Memoria

Vicerrectora Faride Zeran participó en ciclo de cine en conmemoración de los 45 años del golpe

Vicerrectora Faride Zeran participó en cineforo a 45 años del golpe
Faride Zeran, Vicerrectora de Extensión y Comunicaciones,
Faride Zeran, Vicerrectora de Extensión y Comunicaciones,
Álvaro de la Barra, director de "Venían a buscarme".
Álvaro de la Barra, director de "Venían a buscarme".
Ciclo de Derechos Humanos "A 45 años del golpe de Estado, ni un paso atrás en verdad, justicia y memoria", organizado por la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile.
Ciclo de Derechos Humanos "A 45 años del golpe de Estado, ni un paso atrás en verdad, justicia y memoria", organizado por la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile.

En el marco del ciclo de cine “Tres generaciones en la memoria”, organizado por la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones (Vexcom) como parte del ciclo de Derechos Humanos “A 45 años del golpe de Estado, ni un paso atrás en verdad, justicia y memoria”, el pasado lunes 10 de septiembre se exhibió el documental “Venían a buscarme” de Álvaro de la Barra, en la Casa Central de la Universidad de Chile.

La instancia contó con la presencia de la vicerrectora Faride Zeran, quien participó de un cineforo posterior a la proyección de la película junto a su director Álvaro de la Barra, quien reconstruye en este film la historia de sus padres, ex miristas, asesinados durante la dictadura militar.

Faride Zeran valoró la creación artística de este tipo de documentales debido a que “son fundamentales para ir recomponiendo una memoria que nos han dicho de hace mucho rato que tenemos que clausurarla, que tenemos que dar vuelta la página. En este ciclo de alguna manera son los ‘hijos de’ los que dan cuenta, es lo que se denomina posmemoria y que se arma y se articula en un puzle desde el drama, desde el dolor, pero nos permite no sólo reconstruir esa memoria del dolor, sino también la resistencia”.

Álvaro de la Barra contó que la necesidad de hacer esta película surgió cuando el Estado de Chile lo reconoció legalmente como hijo de sus padres y vio sus apellidos en sus documentos de identidad. En aquel momento, de la Barra se encontraba en Francia y decidió venir a Chile para reconstruir su historia y emprender la búsqueda de su identidad.

“Esta película es un homenaje a mi padre, pero también un homenaje a aquellas ayudas voluntarias, que sin ser militantes me ayudaron cuando me estaban buscando a mí, gracias a ellos pude salir después de Chile. Hubo toda una serie de acciones de gente que ni siquiera era militante, de vecinos, amigos, compañeros de teatro, conocidos que se arriesgaban en resguardar a un niño que ni siquiera conocían. A ellos también quise rendir un homenaje”, explicó el cineasta.

En esa misma línea, Zeran señaló que “eran cadenas de solidaridades que hablan también de la otra cara. Mientras se desarrollaba la brutalidad más espantosa, por otro lado se veían las demostraciones de solidaridad y de heroísmo más increíbles a nivel cotidiano, no es la gran épica, es esa épica pequeña de los seres humanos sensibles, común y corrientes”.

Por otro lado, la vicerrectora enfatizó en los esfuerzos de la Universidad de Chile y de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones, a través de su Cátedra de Derechos Humanos, para resguardar e insistir en la importancia de la memoria para el país.

La persistencia de esta memoria, según Zeran, se produjo gracias a los grupos organizados de derechos humanos que ayudaron a levantar los memoriales que permanecen hasta hoy en día en distintos sectores del país. Asimismo, criticó la falta de compromiso del Estado chileno que hasta el día de hoy no ha establecido ninguna política pública frente a la memoria y la justicia.

“La pregunta es sobre la transición y qué pasó con la memoria, qué pasó con los dolores de este país, qué pasó con el tema de los derechos humanos, con las demandas de verdad y de justicia, y creo que en ese sentido la transición deja deudas pendientes, deja feroces deudas, la memoria es una de ellas, sin duda”, declaró Zeran.

De la Barra afirmó que al día de hoy la memoria todavía es un tema pendiente tanto para el Estado como en la sociedad. “No hemos hablado ni siquiera poco, hemos hablado mínimamente y yo creo que eso tiene que ver con que no ha habido un impulso del Estado que diga qué tenemos que recuperar y de qué manera. Eso no lo hemos empezado a discutir ni siquiera, entonces todo lo que se ha hecho, se ha hecho por esfuerzos unilaterales”.

Finalmente, el director de “Venían a buscarme” reflexionó sobre la transmisión de la memoria señalando que “no sé si estamos encaminados todavía en la transmisión de la memoria como deberíamos, yo creo que tiene que ser consensuado. ¿Para qué queremos recuperar la memoria? ¿Qué estamos necesitando como sociedad en la recuperación de la memoria?”.

Durante el ciclo “Tres generaciones en la memoria”, organizado por medio de un trabajo colaborativo entre la Vexcom y la Sala Sazié – Cineclub, se exhibieron cuatro documentales chilenos que rememoran las experiencias íntimas, personales y familiares vividas por los y las directoras en dictadura.

El primer documental proyectado fue “Mi vida con Carlos” del cineasta German Berger-Hertz; “Allende, mi abuelo Allende” de Marcia Tambutti, nieta del ex presidente Salvador Allende; “En algún lugar del cielo” de la directora Alejandra Carmona; y “Venían a buscarme” de Álvaro de la Barra.

El ciclo “A 45 años del golpe de Estado, ni un paso atrás en verdad, justicia y memoria” finalizó hoy con la segunda entrega del reconocimiento Título póstumo y simbólico y del grado académico póstumo y simbólico a estudiantes detenidos(as) desaparecidos(as) y ejecutados(as) políticos(as), como parte de la ceremonia oficial de conmemoración de un nuevo aniversario del Golpe de Estado por parte de la Universidad de Chile.