Pintura, escultura, fotografía, instalación, video y performance son algunas de las disciplinas que forman parte de la exposición De aquí a la Modernidad, que por estos días se desarrolla en el Museo Nacional de Bellas Artes y que cuenta con más de ochenta obras de la Colección MNBA.
Esta exhibición, curada por Gloria Cortés Aliaga, revisa las formas en que la escena artística chilena ha representado las nociones de modernización y progreso a partir de la segunda mitad del siglo XIX. De allí que la propuesta curatorial plantee la modernidad como la configuración del progreso técnico y del impulso de las metrópolis, dos mecanismos que regularon social, económica y políticamente el país
En base a eso Gloria Cortés se preguntó de qué modo los artistas responden a esas cuestiones, seleccionando un grupo de obras de la Colección MNBA, “en diálogo permanente con obras literarias del período, que nos permiten dilucidar los modos en que las escenas del arte comprenden, forman y trascienden imaginarios ligados a la constitución de lo moderno o, por el contrario, los desfragmentan y apropian desde una mirada crítica”, explicó la curadora.
Uno de los artistas convocados cuya obra se apega al eje curatorial propuesto es el académico del DAV Luis Montes Rojas, quien exhibe la obra El rapto de Europa, fruto del proyecto de creación Santa Lucía financiado por el concurso DAV2015 y expuesto originalmente en MAC el 2016, a través del cual plantea una reflexión sobre la idea de progreso que movilizó el proyecto de Estado-Nación en Chile, “basado por supuesto en una noción civilizatoria donde Occidente se impone por sobre la barbarie a través de los instrumentos de la razón, la técnica y la estética”, explicó el propio artista.
El rapto de Europa consiste en cinco jarrones de resina -reproducciones de un jarrón del Cerro Santa Lucía de origen francés- los que fueron realizados en hierro colado en la famosa fundición Val d´Osne. Estos jarrones se presentan dorados, como un objeto de deseo cuya presencia se hace insoslayable y contrastan con fotografías tomadas hoy en el mismo cerro, donde se ven pedestales y hornacinas vacías producto de la desaparición de estatuas y jarrones ornamentales.
“La obra convive en la misma sala con un retrato de Vicuña Mackenna, lo que es interesante porque permite poner en evidencia el relato que le otorga sustento al proyecto urbanístico del Intendente, donde la Modernidad se impone mediante el orden, el control, la higiene y también la estética. De este modo, exacerbando el ornamento del cerro hasta su saturación y exponiendo también las fracturas del proyecto desde el vaciamiento y el olvido, El rapto de Europa trabaja justamente en la dirección curatorial de la muestra, repensando desde el arte la materialización de un proyecto eminentemente moderno que describe un contexto histórico que, a su vez, ejerce una ética y una estética”, señaló Luis Montes Rojas.
El profesor del DAV, Adolfo Martínez, también forma parte de la exposicón con la obra Atado de Ajos, consistente en una trenza de ajo de bronce macizo, realizada a través de un procedimiento técnico muy antiguo y complejo como es la fundición, con la que se crean las condiciones técnicas para que el bronce en estado líquido e incandescente queme y gasifique la trenza de ajo que se encuentra dentro de un molde/contenedor; de esa forma el bronce ocupa y suplanta el cuerpo de la trenza de ajo original.
“Generalmente las personas piensan que es una trenza de ajo pintada con spray color metal, pero bueno, para mí es significativo que sea de bronce macizo, sobre todo porque el bronce ha formado parte del desarrollo de las civilizaciones, tanto en lo doméstico como en lo tecnológico y en cuanto a las artes, en la construcción de monumentos de personajes históricos relevantes y no tanto. En consecuencia, esta construcción cultural desde lo material, arrastra y encarna una historia asociada al poder político y económico”, explicó Martínez.
