El proyecto reglamentario que crea esta nueva categoría académica viene a responder a la necesidad de reconocer al personal investigador que se encuentra actualmente en una situación de “indefinición”. Se trata de graduados de programas de doctorado que se insertan temporalmente en grupos de investigación, permitiéndoles ganar experiencia y mejorar sus posibilidades de acceder a cargos académicos regulares. En este contexto, en proyectos que la Universidad se ha adjudicado, como los Institutos Milenios, los Centros Fondap, los Fondos Basales, Núcleos, entre otros, se han abierto oportunidades complementarias para incorporar investigadores postdoctorales tanto nacionales como extranjeros, que ahora podrán ser reconocidos como académicos
En sesión ordinaria del Consejo Universitario, la vicerrectora de Asuntos Académicos, profesora Rosa Devés, explicó en detalle el articulado propuesto, destacando que podrán ingresar a la categoría académica de Investigador Postdoctoral quienes tengan capacidades y aptitudes para desarrollar investigación y/o creación en su disciplina respectiva, “y que hayan obtenido el grado académico de doctor o doctora en un lapso no mayor a cinco años previos al cierre de la postulación al cargo respectivo”, especificó. También, podrán realizar docencia de pre y postgrado o extensión por un máximo de seis horas semanales.
En cuanto a la modalidad en que se proveerán los cargos académicos, la profesora explicó que estos se establecerán mediante proceso público de selección, pudiendo eximirse las y los postulantes que son adjudicatarios de un proceso de selección o concurso público organizado por alguna institución nacional, extranjera que le permita financiar totalmente su estadía postdoctoral en la Universidad de Chile. Entre otros aspectos, quienes pertenezcan a esta categoría serán designados sólo en cargos a contrata y en jornada completa.
Ante la propuesta, el vicerrector de Investigación, profesor Flavio Salazar, contextualizó el escenario de alta competitividad en que se desarrollan las actividades de investigación académica, “siendo necesario adoptar una política robusta para este tipo de incorporaciones”, comentó, junto con destacar la relevancia de hacer converger el interés del académico, del investigador y de la institución, “porque la Universidad requiere de estas capacidades para aumentar la productividad y generar mayor reconocimiento, tanto a nivel nacional como internacional”, expresó.
Al respecto, la profesora Devés se refirió a la nueva Dirección de Desarrollo Académico, liderada por el profesor Claudio Olea, destacando que su propósito es resguardar la calidad y apoyar el desarrollo de las capacidades del cuerpo académico en todas sus jerarquías, lo cual viene a contribuir en un mejor cumplimiento de las funciones en los distintos ámbitos de la docencia, la extensión, la gestión, y precisamente en investigación y creación, siendo estas las tareas concernientes a la nueva categoría académica de Investigador Postdoctoral.