Rector: "Debemos recuperar la vinculación con el Estado y entender a las Universidades Estatales con una mirada de desarrollo y bien común"

Rector Víctor Pérez: "Debemos recuperar la vinculación con el Estado"
El Rector llegó hasta la novena región para dictar una Charla Magistral en la Universidad de La Frontera.
El Rector llegó hasta la novena región para dictar una Charla Magistral en la Universidad de La Frontera.
Sergio Bravo, Rector de la Universidad de la Frontera.
Sergio Bravo, Rector de la Universidad de la Frontera.
Este año la UFRO cumplió 33 años.
Este año la UFRO cumplió 33 años.
Rector en la UFRO

Una nueva relación con el Estado, bajo la definición explícita de un conjunto de deberes y derechos y que considera a las Universidades Estatales como "el brazo de apoyo en los ámbitos del conocimiento y la cultura", es una de las principales ideas del "Nuevo Trato", propuesta en la que el Rector Víctor Pérez viene planteando desde el año 2009. El viernes 14 de marzo, y con motivo de la Inauguración del Año Académico 2014 y los 33 años de la Universidad de la Frontera, el Rector de la Universidad de Chile expuso y reflexionó nuevamente sobre este documento.

Durante su intervención recordó además que la sede Temuco de la U. de Chile (hoy UFRO) fue creada como centro universitario regional en enero de 1960 e inició sus actividades el 20 de abril de ese mismo año. "Por lo tanto en estricto rigor esta Universidad tiene al menos 54 años que se celebrarán el próximo mes. Es un orgullo además porque se trata de la primera sede creada en esa década bajo el Rectorado de Juan Gómez Millas a iniciativa de un proyecto de expansión regional de la U. de Chile presentada por Irma Salas y Egidio Orellana. Es un orgullo para mí como Rector de esta Casa de Estudios observar que la semilla que se plantó junto a los copihues y araucarias ha germinado para orgullo del país y la Araucanía en esta espléndida Universidad de la Frontera, que habiendo creado su propia identidad, preserva los valores republicanos de sus dos orígenes: la U. de Chile y la U. Técnica del Estado", finalizó.
En tanto Sergio Bravo, Rector de la Universidad de la Frontera reconoció el trabajo de esa comunidad universitaria, el que se ha traducido en importantes logros en estos últimos años, los que de alguna forma también responden a un legado de impronta y vocación dejado por la Universidad de Chile y Universidad Técnica del Estado, las dos instituciones que dieron vida a esta Casa de Estudios.

"Sin estos dos referentes, sin su impronta ante la adversidad, nos hubiésemos desalentado con más frecuencia; sin sus propósitos y fines, no abrazaríamos, con la pasión que nos caracteriza, la defensa de la educación pública; sin su vocación por el bien común sobre el individual, no lograríamos distinguirnos -del modo que lo hacemos- de instituciones gobernadas solo por el lucro", dijo el Rector de la UFRO.

Una recuperación del Trato

El Rector partió explicando que esta propuesta debe entenderse, más que como una nueva forma de relación, una recuperación del trato que tiene un Estado Republicano con sus universidades. “Cuando el Estado crea estas instituciones lo hace con una mirada de construcción de país, pero en algún momento esa relación cambia y se quiebra. Nuestra propuesta es entonces una recuperación del trato que anteriormente existía. Es volver a entender que la Universidad pública tiene un sentido republicano, de construcción de ciudadanía, como sucede en todo el mundo, donde existe una educación pública de calidad, donde el Estado se hace responsable de que ésta llegue en libertad a todos los ciudadanos, que ellos tengan la libertad de elegir entre la educación pública o privada", dijo.

"No es un tema de platas más, platas menos. Es un tema de construcción de país", añadió.
Tras esto el Rector expuso a los presentes que esta propuesta constituye “un compromiso concreto de las universidades estatales con la sociedad en cuanto a proveer bienes públicos básicos que cumplan exigentes estándares de calidad en todas sus tareas, sean de formación, investigación, creación o extensión, y que se encuentren orientados por principios fundamentales de equidad, pluralismo, tolerancia, libertad intelectual y de pensamiento y que garanticen una mirada de largo plazo que, independiente de intereses particulares, esté comprometida con el bien común”.

