En sus 10 años, el Instituto Milenio de Neurociencia Biomédica (BNI) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile ha permitido que un total de 617 científicos trabajen en sus laboratorios, considerando todos los niveles de formación, desde estudiantes, staff scientist, magísteres, doctorados y postdoctorados, algunos de los cuales han provenido de Alemania, Estados Unidos, Australia, Portugal, España, Italia, Brasil, Canadá, Suiza, Suecia, Inglaterra, Uruguay, China, Japón y México, entre otros países.
Este trabajo ha permitido el desarrollo de múltiples investigaciones de alto impacto. Hoy, entre los proyectos que se están realizando al alero de la Corporación BNI destacan las investigaciones de Carolina González (ejes periféricos y regeneración), Hery Urra (metástasis y cáncer) y Danilo Bilches (estudio de proteínas en discapacidad intelectual), entre otros. Además, Bilches está trabajando en el desarrollo de una terapia génica para tratar el ELA (esclerosis lateral amiotrófica), estudio que involucra a la Asociación de Distrofia Muscular (MDA, por sus siglas en inglés) –organización estadounidense creada en 1950 y que financia estudios para combatir dicha patología.
De esta forma, comenta la investigadora del BNI y presidenta de la Academia Chilena de Ciencias, Dra. Cecilia Hidalgo, el Instituto "ha contribuido a expandir la comunidad científica nacional a través de la formación de profesionales jóvenes del más alto nivel, quienes además han traspasado las fronteras nacionales". Plantea, por otra parte, que esto representa un aporte al desarrollo científico nacional, aunque nunca es suficiente, ya que “tenemos muy pocos científicos en Chile, y el apoyo que hemos tenido de los gobiernos, tanto a la ciencia, innovación, como tecnología, ha sido realmente vergonzoso, no solo en la inversión estatal. La inversión privada también es escuálida”.
La dirigente e investigadora agrega que “en ese sentido, en el BNI hemos estado muy dedicados en tratar de revertir esa situación, más allá de generar ciencia de excelente nivel, hemos desarrollado otros aspectos. Hemos tenido una política muy activa de difusión de la ciencia en la educación. Además, queremos llegar al sector productivo”, dijo la Dra. Hidalgo.
Para el director del BNI, Dr. Claudio Hetz, la “Corporación BNI naciente ya está patrocinando iniciativas en forma independiente y otorgando un espacio dedicado a investigadores jóvenes, para que éstos lideren sus propios proyectos. Así estamos abriendo nuestros laboratorios y organizándonos como entidades muy colaborativas”, puntualizó.
El evento principal de celebración del décimo aniversario se realizó el 22 de junio y en él participaron dos relatores internacionales: el Dr. Roberto Mayor, investigador chileno de la University College London, quién presentó la conferencia “Sondeando el futuro: ¿hacia dónde va la biología?, y el Dr. Rafael Yuste, neurobiólogo español que se refirió a “Las nuevas neurotecnologías: implicancias para la ciencia, medicina y sociedad”.
Desafíos a futuro
BNI comenzó sus labores en 2012 bajo la dirección de Andrés Couve, actual ministro de Ciencia. Algunos de sus investigadores son Jimena Sierralta, Pedro Maldonado, Miguel Concha y Steffen Hartel, Rómulo Fuentes, Andrea Paula-Lima y René Vidal, entre otros. A futuro, comenta su director, Claudio Hetz, es continuar a la vanguardia en investigación y transferencia tecnológica en materia de neurociencia, "por lo que, con el objetivo de abarcar más áreas científicas, el siguiente paso es convertirnos en una corporación. De esta manera seguiremos potenciando la formación de profesionales y académicos relacionados con la ciencia”.
El Dr. Pedro Maldonado ha sido parte de este trabajo, a través del estudio de la Dinámica Funcional Sub-Celular, Identidad y Morfología Celular, Desarrollo supra-celular y de circuitos, Plasticidad y Comportamiento, Neurociencia de Sistemas, Matemáticas aplicada e informática biomédica y en la Disfunción neural y dianas farmacológicas, entre otras materias. El académico sostiene que el “BNI ha permitido generar nuevos proyectos para continuar la acción de nuestro instituto. En ese sentido, junto a la Dra. Jimena Sierralta, hemos levantado una nueva propuesta basada en neurociencia cognitiva, que busca entender la Inteligencia Artificial, la memoria humana y el código predictivo, los cuales son elementos fundamentales para -por un lado- entender el funcionamiento del cerebro y por otra parte construir nuevas tecnologías relevantes para la sociedad”.
Además, el Dr. Miguel Concha –junto al Dr. Steffen Hartel- están enfocados en la puesta en marcha de otra propuesta destinada a potenciar el desarrollo de microscopía y el análisis de datos matemáticos, una propuesta que el equipo viene desarrollando desde 2017. “La interacción con académicos internacionales nos motivó a continuar con investigaciones que sigan posicionando a nuestro país en lo más alto de la actividad científica internacional. Es por esto que decidimos invitar a esta nueva área al Dr. Roberto Mayor, quien retornará a nuestro país para abrir la senda de la mecanobiología”, informó Miguel Concha.
La investigación del Dr. Roberto Mayor, de la University College London, determinó la importancia de las fuerzas mecánicas y la dureza del medioambiente celular en la formación de las distintas partes del cuerpo en vertebrados. A través del estudio de un grupo de células ubicadas en la parte posterior de la cabeza y conocidas como crestas neurales, el laboratorio del chileno aún radicado en Inglaterra, busca entender los mecanismos de migración relacionados con la formación de tejidos en el embrión.
