Columna de opinión:

El anhelo de la inclusión del Alzheimer al AUGE

El anhelo de la inclusión del Alzheimer al AUGE
"No menos importante es que la implementación del Alzheimer en AUGE considere el acompañamiento a las familias", plantean los académicos.
"No menos importante es que la implementación del Alzheimer en AUGE considere el acompañamiento a las familias", plantean los académicos.
Andrea Slachevsky, neuróloga, subdirectora de GERO, directora Clínica de Memoria y Neuropsiquiatría de la Facultad de Medicina.
Andrea Slachevsky, neuróloga, subdirectora de GERO, directora Clínica de Memoria y Neuropsiquiatría de la Facultad de Medicina.
Christian Gonzalez-Billault, director de GERO.
Christian Gonzalez-Billault, director de GERO.

Esta semana se anunció la incorporación de nuevas patologías al AUGE que incluyen a la enfermedad de Alzheimer y otras demencias. Esta es sin duda una muy buena noticia, y que llega en buen momento.

Unas semanas atrás un grupo de investigadores de diferentes universidades y centros de investigación, con el apoyo de la comisiones Desafíos del Futuro y Salud del Senado, presentamos el documento “Prevención y abordaje integral de las demencias. Avances y desafíos para la política pública en materia de trastornos neurocognitivos”, en el que se discute el alcance del Plan Nacional de Demencia, instaurado a fines del 2017.

La inclusión del Alzheimer y otras demencias en la lista AUGE ha sido un anhelo de mucha gente que vive con estas enfermedades. Ellos necesitan que nuestro sistema de salud les ofrezca mecanismos eficientes para el diagnostico y tratamientos de la enfermedad. No menos importante es que la implementación del Alzheimer en AUGE considere el acompañamiento a las familias y que los beneficios no consideren solamente el tratamiento farmacológico, sino un acceso a atenciones no-farmacológicas que han mostrado tener un impacto positivo en la calidad de vida de quienes viven con demencias.

Nuestro país esta envejeciendo de forma acelerada, y según las proyecciones sobre 600 mil chilenos sufrirán algún tipo de demencia hacia el 2050, lo que representa aproximadamente un 3 por ciento de nuestra población. En el Chile de hoy, más del 70 por ciento del costo que implica tener un paciente con Alzheimer es asumido por su núcleo familiar generando un impacto económico y social que afecta directamente la calidad de vida no sólo del paciente sino de todo su entorno.

Desafortunadamente, y a pesar de los ingentes esfuerzos en los últimos 25 años, aun no existe cura para el Alzheimer. Por lo tanto es prioritario sinergizar los esfuerzos y recursos de AUGE con el Plan Nacional de Demencia y de esta manera asegurar el trabajo de equipos multidisciplinarios para brindar las atenciones no-farmacológicas que debieran garantizarse en el AUGE y entregar mejores condiciones de vida a nuestros compatriotas. Un Chile que mire al futuro debe crear las condiciones para permitir una vida digna a quienes viven con demencias y no olvidar a quienes olviden, como se estipuló en la cumbre del G20 de Osaka firmada por el gobierno de Chile. La incorporación de las demencias al AUGE junto al fortalecimiento del plan de demencias es un paso promisorio en esa dirección.