Así -comentó- se propone un nuevo paradigma en la relación con el Estado, donde se establezcan responsabilidades y deberes de las universidades y el estado, entendiendo a la universidad estatal “como el brazo del Estado a cargo de las tareas de avance en el conocimiento y la cultura, y como soporte del Estado en materias estratégicas”. Asimismo el Estado compromete su apoyo a éstas entregando las condiciones para el desarrollo y cumplimiento de su misión.

El Rector manifestó además que actualmente es “interesante” como el ámbito de lo público empieza a ser utilizado o mencionado en distintos ámbitos. Incluso uno observa con curiosidad como hay instituciones netamente privadas que esgrimen su condición de pública el día de hoy, como lo han hecho algunas universidades”.

Un sistema integrado de Educación Superior

El Rector comentó que en Chile la sobrevaloración de lo privado ha terminado por erosionar “aquello que nos es común, lo público, empobreciendo la respuesta a las demandas políticas, sociales y culturales de la ciudadanía. En un momento en que Chile está repensando los temas de espacio público, es del todo pertinente y oportuno poner en la agenda política a las universidades públicas o estatales”.

“Hoy se hace indispensable fortalecer la dimensión de lo público, aquel que constituye el espacio de lo que nos es común, en el que se trama el tejido de la comunidad, se formulan y procesan las expectativas de bien social y las alternativas del desarrollo de país”, añadió.

El Rector denunció que durante la Dictadura prevaleció una política de Estado que, en los hechos, buscó desmantelar y destruir a la Universidad de Chile. Se le separó en sedes regionales, junto a la ausencia de un proyecto académico que las orientara. Se eliminó las áreas de la educación, pasando a constituir universidades independientes que hoy tienen problemas para alcanzar calidad académica. Se redujeron además los recursos para Humanidades, Artes y Cs. Sociales, produciendo un desnivel en su labor académica y un impacto en la comprensión de la sociedad por ella misma.

Junto a esto comentó que el advenimiento de la democracia en 1990 no trajo consigo una revisión de la relación entre el Estado y sus propias Universidades. “Como resultado, hoy podemos observar en Chile un paisaje heterogéneo de Universidades Estatales, carencia en muchos casos de rol público y desconexión de contextos sociales y económicos locales”, dijo.
El Rector apuntó que uno de los desafíos de los planteles estatales es constituirse como un sistema integrado en todo el país. “Es complejo, porque estamos en un sistema y escenario que de alguna manera nos fuerza a competir, producto de las reglas del juego que en algún momento se nos impusieron y que lamentablemente nos hacen competir por recursos”, denunció afirmando que es necesario entender a estos planteles como “polos de desarrollo regional, con un financiamiento acorde que además les permita realizar investigación y docencia”.

También se refirió al Proyecto Institucional de Educación en el que la comunidad de la U. de Chile está trabajando en su conjunto, a la Iniciativa Bicentenario Juan Gómez Millas que ya está en marcha y a la propuesta de una Iniciativa Bicentenario que contempla un financiamiento de al menos 500 millones de dólares en diez años para que un conjunto de Universidades públicas desarrolle programas para formar profesores y hacer investigación al más alto nivel en estrecha alianza con los mejores planteles del mundo.

Bienes públicos irreemplazables

El Rector Pérez Vera afirmó que los aportes en equidad, diversidad, crecimiento cultural, investigación e innovación, integración regional, nacional y mundial y al desarrollo de una visión especializada e independiente que hacen las Universidades Estatales “constituyen bienes públicos irreemplazables para el país hacia cuya sustentación y desarrollo el Estado debe destinar atención directa. Y cuando digo atención directa tiene que ver con el tema del Nuevo Trato”.

Así explicó que lejos de tratarse de una “atención preferente” ésta es una propuesta de una nueva relación con Universidades que son únicas en su tipo. El Rector comentó además que estos planteles requieren al menos un aumento del 50% de sus aportes basales, fondos para el desarrollo especiales para las universidades regionales y la creación de un Consejo Nacional de Educación Superior Pública.