Doctor Miguel O’Ryan reitera la importancia de la vacunación y del autocuidado

“Todavía hay gente que enfermará gravemente o morirá por covid”

“Todavía hay gente que enfermará gravemente o morirá por covid”
El doctor Miguel O'Ryan recalcó la importancia de la vacunación y, en particular, de la segunda dosis entre los adultos mayores que ya recibieron su primera inoculación.
Doctor Miguel O'Ryan.

Si esta planificación se cumple, según lo informado por el ministro de Salud, doctor Enrique Paris, al 30 de junio de 2021 se espera tener vacunado al 80% de la población nacional; es decir, a 15 millones de personas. Antes que eso, el doctor O’Ryan sostiene que “podremos empezar a respirar un poco más tranquilos cuando veamos un muy importante número de adultos mayores de 60 años vacunados con segunda dosis, momento en el que se podría empezar a ver una reducción en la mortalidad e infección grave en un 80% de los vacunados. Mientras eso no se logre, estamos en un período bastante crítico, y para eso simplemente hay que mirar lo que ocurrió en el Hemisferio Norte, analizar las curvas de los diferentes países: los que han tenido evoluciones como el nuestro –es decir, una intensa primera ola en el invierno y una segunda ola algo menos intensa pero significativa en el verano-, tuvieron terceras olas muy intensas en el otoño-invierno, más fuerte aún que la primera”. Con el proceso de vacunación en marcha, “estamos en una carrera para lograr tener a los adultos mayores vacunados con su segunda dosis en números suficientes, de modo que esta tercera ola nos impacte con menor intensidad en los grupos con mayores factores de riesgo de muerte o de hacer un cuadro grave”.

Aunque, añade, “claramente, todavía no alcanzamos a tener entre un 60% o 70% de la población inmunizada y habrá muchos jóvenes que aún no están vacunados y que son los grandes trasmisores del virus. Por ello, aún no veremos su impacto en la inmunidad de rebaño sino hasta junio, cuando debería hacer bajar la cifra de casos nuevos como la que aparece a diario. Ahora estamos en alrededor de cuatro mil por día, que sin vacuna podrían llegar a los nueve mil, siendo que el año pasado lo más que tuvimos fue cerca de seis mil por jornada. Con la vacuna, pero aún sin inmunidad de rebaño, quizás la situación general no va a variar mucho, pero deberíamos golpear fuerte la curva de mortalidad y de enfermedad grave entre los adultos mayores y la población de mayor riesgo. Esa es la esperanza. Pero el escenario actual es un verdadero laboratorio natural, no tenemos certeza de cómo vamos a andar en esta carrera y de ahí mi preocupación. Todavía va a haber mucha gente que va a tener infección grave y va a morir de covid en los próximos meses; por eso, el mensaje a los adultos mayores es que se apuren a ponerse la segunda dosis, no pierdan un segundo, que no piensen que no la necesitan. La curva de mortalidad casi se duplica por cada década sobre los 50 años”.

Así, explica que “estaremos viendo todo este escenario desde ahora y hasta junio, y eso puede crear cierto grado de preocupación: habrá personas que con una dosis de vacuna se van a infectar y a morir, lo que puede crear dudas en cuanto a la vacunación. Por ello el mensaje es muy fuerte en este sentido: hay que mantener la confianza en la vacunación, vacunarnos y seguir cuidándonos. En esta vuelta a un cierto grado de actividad, que también es tan necesario, hay que tener conciencia de que el virus está muy activo entre nosotros”.

¿Podría ser necesario o beneficioso extender el plazo entre dos dosis de la vacuna?

Lo que expondremos en el Consejo Asesor de Vacunas sobre el tema es que hay que tener mucha cautela y cuidado con las extrapolaciones. Para la vacuna de Janssen y el laboratorio Johnson &Johnson se estableció la estrategia de una sola dosis con sustento en los estudios preclínicos,  pero también se está estudiando en Europa qué es lo que pasa si se usan dos dosis. La diferencia con las otras vacunas que no apostaron a usar sólo una dosis es porque quizás determinaron que los datos con los que contaban no sustentaban esa estrategia de manera suficiente, pero son decisiones que toman los investigadores; no significa un determinado vector viral o vacuna en específico, porque no hay estudios comparativos, pueda ser la única que se pueda usar en una sola dosis con la efectividad que se tiene.

“Pero algo que hay que tener en claro es que las vacunas que apostaron a dos dosis no pueden y no deben cambiar de estrategia sin mostrar datos que lo avalen; es decir, sin tener evidencia sustentada en suficientes casos de prueba con una dosis y con un seguimiento adecuado en el tiempo, porque una cosa es la protección que da en el corto plazo, pero otra la diferencia que puede haber entre recibir una o dos dosis en la protección de largo plazo, para llegar eventualmente más rápido a la inmunidad. Es lo que hay que verse con la vacuna de Janssen, todavía, por eso los seguimientos son muy importantes en el tiempo, para ver si se mantiene la protección”.

