Hasta diciembre:

Académica y egresadas del DAV exponen en la muestra "Escultoras"

Académica y egresadas del DAV exponen en la muestra "Escultoras"
"Ayllu" es la obra que presenta la académica del DAV, Patricia del Canto, en la exposición "Escultoras" en la que participan 13 mujeres artistas visuales.
"Ayllu" es la obra que presenta la académica del DAV, Patricia del Canto, en la exposición "Escultoras" en la que participan 13 mujeres artistas visuales.
Obra "Erizo de Tierra" de Ana María Wynecken también forma parte de "Escultoras".
Obra "Erizo de Tierra" de Ana María Wynecken también forma parte de "Escultoras".
Soledad Chadwick, se hace parte de la muestra con la obra "Capullo", construida en mármol blanco reconstituido.
Soledad Chadwick, se hace parte de la muestra con la obra "Capullo", construida en mármol blanco reconstituido.
Laura Quezada exhibe "Enclave", "Son un soporte, pero no unen nada, son solo ellos en una suerte de error", contó.
Laura Quezada exhibe "Enclave", "Son un soporte, pero no unen nada, son solo ellos en una suerte de error", contó.

La profesora del DAV, Patricia del Canto junto a las egresadas Paula Rubio, Elisa Naranjo, Laura Quezada, Soledad Chadwick, Norma Ramírez, Soledad Omeñaca, Ana María Wynecken son algunas de las artistas invitadas por La Municipalidad de Providencia y su Fundación Cultural para dar vida a la exposición Escultoras

Una muestra que busca reafirmar la vigencia e importancia de la escultura femenina en Chile, confirmando su preeminencia cualitativa en la disciplina y a través de la cual se ofrece una atractiva dispersión de obras, así como la experimentación o la profundización de sus formas y materiales, deviniendo en los interesantes contrastes que se despliegan en este generoso espacio.

Es así como la obra de la académica del DAV, Patricia del Canto, Ayllu, realizada por 4 piezas ensambladas, desbastadas directamente de troncos de álamo, conforma una unidad espacial que se constituye en un lugar en el que confluyen sol, luna, fuego, tierra y agua.

Esta pieza hace referencia al “ayllu, la unidad mínima social entre los pueblos andinos, con fuertes evocaciones de templo y cobijo a la vez, de arco místico y puente terrenal, en ese diálogo cotidiano que mantienen nuestras culturas originarias con lo divino mientras nosotros acá persistimos en el monólogo”, manifiesta el catálogo de la muestra.

Laura Quezada en Enclave presenta una obra donde los clavos penetran una madera en bruto y a la vez la sostienen. “Son un soporte, pero no unen nada, son solo ellos en una suerte de error, porque al ser presentados en su tamaño original, pasarían desapercibidos y olvidados”, contó la artista.

Esta pieza escultórica forma parte de la investigación que hace años Quezada realiza sobre el objeto escultórico y juega con la descontextualización del tamaño del objeto para transformalo en obra de arte relevando la figura del “clavo”, que según sus palabras es “icono de la construcción; se relaciona con lo masculino, con la herramienta; es uno de los elementos más antiguos; está presente en la Biblia y en la crucifixión”.

Otra de las egresadas de Licenciatura en Artes Plásticas del DAV, Ana María Wynecken, exhibe Erizo de Tierra, que con materiales nobles y naturales, provenientes la tierra, como el adobe, fusiona lo primitivo y contemporáneo reflejando el proceso de la vida: nacimiento y muerte, como una manera de profundizar en aquella parte desconocida de sí mismos, para contribuir a la pregunta, a la búsqueda, la evolución, proceso y desarrollo de cada ser humano.

“El adobe nace, vive y muere como cuerpo físico. Se transforma según su propio entorno espacial. Se trata de obras que a veces sustentan pasto, musgos, semillas y elementos contemporáneos como la luz eléctrica, sonido e imagen audiovisual”, aseveró Wynecken.

La artista visual Paula Rubio, magíster en Artes Visuales de la U. De Chile, quien en el pregrado también fuera alumna Patricia del Canto -como la mayoría de las expositoras nombradas-, presenta Cortinas de Plomo, que tal como su nombre lo indica, son planchas de plomo que forman una especie de barrera simbólica como cortina de humo que encubre otro espacio y simula lo ficticio como real.

“Valiéndose de esta capacidad de ocultamiento, las laminas drapeadas invitan y seducen a tocarlas a traspasarlas. La obra trabaja lo táctil que despierta el sentido háptico, es decir, el roce, la temperatura, el peso, la impermeabilidad y la paradoja flexibilidad del material”, contó.

Ko (Agua en lengua Mapudungun), es como la artista Norma Ramírez tituló su obra realizada con resina poliéster y desecho electrónico, a través de la que indaga en torno a la memoria, la historia y el olvido, “desde donde emerge una remembranza del cuerpo, un dejarse ver, un dejarse sentir, un dejarse insinuar de lo corpóreo”, afirmó Ramírez.

Por medio e su obra la escultora además hace alusión al silencio, elemento esencial para su creación y para ella misma: “Mi universo creativo es una faena silenciosa. La palabra no alcanza, el lenguaje del arte es más revelador. Esa es la singularidad de mi trabajo, la obra se expresa a través de sus formas, sus texturas, sus espacios, el silencio se vuelve elocuente”, detalló.

La también egresada del DAV yMagister en Artes Visuales de la Universidad de Chile, Soledad Chadwick, se hace parte de la muestra con la obra Capullo, construida en mármol blanco reconstituido.

Con su escultura la artista visual propone una mirada hacia las energías que mueven el universo y ocupan el espacio, las fuerzas creadoras contenidas en una matriz como es un capullo. Esto “a través de formas geométricas como el círculo y la esfera; símbolos de lo femenino, de la matriz creadora; también la espiral como símbolo de las fuerzas centrífugas y centrípetas que se proyectan hacia y desde el infinito”, explicó.

Por su parte la escultora Soledad Omeñaca Soledad, quien también estudió en la Universidad de Chile, presenta láminas de madera, que según estipula el catálogo de la muestra tiene como “propósito […]ser un eterno continúo que fluye por curvas y cruces hasta quebrarse en dos ángulos extremos, los que sin mebargo no hacen sino valorar el movimiento precedente junto con reprimirlo para su pronto retorno”.

Otra de las egresadas del DAV, Elisa Naranjo, expone una obra que forma parte de una trilogía relacionada con su interés por la dinámica de la descontrucción. “Me interesa el movimiento en la escultura, el dinamismo del volumen como eje expansor del territorio ocupado por la obra en el espacio, sin recurrir a mayor masa”, contó

De allí que su escultura técnicamente aborde el volumen espacial y en permanente desarrollo de formas geométricas y simples construidas y des construidas en por una energía en movimiento, pudiedo ser apreciada desde distintas posiciones, porque siempre está en desarrollo

“Me interesa el quiebre, la fuerza de arranque y la amarra a través de soluciones industriales y mecánicas”, cocnluyó afirmando la artista.

La exposición Escultoras podrá ser visitada hasta el 14 de diciembre en el Parque de las Esculturas (Av. Santa María 2205), de martes a domingo de 9:00 a 19:00 horas. La entrada es liberada. Lunes y festivos, cerrado.