Referente en investigación e innovación
En el año 2017, el director del BNI de la época, Dr. Andrés Couve, recibió el premio SOFOFA Andrés Concha-2017 por su contribución al acercamiento de la ciencia a otras esferas de la sociedad. Anteriormente, en 2015, junto a la Dra. Cecilia Hidalgo, el profesor Couve participó además en la comisión presidencial “Ciencia para el desarrollo”, convocada por la Presidenta Michele Bachelet, iniciativa que daría impulso al Ministerio de Ciencias que se puso en marcha en 2018.
El Instituto ha cumplido además un rol trascendental para la internacionalización de la ciencia nacional. Así lo demuestran las 526 investigaciones (papers) y estudios publicados en las mejores revistas especializadas, de alto impacto, entre las que destacan las ediciones de Nature. También ha destacado por abrir un área de innovación en el que han desarrollado 18 proyectos en los últimos 6 años, los que en su mayoría corresponden a soluciones tecnológicas para empresas. Estos proyectos han permitido al BNI levantar un capital de 1,7 millones de dólares.
Por otra parte, ha suscrito acuerdos con otros centros de investigación para abrir proyectos colaborativos. Entre ellos, destacan el centro de Investigación y Desarrollo (I+D) de Corfo y como receptor de proyectos del NIH norteamericano. En este ámbito, uno de los logros más importantes corresponde a la obtención de fondos internacionales, durante cuatro años, a través del Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED) por $115 mil dólares. Este financiamiento permitió la creación de la nueva red NeuroSur -integrando 17 centros en neurociencia de 11 países- y orientada a resolver problemas de transferencia a nivel iberoamericano.
Durante sus 10 años de existencia, el BNI ha colaborado además con la Universidad de Chile en la gestión de 10 solicitudes de patentes. Una de las más destacadas corresponde al licenciamiento de una tecnología en el área de terapia génica contra enfermedades neurodegenerativas, transferida a la compañía biotecnológica belga Handl Therapeutics, fusionada a la big farma UCB, lo que permitirá realizar estudios clínicos hasta fase III en patologías de esta área.
Formación más allá del laboratorio
Entre los años 2018 y 2020, con el objetivo de impulsar sus carreras tanto dentro como fuera de la academia, se realizaron los talleres BNI Transforma. En ellos, se ejercitó capacidades y herramientas complementarias a la formación científica. Para esto se abordaron temas de política científica, habilidades comunicacionales y habilidades docentes, entre otros. También, con el objetivo promover la integración de personas formadas en ciencias en los sectores privado y público, se realizó en 2019 junto a la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA) el encuentro “Más allá del laboratorio”.
Asimsimo, el área de educación y extensión de BNI ha generado espacios de acercamiento del conocimiento científico a la sociedad, promoviendo la cultura científica. Es así que en 2017 BNI participó en la creación de “Neurozona”, un espacio habilitado por el Museo Interactivo Mirador (MIM) para acercar la neurociencia a la comunidad que registra un promedio de 350 mil visitas anuales.
“El objetivo de esta sala es acercar los conceptos más fundamentales de neurociencia y cómo funciona el cerebro. Nuestro desafío es entregar un conocimiento complejo a niños. Esto de alguna forma BNI ya lo ha logrado a través de otras iniciativas, en las que hemos entregado información de neurociencia a la comunidad escolar nacional", explica el Dr. Claudio Hetz, quien enfatiza que “explicar conceptos de biología y neurociencia a niños, y además conseguir que estos sean comprendidos e incorporados a sus actividades cotidianas, resulta mucho más difícil que entregar este mensaje a un adulto”,
Otras iniciativas educativas de BNI son “Mundo Dendros”, cuyo objetivo es acercar la neurociencia a jóvenes mediante el web-cómic “Dendros: un viaje por el cerebro”; el juego “El escape de Kai”, que el 2013 recibió el Premio Nacional de Innovación en Educación Científica; y el domo “Cerebro”, que ha participado en eventos y festivales recibiendo más de 25 mil visitantes por año.
Desde el 2015, gracias a una alianza con la plataforma educativa Biointeractive del Instituto Howard Hughes Medical Institute (HHMI), a través de la iniciativa “Mentes Transformadoras”, BNI ha podido adaptar sus contenidos al currículum nacional y así apoyar la enseñanza de ciencias en el aula. Se han realizado más de 35 talleres en los que docentes capacitados facilitan sesiones de aprendizaje a otros profesores, llegando a más de mil profesionales de la educación de diferentes niveles escolares provenientes de casi el 90 por ciento de nuestro país, impactando a más de 100 mil alumnos.
El Dr. Roberto Mayor también destaca el rol del Instituto Milenio de Neurociencia Biomédica en materia de educación. “El impacto o las actividades que han tenido a nivel de la educación escolar es impresionante. Han logrado llegar a las escuelas y realmente es una actividad transformadora para los niños, la forma que BNI ha logrado ese acercamiento a los colegios creo que es una de las dimensiones que más impacto puede tener a largo plazo de parte de este centro de investigación. Este es solo una de las razones por las que puedo afirmar que BNI es y será un pilar fundamental para la ciencia global”, señala.