"(A)cerca de paisajes":

Prof. María Elena Muñoz publica libro centrado en paisaje y pintura chilena

Prof. Mª Elena Muñoz publica libro centrado en paisaje y pintura

Seis ensayos, tres de ellos inéditos y los otros tres reelaboraciones de textos publicados con anterioridad, conforman (A)cerca de paisajes, libro publicado por Ediciones Metales Pesados en el que María Elena Muñoz aborda la complicidad entre paisaje, pintura y pictoricidad en el arte chileno. Lo anterior, a través de textos que ahondan en obras de artistas como Valenzuela Llanos, Juan Castillo o Cosme San Martín, para desarrollar distintos aspectos de esta estrecha relación.

“La relación arte/naturaleza está en el origen del paisaje, pero es más precisamente la pintura la que lo demarca”, escribe en su libro la académica y directora del Departamento de Teoría de las Artes. “Este empezar a existir del paisaje fue de la mano del surgimiento de representaciones pictóricas que reconocían ciertas vistas del territorio, como motivos dignos de ser pintados: la pintura, en otras palabras, fue la que creó el paisaje, sea éste finalmente pintado o simplemente apreciado”, afirma en esta publicación en la que, según ella misma explica, retoma “la relación originaria entre pintura y paisaje, para deslizarse desde allí a la cuestión de la pictoricidad”.
 
La pictoricidad es un concepto que desde hace tiempo ha llamado la atención de María Elena Muñoz, “la cual refiere a la cualidad de lo pictórico y el hecho de que ella se puede incluso percibir en expresiones que no siempre se enmarcan dentro de la pintura misma de soporte bidimensional”, señala. Y es ese concepto el que ha vinculado con el género del paisaje que “con el tiempo se ha desbordado del marco hacia otros soportes y procedimientos, manteniendo la relación con la naturaleza, resignificándola o interviniéndola”, añade. 
 
“Si bien es cierto hoy se habla de muchos tipos de paisaje en diferentes ámbitos, lo que está muy bien, a mí me sigue interesando el modo en que el género paisajístico elabora nuestra relación con la naturaleza. Podría decir que es como una fijación de un fragmento de realidad desprendido del continuum de lo visible que reproduce con sus manchas, colores y texturas las manchas, colores y texturas de lo visible natural, de ahí esa suerte de intimidad con la pintura”, explica la académica. 
 
¿Qué motivó la reunión y publicación de estos textos en un libro que se centra precisamente en la relación paisaje/pintura?

En ese sentido, enfatizar la relación de pintura y paisaje es reconocer que la mirada contemplativa hacia la naturaleza es producto de la pintura. Es decir, es la pintura como disciplina la que nos hace ver la naturaleza (o la realidad, por extensión) como algo estéticamente "interesante", al enmarcarla, al presentarnos una "ventana" para observar las cualidades de un determinado paraje en un determinado lugar de una forma distinta a la mirada que pueda tener un geógrafo o un agricultor o cualquier otra mirada interesada. No quiere decir esto, que el paisaje sólo pueda apreciarse como "bello", porque también el paisaje resignifica intencionadamente el lugar, lo intenciona, incluso políticamente, como puede apreciarse sobre todo en las expresiones más contemporáneas.

¿Qué rol jugó en su interés por publicar este libro lo que señala en sus primera páginas, sobre la necesidad de rescatar la pintura chilena de paisajes del "lugar de la tradición y el gusto conservador"?

Diría que en general me parece lamentable que la tremenda producción paisajística chilena no se haya abordado con demasiada justicia y que la gran mayoría de las pinturas se encuentran en colecciones privadas que no brindan mayor acceso a su estudio y difusión. En Chile, el paisaje es mucho más importante durante el siglo XIX y principios del XX que la pintura de historia y sustituyó a ésta como imagen de la "identidad" nacional, lo cual se suma a la gran calidad artística de buena parte de esta producción. El hecho que hayan sido beneficiadas por la programación cultural de la dictadura, no fue muy beneficioso en realidad, porque desestimuló el interés en ella.

Pensando en el desarrollo de los textos, ¿fue su encuentro con la(s) obra(s) que menciona a lo largo del libro lo que detonó la reflexión o éstas vinieron a ejemplificar los distintos asuntos que plantea en torno a esta relación?

Diría que, las ganas de escribir, no necesariamente el interés que fue anterior, siempre parte de las obras. En este libro en particular, la pintura de Valenzuela Llanos, que ocupa el primer ensayo, es la que me impulsó. Por eso el libro se llama "(A)cerca de paisajes", pero no es solo sobre paisajes sino cerca, literalmente de los paisajes, y que intenta destacar una mirada cercana, una observación de los detalles que me parecen significativos. Es a propósito de los detalles y a propósito de las obras que, a su vez,  son detalles en el cuerpo del arte nacional , que se puede ampliar el rango hacia el análisis y a interpretaciones más complejas.
 
¿Cuáles cree usted que son las preguntas que abre esta publicación, en relación al trabajo que viene ahora de acercarse a "las formas del paisaje contemporáneo", como indica en su libro?

Una de las cuestiones que yo esbozo es que el género del paisaje puede seguir pensándose, como decía Romera, como una constante en el arte chileno. En el arte contemporáneo local, se pueden encontrar ejemplos tanto en la pintura propiamente tal, como en intervenciones en el paisaje, complejos trabajos que se proponen además  lanzar una mirada crítica sobre la experiencia que hoy podemos tener con una naturaleza cada vez más intervenida y socavada por los intereses del capital.
 
María Elena Muñoz es doctora en Filosofía con mención en Estética y Teoría del Arte. Académica del Departamento de Teoría de las Artes de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, en la disciplina de historia del arte. Está abocada a problemas relativos a la relación entre arte y modernidad en general, y a las derivas del paisaje y la expansión de la pintura en particular. Sobre estos temas es autora de variados artículos académicos y del libro Atisbos de una experiencia: pintura chilena y vida moderna 1870-1930 (Metales Pesados, 2014).