"Positiva", "cercana", "con mucha información", "deberían venir todos los años" son algunos de los comentarios que dieron a conocer tanto alumnos como orientador en la última feria organizada por el área de difusión de admisión en el mítico Liceo Manuel Barros Borgoño.
Cerca de 800 alumnos de tercero y cuarto medio recorrieron con curiosidad y entusiasmo los quince stand ubicados en uno de los patios del emblemático establecimiento que desde 1929 se encuentra en calle San Diego 1547. Monitores de todas las carreras entregaron a los inquietos alumnos información sobre carreras, mallas, créditos, aranceles y becas, entre otro tipo de orientación.
Alexis Martínez H. de tercero medio H, 16 años quiere estudiar medicina (neurocirugía). "Esta feria me parece interesante porque nos permite conocer más detalles sobre nuestros intereses y nos permite informarnos sobre las carreras que queremos elegir. Además -agregó- nos facilita el acceso y el acercamiento a la universidad".
En relación a los antecedentes entregados, el estudiante de tercero medio dijo que "los monitores nos han dado muy buena información. Me gustaría que este tipo de actividades las hicieran más seguido", destacó.
Matías Varela M. tercero medio A, 16 años sus intereses van por el diseño. "Es bastante bueno que nos visiten porque es una guía para llegar a los objetivos que cada uno se ha planteado. Si bien quiero estudiar diseño de todas formas me acerqué al área humanista a hacer consultas y la atención aquí es más personalizada. Hace un tiempo fui a otra feria pero había mucha gente mientras que este tipo de iniciativa es más focalizada", concluyó.
Por su parte, Santiago Cabezas Vivanco, el orientador del Liceo quien trabaja hace 24 años en este establecimiento y hace 44 en el área de la educación chilena, recalcó la relevancia de este tipo de actividades debido a que los estudiantes tienen la posibilidad de encontrar información a través de alumnos que pertenecen a esta corporación. "Deberían venir todos los años, ya que este tipo de instancias son muy relevantes para los alumnos. Además esta feria, su disposición y organización, ha sido extraordinaria. Sobre todo porque los monitores son estudiantes de la universidad, que pueden hablarles en su mismo lenguaje al existir poca brecha generacional y porque lo más importante es que pueden transmitir la mística de la Universidad de Chile".
El orientador del colegio resaltó que "la feria se ve sencilla, elegante y seria, como es la Universidad de Chile", concluyó.
Bastián Mellado, encargado de los monitores de la feria explicó que se entregó muchísimo material y que existía bastante interés por parte de los alumnos de informase y conocer antecedentes de la universidad. "Lo bueno de venir a colegios emblemáticos como el Liceo Manuel Barros Borgoño es que todos conviven en un mismo universo".
En relación al trabajo del área de difusión de admisión explicó que esta es una buena forma de acercarse a los alumnos, ya que uno tiene una visión distinta de ver la realidad y esa experiencia se la puede transmitir a los chicos que hacen consultas. Uno los puede orientar en temas que no son relevantes para ti cuando estas en cuarto medio, no te percatas de ellos. Por ejemplo, a quienes postulan a ingeniería les digo que se fijen en lenguaje y en un conjunto de ítems que van a necesitar.
Además ser parte del grupo de monitores me genera un sentido de orgullo, de servicio y de ayuda a esos chicos que están a punto de salir y que en algunos casos están desorientados".
La hora de la evaluación
Paulina Contreras encargada de difusión de admisión al hacer un balance preliminar de lo que ha significado llevar a cabo el Plan Colegio enfatiza que sumando la recepción de los colegios, las experiencias vividas por los monitores y los comentarios recibidos por los orientadores, ha sido bastante positivo porque "logramos decir que la Universidad de Chile es potente y está más viva que nunca. Con una presencia cercana y en el caso de las visitas a colegios, en forma exclusiva para sus futuros estudiantes". Agrega que en reiteradas ocasiones le mencionaron la necesidad de tener un contacto más directo con la Universidad y que este año se ha podido lograr".
La organización del Plan Colegio comenzó el año pasado con la preparación de la Semana del Postulante, donde se armó la Red de difusores. Luego de ese intenso trabajo, se realizó la capacitación y la selección de más de 200 monitores que visitaron más de 150 colegio.
El Plan colegio también incluyó la salida a regiones aprovechando que algunos monitores volvían a sus casas. Asimismo el apoyo a otros colegios que no pudieron entrar en el circuito de visitas debido a que el proyecto se focalizó en los establecimientos de excelencia académica, se tradujo en responder preguntas y dudas y gestionar visitas a las distintas facultades. Paralelo a esta tarea se enviaron vía on-line boletines tanto para la base de datos compuesta por estudiantes como también a los orientadores de todos los colegios del país.
Paulina Contreras enfatizó que uno de los objetivos fundamentales fue entregar una presencia institucional de toda la Universidad de Chile en los colegios y recalcar que la Casa de Bello está buscando "a los mejores talentos vengan de donde vengan". Agregó que "esta tarea fue posible gracias al trabajo en conjunto entre todas las Facultades, Institutos y la Vicerrectoría Académica, principalmente con la Dirección de Pregrado".