneo, especialmente desde el minimal y el land art. Recientemente vimos la preponderancia de un evento como el Skulptur Projekte en Münster, que marca el derrotero del arte contemporáneo, donde prevalece una idea de escultura que prolonga la lógica del campo expandido. Entonces, la escultura no se retiene en sus límites disciplinares para seguir trabajando nociones fundamentales para el arte de hoy, como el tiempo, la localización, la identidad, el poder, la historia y la valía del objeto”.