El artista contó que su obra Atado de Ajos surgió en el 2017 cuando le pide a su primo Carlos Casanova -campesino- que le entregue una trenza de ajos para dar testimonio de su trabajo y conocimiento labriego
“Su labor se compone de varios procedimientos, por ejemplo: preparar la tierra, trazar surcos, regar e ir plantando separadamente -ni muy afuera ni tan adentro del surco- cada diente de ajo con precisión y agilidad quirúrgica. La construcción de una trenza de ajo da cuenta del resultado final de todo ese proceso; guarda consigo una similitud artesanal a la urdimbre de un textil en su complejidad y metodología constructiva”, contó.
Agregó además que a través de esta obra quiso dotar a este objeto de un valor poético adicional, fundiendo directamente la trenza de ajo en bronce, perpetuando y revirtiendo su condición perecible. “Me imagino que ese gesto o desplazamiento simbólico concreto, se ajusta en parte al eje curatorial de la exposición De aquí a la modernidad, título que hace eco de la película De aquí a la eternidad de Fred Zinnemann. Ciertamente el título de la exposición y las obras que la componen, las imagino como mirándolas por el retrovisor de un auto estacionado; mientras que el título de la película de Zinnemann va en sentido opuesto, sugiere proyectar la mirada hacia el horizonte, al vacío”, puntualizó.
Egresados
Otra de las artistas convocadas por la curadora es la egresada del DAV, Paula Coñoepan, quien presenta una trilogía de videos como registros de acciones de arte realizadas en Temuco, lugar de donde proviene su familia materna y en los que incorpora a su madre y abuela.
A través de sus piezas audiovisuales Coñoepan da cuenta de su experiencia e historia biográfica, explorando sus lazos familaires y el concepto del origen. “Mi vídeo más reciente, Perder el origen, fue realizado con mi abuela, abordando su historia personal y su relación con su ascendencia mapuche. Ella creció en un contexto done lo mapuche era asociado a una idea de retroceso a lo moderno, siendo prejuiciados como personas incivilizadas, borrachas y flojas. Esto se relaciona con el contexto político y social del Chile en la época”, detalló la artista, quien también exhibe el video La Matriz, que tiene como protagonista a la madre de Paula Coñoepan, y la pieza Permanecer, video en loop que habla de la enfermedad de sus abuelos.
Además de Paula Coñoepan, los egresados Sebastían Calfuqueo y Cristian Inostroza, también son parte de la muestra.
De aquí a la Modernidad además cuenta con obras emblemáticas como La Viajera (1928) de Camilo Mori; La Usina (1956) de Matilde Pérez; El niño enfermo (1902) de Pedro lira; Maternidad (ca. 1940) de Laura Rodig; El jugador de palin (1880) de Nicanor Plaza; Madre araucana(1896) de Virginio Arias; y Carretelas de la Vega (ca. 1933) de Juan Francisco González; imágenes de la serie Nómadas del mar (1992/1995) de Paz Errázuriz; y Vaso de leche N°1 y N°2 (1979) de Cecilia Vicuña; se podrán apreciar junto a obras casi desconocidas de la Colección MNBA. Algunas serán verdaderos descubrimientos para el público general, como Recogida de trigo, realizada en la primera mitad del siglo XX por Rafael Correa; El mal paso (1926) de Jorge Délano; Los salitreros (ca. 1936) de Laura Rodig; Al subir de Orán (1932) de José Antonio Terry, Mujer negra (siglo XX) de Israel Roa o Los facsímiles (1972) del grupo CAyC (Centro de Arte y Comunicación) de Argentina.
Acompañan las obras citas tomadas de piezas literarias como Alberto el jugador (1860) de Rosario Orrego Castañeda;Casa Grande (1908) de Luis Orrego Luco; Sub terra (1904) de Baldomero Lillo o Vidas mínimas (1923) de José Santos González. Así, como un segundo texto, los extractos narrativos reflejan y refuerzan las circunstancias en las que afloró el advenimiento de lo moderno a partir de historias íntimas.
Esta exhibición, que busca ser una nueva oportunidad para enriquecer la mirada del público, a través de la puesta en valor de las obras que el MNBA resguarda y difunde, podrá ser visitada hasta finales del 2019 en el segundo piso del Museo Nacional de Bellas Artes, ubicado en José Miguel de la Barra 650, Santiago. Entrada liberada.