En ese sentido, agrega el académico, “la información que se va adquiriendo después de los ensayos clínicos también va siendo importante y puede llevar a modificar conductas o esquemas que hayan nacido de éstos. Por ejemplo, la observación sugiere que la separación de dosis en algunas de las vacunas podría favorecer la inmunogenicidad después de la segunda dosis; así como para la vacuna de Oxford, un hallazgo inesperado indicó que es probable que utilizar una menor concentración en la primera dosis puede favorecer la respuesta después de la segunda dosis, pero eso que son observaciones, hay que sustentarlas. Por eso se están haciendo los estudios correspondientes antes de llegar a un  acuerdo, un consenso, de si se aprueban o no cambios en los protocolos de inoculación. Hay que hacerlo de forma pausada, porque podría haber otras consecuencias de distanciar las dosis; pero no es recomendable dejar en una sola dosis una vacuna que se estudió para dos dosis, y en ningún caso se debe extrapolar lo que se determina en una vacuna hacia las otras. Esto es muy importante en nuestro actual proceso de vacunación, donde ya hay población que está pensando en quedarse solo con la primera dosis de Sinovac, lo que podría ser marcadamente insuficiente; al ser una vacuna de virus inactivado, donde el sistema inmune se activa con un material inerte que no se está reproduciendo, uno podría esperar que el estímulo sea algo inferior al una vacuna de vector viral o de ARNm, que básicamente produce en nuestro sistema partículas proteicas en forma activa por un pequeño tiempo.

Ya se ha comentado a nivel internacional que este podría ser un proceso de vacunación anual…

Pienso que eso todavía no está claro; es especulativo todavía saber si va a haber que poner refuerzos o no, porque hay varios aspectos a considerar, y el primero es cuánto tiempo va a estar circulando el virus, lo que va a depender de la rapidez y la intensidad de la vacunación mundial: mientras más lenta sea, más tiempo hay para que el virus siga circulando y creando variantes. Y el tema de las variantes preocupa porque si hay miles de millones de virus circulando habrá posibilidades de que surjan variantes potencialmente muy diferentes, cosa que no ocurre en otras infecciones donde no ha habido una diseminación tan masiva de un agente. De ahí la importancia de acelerar la vacunación mundial y golpear fuerte a este virus, así no se le da tiempo para que vaya generando variantes; en la medida que surjan variantes relevantes es posible que haya que ir ajustando nuevas vacunas, y ahí se podría pensar en que se van a requerir nuevos esfuerzos de vacunación en el tiempo. Es una situación posible, que ha ido al alza en la medida que hemos ido viendo variantes que han ido surgiendo y que están empezando a producir cambios, indicios de que podrían estar escapando de la inmunidad.

Exitosa prueba de la vacuna de Janssen

Respecto a lo que fue el proceso de reclutamiento para la prueba de la vacuna de Janssen, el académico del Instituto de Ciencias Biomédicas cuenta que “fue bastante ejemplar en los tres sitios donde se realizó –Cesfam en las comunas de Colina y San Bernardo, además del Hospital Exequiel González Cortés-,
los que avanzaron reclutando entre 7 y 12 pacientes diarios, con un objetivo inicial de 1000 personas y que, luego de que bajó 40 mil en todo el mundo, lo que se alcanzó rápidamente,  terminamos con 507 voluntarios. Fue una pequeña desilusión porque estábamos preparados para seguir, pero es un número muy significativo que alcanzamos en menos de siete semanas. Ahora estamos en la etapa de mantener el seguimiento del máximo número de personas vacunadas y eso se ha mantenido muy bien; hemos tenido muy pocos casos de Covid, que se han registrado adecuadamente, ninguno de ellos grave. Actualmente lo que ha ocurrido es que ante el ofrecimiento de vacunas del Estado y lo importante que es, se llegó a un acuerdo de que se podían abrir los casos,  lo cual es bastante extraordinario en los estudios doble ciego, a pedido de las personas que lo soliciten, para que puedan ser vacunados en caso de que hubieran recibido placebo. Y se les solicita que se mantengan en el estudio para completar los dos años de seguimiento.

Este seguimiento, agrega, sigue siendo importante en los casos de placebo que reciban la vacunación actual “por seguridad, para ver efectos adversos que puedan ocurrir entre los vacunados y los placebos que después reciben otra vacuna. Se puede tener información respecto de cómo evolucionan, porque es un cambio de metodología que nunca se había hecho antes, pero con lo que ha ocurrido ahora se ha tenido que adaptar, y los análisis de cómo van a ser a futuro las comparaciones entre las personas en que se ha abierto el ciego y las que no va a ser un desafío, en los que se están evaluando los modelos de seguimiento. En nuestro estudio son han sido aproximadamente 200 voluntarios de los 507 que han pedido que se abra su caso, de los cuales más o menos la mitad recibió placebo, se les sugirió vacunarse y la gran mayoría aceptó continuar en el estudio, lo cual es una muy buena noticia”. Y actualmente Johnson & Johnson anunció que una vez que esté aprobada la vacuna por el ISP en Chile, se va a proponer la apertura completa del estudio para que contactemos a todos los voluntarios para informarles si recibieron vacuna o placebo y ofrecerles la vacuna en ese último caso.

¿Van a participar de las pruebas de esta vacuna en mujeres embarazadas y niños, como ya se está haciendo en algunos estudios en Europa?

Fuimos contactados para ver nuestro interés de participar en el estudio pediátrico, ante lo que dijimos que sí pero no hemos recibido aún la ratificación, así que no sabemos si quedamos seleccionados. Los estudios para evaluar las vacunas en diferentes poblaciones ya vienen, no sólo para la de Janssen sino que para todas, porque la estrategia de vacunación global apunta hacia la eliminación de este virus, para lo que será necesario vacunar a toda la población mundial.