Un nuevo desarrollo en el campo de la biometría de iris, usando tecnología enfocada en detectar patrones intrínsecos o conductuales de las personas con la finalidad de identificarlos y determinar su aptitud laboral, es la investigación que está realizando el académico de la Universidad de Santiago de Chile (DIINF-USACH), Juan Tapia Farías, junto al profesor del Departamento de Ingeniería Mecánica (DIMEC), Enrique López Droguett; en colaboración con dos empresas nacionales, TOC Biometrics y Sociedad de Inversiones Colina.
Los investigadores, en enero pasado, se adjudicaron el proyecto Fondef IDeA Nº ID19I10118 denominado “Sistema de medición automática de aptitud laboral usando imágenes infrarrojas de iris”, iniciativa financiada por el Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondef), de Conicyt, cuyo objetivo es medir automáticamente la aptitud laboral de una persona a través de imágenes extraídas desde iris.
“Este proyecto propone un dispositivo de captura imágenes infrarrojas del iris que mide la influencia del sistema nervioso central en el iris en tiempo real, arrojando una estimación de la aptitud laboral (Apto/No Apto). Con “Apto” nos referimos a una persona sana, sin trastornos físicos de insomnio, alcohol o algún tipo de medicamento o droga que altere su estado de alerta y desempeño”, explica el director de este proyecto, profesor Tapia.
Actualmente se ha intentado detectar la aptitud laboral, utilizando equipos reactivos, es decir, una vez iniciada su jornada laboral y sin identificar a las personas, usando pulseras, cascos entre otros. En este proyecto se propone utilizar un equipo proactivo, es decir, antes de iniciada la jornada laboral e identificándolo mediante su iris. “Esta problemática se refleja en que las empresas de servicios y turnos que proveen soporte a Chile a las industrias de la minería, transporte de pasajeros, carga y salud, no es sencillo identificar en la entrada a un turno de sus trabajadores, si están aptos o no aptos para realizar su trabajo de manera segura”, comenta Tapia.
En tanto, el profesor López, director alterno de esta investigación explica que “su rol en este proyecto es el modelamiento y procesamiento de la información a través de novedosos modelos de aprendizaje profundo”. Gracias al desarrollo de estos modelos, podrán analizar y evaluar el nivel de fatiga de las personas, disminuyendo errores humanos que pueden evitar accidentes.
En ese sentido, esta iniciativa contempla la implementación de etapas de identificación biométrica mediante iris de forma de evitar la suplantación de identidad y que por la contingencia que vivimos a nivel mundial por COVID- 19 el desarrollo de este prototipo se ajusta a los parámetros de distanciamiento físico. Igualmente, su contribución a la prevención de accidentes laborales o de fraudes lo convertirá en una herramienta novedosa y útil tanto para empresas públicas y privadas.
Una nueva tendencia
Respecto a las características de este sistema de detección los investigadores explican que debe ser liviano, portable, además de tener una alta tasa de precisión. En su primera etapa trabajarán con bases de datos para analizar personas que tengan trastornos de sueño, que consuman alcohol o que cuenten con algún efecto por consumo de droga. “El objetivo del proyecto, es proteger la vida de los trabajadores y no decir que usted esta bajo la influencia del alcohol o droga, sino que decir: “Apto” o “No Apto” para iniciar su jornada laboral. Cada empresa, de acuerdo con la legislación vigente y procedimientos internos tomará las medidas adecuadas”, explica el director de esta iniciativa.
Según señalan representantes de las empresas TOC Biometrics y Sociedad de Inversiones Colina la propuesta de los investigadores del DIMEC U. Chile es una gran oportunidad para avanzar en el desarrollo de esta tecnología. “Somos expertos en biometría y estamos muy interesados en aportar y ver cómo se concreta el reconocimiento del iris en una tecnología futura que nos pueda servir para nuestros clientes con las necesidades actuales dada la crisis que enfrentamos. Sabemos que el iris es el futuro, el iris no tiene contacto”, destaca Claudia Cáceres, gerente de la empresa TOC Biometrics, quien agrega “que la colaboración de la empresa se relaciona con la inteligencia artificial mediante el estudio de la data, y de los modelos, crearemos modelos predictivos que contribuirán a disminuir accidentes laborales”.
En el caso de la Sociedad de Inversiones Colina, empresa chilena dedicada al rubro de la vigilancia, como colaboradores de esta iniciativa su labor está enfocada en apoyar con cámaras y housing. “Estamos interesados en apoyar ideas nuevas, buscar soluciones que faciliten el quehacer diario de la gente en temas de seguridad. Nuestra idea es estar a la vanguardia y por eso la inteligencia artificial es tan importante, porque será donde vamos a llegar todos dentro de unos pocos años”, afirma Christian Schulz, presidente de Sociedad de Inversiones Colina.
Según el director de esta iniciativa el uso del iris como tecnología de identificación masiva está recién empezado a madurar en productos comerciales. “Comenzó con la huella dactilar y hoy está con el reconocimiento facial. Con este nuevo desarrollo a través del reconocimiento del iris estamos trabajando en dos líneas: verificación de identidad y aptitud laboral”, comenta Tapia.
El profesor López también destaca el valor de la interdisciplina para abordar este proyecto con estas características. “Es un desafío multidisciplinario porque conlleva procesamiento de imágenes, computación visual, ingeniería eléctrica, matemáticas, inteligencia artificial”, puntualiza el académico del DIMEC U. Chile.