Mesa INAP en Escuela Chile-Francia abordó movilizaciones portuarias y post terremoto

Académicos abordaron movilizaciones portuarias y post terremoto 27F

"Movilizaciones multinivel: anclaje territorial y proyección nacional" fue el título de la mesa organizada por el Instituto de Asuntos Públicos (INAP) de la Universidad de Chile en el marco de la 13ª Escuela Chile-Francia "Conflicto de territorios. Territorios de conflictos".

El panel, que tuvo lugar el martes 7 de mayo, contó con la participación de Franck Gaudichaud, académico de la Universidad de Grenoble Alpes y especialista en conflictos sociales y movimientos de Chile y América Latina, y de Paulina Vergara, académica del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile, quien ha centrado su investigación en los procesos de movilización y reconstrucción asociados a desastres socionaturales en nuestro país. Moderó la mesa el académico del INAP Antoine Maillet.

El profesor Gaudichaud expuso su trabajo "Puertos en conflictos. La unión portuaria de Chile, de lo local a lo nacional", haciendo una revisión histórica de las movilizaciones del sector sindical portuario en nuestro país desde 2010 y del surgimiento de la colaboración y organización mancomunada entre diferentes puertos. El académico explicó que, pese a que Chile es un "país puerto", hay un déficit historiográfico respecto de la movilización de las organizaciones de trabajadores de dicho rubro. El ámbito es de interés, pues, como señaló Gaudichaud, de todas las huelgas portuarias que ocurrieron en América Latina entre 2010 y 2014, alrededor de la mitad se produjeron en Chile. "Eso demuestra muy bien el nivel de conflictividad que hay aquí", afirmó.

La investigación de Franck Gaudichaud muestra cómo el terremoto del 27 de febrero de 2010 constituyó un importante incentivo para organizarse y cooperar entre los trabajadores portuarios de los diferentes puertos de la zona afectada por el megasismo y el tsunami.

"El terremoto aceleró la movilización mancomunada, porque obligó a los portuarios del Biobío, tras la destrucción de algunos terminales, a unirse y buscar ayuda. Así nace la Unión Portuaria del Biobío", señaló.

El académico de la Universidad de Grenoble Alpes llamó la atención sobre esta unión, dado que, según explicó, "hay un campo sindical hiperfragmentado: en cada puerto puede haber varios sindicatos".

Sin embargo, en Chile se ha logrado la colaboración entre los sindicatos de puertos vecinos, para desarrollar movilizaciones territoriales, según describió Gaudichaud, quien ejemplificó la situación con los numerosos desembarcaderos del Biobío. "Si se bloquea un puerto, la empresa tiene la posibilidad de descargar en otro puerto vecino, lo que le resta poder a la movilización. Por eso, se impuso la idea de que las movilizaciones sindicales deben ser territoriales, para tener fuerza", explicó.

Luego, la académica Paulina Vergara presentó el trabajo "Reconstrucción post 27f: resistencia y movilización". La profesora del INAP buscó explicar por qué un proceso de reconstrucción "visto internacionalmente como exitoso", también generó un movimiento nacional en las zonas afectadas por el terremoto y el tsunami.

A juicio de la profesora Vergara, es problemático observar estos fenómenos como desastres "naturales", pues dicha noción, a diferencia de la de "desastres socionaturales", ignora la importancia de la planificación en los asentamientos humanos y su entorno.

"Desde 1906, primera respuesta estatal a un desastre en Chile, ha prevalecido una lógica muy ingenieril y del derecho positivo, donde basta normar para que la gente haga casas donde corresponde y se prohíba la construcción de viviendas de mala calidad", aseguró.

Pese a ello, la académica del INAP explicó que las reconstrucciones en Chile "han sido históricamente procesos de resistencia, incluso en dictadura", con ejemplos como lo ocurrido tras el terremoto de 1985 en Santiago o el de 1960 en Valdivia. En este último caso, se organizaron Comandos Rucos, organizaciones comunitarias gestadas en torno a los campamentos de viviendas de emergencia (denominadas “rucos”), para demandar residencias definitivas.

"Siempre se ha dado la misma lógica: equipos tecnocráticos que definen una política, y grupos movilizados que realizan ciertas demandas", señaló.

"Cuando aparecen estos desastres se develan problemas estructurales de nuestras sociedades. El desastre como fenómeno se transforma en algo desastroso cuando hay un cúmulo de vulnerabilidades y desigualdades", concluyó la profesora Vergara.