Con un desayuno recibió el Rector de la Universidad de Chile Víctor Pérez Vera a los jóvenes estudiantes de postgrados que culminaron, durante 2007, sus programas de Estadías cortas de investigación para tesistas de Magíster y Doctorados, para conocer de primera fuente sus experiencias de investigación en el extranjero.
Esta beca de la Casa de Bello, que otorga un máximo de dos millones de pesos para alumnos que se encuentren en la etapa de su tesis de postgrado, comenzó a ofrecerse el año pasado.
Los requisitos para postular a este beneficio son contar con un proyecto para realizar fuera de Chile que aborde alguno de los objetivos de la tesis y demostrar de qué manera hace la diferencia por ejecutar dicho esfuerzo en el extranjero (el impacto para la tesis).
A su vez, los postulantes deben presentar el apoyo de un académico de Chile, como también del profesor que los recibe y guiará en el país al que desean viajar.
El número de beneficiaos a la fecha con esta beca es de 40 estudiantes y una veintena de ellos se reunieron el lunes 14 de enero con la máxima autoridad de esta Casa de Estudios para compartir el aporte que les brindó esta pasantía en su vida profesional y personal.
El valor del perfeccionamiento
El Rector Víctor Pérez Vera valoró el aprendizaje acumulado por este grupo de estudiantes y destacó la labor de los alumnos de postgrados en la realización de investigación y creación al interior de la Universidad de Chile.
Asimismo, les habló del aporte que hacen a la nación, a través de sus proyectos de tesis, pues contribuyen a "mejorar la calidad de lo que se hace en el país".
Del mismo modo celebró la experiencia alcanzada con sus pasantías, pues sostuvo que las nuevas generaciones de Magister y Doctorados van a permitir "asegurar la cadena vital de nuestros cuadros académicos", refiriéndose a la incorporación de gente joven y con calidad.
Luego procedió a conocer las vivencias de cada uno de los comensales en un distendido encuentro, donde participaron el Vicerrector de Asuntos Académicos Iñigo Díaz y la Directora del Departamento de Postgrado de la misma unidad, Rosa Devés.
En conversación con U al Día, la académica Dra. Rosa Devés evaluó positivamente la experiencia, tanto para los jóvenes como para la Universidad.
"Les abre oportunidades a los estudiantes, en general, todos dicen que vuelven valorando el trabajo que están realizando en Chile, pero con nuevas miradas. Más allá de alcanzar los objetivos de su tesis, se observan cambios bien cualitativos. Muchas veces esos cambios se inician antes de partir al extranjero, cuando el profesor que los va a guiar afuera responde interesados en los trabajos de investigación que están haciendo en Chile y eso ya abre la perspectiva de los jóvenes, quienes sienten valorado su trabajo", expresó.
La directora del Departamento de Postgrado también valoró el aporte a la institución.
"Este trabajo fortalece la investigación en la Universidad de Chile, donde los alumnos de postgrado realizan gran parte del trabajo. A través de estas pasantías se han generado vínculos con grupos de académicos de punta de las distintas disciplinas y varios de los estudiantes han manifestado que volverán a viajar", comentó.
Por otro lado, la Dra. Devés destacó la modalidad de este beneficio donde "se mejora la calidad, pero de manera libre de manera que el alumno, a veces frente a un computador, busca un centro académico que sea el mejor para su disciplina y así deciden a dónde van, pero también con un resguardo de la calidad. Esta pasantía pone la confianza en el estudiante y uno sabe que a la larga se favorece la Universidad con esta visión nueva que aportan los jóvenes", concluyó.
En la ocasión, la directora del Departamento de Postgrado precisó que estas becas están disponibles para todas las áreas del conocimiento y comentó que en la última convocatoria hubo un aumento de demanda por parte de las Humanidades y Ciencias Sociales.
Una preparación sólida
Pedro Rossel es estudiante de Doctorado en Ciencias, mención computación, de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas y realizó una pasantía de once meses en la Universidad de Waterloo, Canadá.
"En términos generales iba a realizar una parte bien específica de mi tesis, que era el desarrollo de uno lenguajes y fui a trabajar con el profesor Krysztof Czarnecki, bastante prestigiado a nivel internacional. Él es experto mundial en una de las áreas que estoy trabajando y estaba en un centro especializado. Fue algo impagable", expresó Pedro Rossel sobre las oportunidades que se le abrieron.
La experiencia, relató a U al Día, le impactó en un primer momento porque su profesor guía de la Universidad de Waterloo le cambió el punto de vista para enfrentar el problema que estaba abordando.
"Aparte de la dificultad idiomática, está la dificultad de entender qué es lo que este experto estima que debes hacer con tu trabajo. Fue muy crítico y yo hice un acto de fe porque era un profesor muy bueno. Empezamos a entendernos y tuvimos muy buena visión para ir definiendo con qué herramienta iba a tener que diseñar este lenguaje", comentó.
Denisse Bravo estudia un Doctorado en Bioquímia y trabaja específicamente en mecanismos de patocigenicidad de salmonela.
"En la pasantía logré utilizar técnicas que acá son muy restringidas, técnicas microscópicas. Por tratarse de organismo patógenos se hace difícil que me faciliten equipos", explicó Denisse, quien explicó que en la Universidad de Western Ontario, Canadá los recursos económicos le facilitaron la compra rápida de insumos de investigación, que le permitieron avanzar a una velocidad mucho mayor.
Javiera Olguín, cursa su Magíster en Ciencias de Ingeniería, en mención Transporte y utilizó su pasantía para trabajar en la Universidad Imperial College, de Londres, con encuestas a fines a las que ella está utilizando en Chile -denominadas "Origen/Destino"- para tratar de explicar cómo las personas toman decisiones frente al transporte diario, cómo valoran su tiempo y de qué manera está relacionado con la realidad socioeconómica del país.
En las ocho semanas que permaneció allá, Javiera valoró la preparación profesional de nuestra Casa de Estudios.
"Allá uno se da cuenta que la formación que recibimos en la Universidad de Chile es muy buena. En realidad te consideran y sirve para darse cuenta que uno estudió en una institución que es conocida a nivel mundial, con profesores reconocidos en el extranjero", expresó.
David Contreras estudió un Magíster en Ciencias Silvoagropecuarias con mención en Producción de Cultivos, y su pasantía la realizó en el Instituto Agrario San Michele, Trento-Italia, con una semana invitado desde la Universidad de Verona para aplicar una técnica nueva en secuencias de genoma.
"En Chile hice un proyecto de genómica funcional en recursos naturales y en este centro de investigación se había dado a conocer, hace poco el genoma de la vid. Entonces tenían una base de datos interna de secuencias que yo quería comparar con mi secuencia y verificar si estaban bien anotadas y conocer una técnica que se está utilizando hace poco y que en Chile se conoce muy poco", explicó David.
En cuanto a la experiencia vivida, Contreras observó que pese a que los recursos de ambos países son notoriamente distintos, "en términos de investigadores y conocimiento, uno se siente a la par con la gente y sientes que te están formando bien la Universidad de Chile".