Inclusión en la educación

Directora de Oficina de Equidad e Inclusión expone avances de la U. de Chile en temas indígenas en foro de Naciones Unidas

Directora expone avances de la U. de Chile en temas indígenas en ONU
Maribel Mora Curriao, directora de la Oficina de Equidad e Inclusión
Maribel Mora Curriao, directora de la Oficina de Equidad e Inclusión

“Inclusión y Educación: Todas y todos sin excepción”. Ese es el título del nuevo Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo 2020, eje central del diálogo que expertos, activistas, académicos e investigadores de todo el continente llevaron a cabo la pasada semana en el marco de la 20° Sesión del Foro Permanente Para las Cuestiones Indígenas, realizada en la sede de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Nueva York.

La actividad, organizada por el Grupo Principal de los Pueblos Indígenas para el Desarrollo Sostenible, fue moderada por la socióloga e investigadora en educación de la Universidad Iberoamericana de México, Sylvia Schmelkes, quien entregó las principales conclusiones del Informe impulsado por la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago) y el Laboratorio de Investigación e Innovación en Educación en América Latina y el Caribe. “Nunca antes había sido tan crucial convertir la educación en un derecho universal y una realidad para todos” es parte de este análisis que enfatiza en los estragos que ha dejado la pandemia, episodio que ha provocado que más del 90 por ciento de la población mundial se vea afectada por los cierres de escuelas, un “trastorno inaudito en la historia de la educación”.

El informe, además, cuestiona a la sociedad en su conjunto: “La inclusión no es sólo una opción para los encargados de la formulación de políticas. Impuesta desde arriba nunca
funcionará. Así pues, la pregunta que en el informe se les formula a ustedes, como lectores, es si están ustedes preparados para cuestionar el modo de pensar actual y dispuestos a decidir que la educación es para cada persona y debe procurar incluirlas a todas”.

En este contexto, la directora de la Oficina de Equidad e Inclusión de la Universidad de Chile, Maribel Mora Curriao, destacó el rol que deben tener las instituciones públicas de educación superior en esta “integración” y la importancia de que nuestra Universidad haya aprobado la "La Política universitaria para avanzar en la incorporación de los Pueblos Indígenas, sus culturas y sus lenguas". “Sabemos que tenemos la obligación como institución pública de generar una educación pertinente y de calidad que incluya de manera efectiva a los pueblos indígenas, resguardando su participación con identidad en todas las oportunidades que la Universidad ofrece y considerándolos en todas las instancias que les permitan incidir en su propio desarrollo”.

La profesora y poeta reconoció que “este informe no nos dice tantas cosas nuevas sobre los pueblos indígenas de América Latina frente a la educación formal en todos sus niveles, ya que los pueblos indígenas han sido tradicionalmente parte de los grupos excluidos o están en riesgo permanente de ser excluidos en alguno o todos los niveles de educación. Dependiendo en el país en que nos centremos, de las regiones incluso dentro de los países y de las otras identidades o condiciones con las cuales intersectan sus vidas tales como la pobreza, la discapacidad, la orientación sexual, la identidad de género y otros”, expuso.

Por otra parte, frente a las condiciones impuestas por la crisis del COVID-19, señaló que “en ese contexto, a pesar de que durante las últimas décadas se venía hablando de un cierto mejoramiento en las mediciones internacionales, la pandemia ha vuelto a poner de relieve la desigualdad, ahora hacia la atención en salud, el acceso en las vacunas, las condiciones para cumplir con las medidas sanitarias y en educación, específicamente la falta de acceso a electricidad e internet para acceder a una educación virtual efectiva en estos tiempos de emergencia”.

Al finalizar, la directora de la Oficina de Equidad e Inclusión recordó que “la verdadera inclusión se cumple cuando los incluidos acceden a espacios de decisión. En ese sentido, la inclusión, como la educación en general, siempre es política, porque se trata también de la redistribución del poder. Sabiendo esto, es que los pueblos indígenas siempre hemos exigido el derecho a consulta y a participación de las decisiones que nos afectan, y -como han acuñado hace varias décadas ya las personas con discapacidad- también esperamos este 'nada sobre nosotros sin nosotros' o como dicen también en el movimiento feminista en Chile 'nunca más sin nosotras'. Existe entonces el llamado fuerte y seguro, el grito de protesta, las propuestas específicas, los profesionales preparados y el conocimiento de siglos en nuestros pueblos y sobre todo como decimos los mapuche 'petu mongenleiñ, petu mapuchengeiñ': todavía estamos vivos, todavía somos mapuche”.