Djian Sadadou, gerente de comunicaciones, OCE (París):

"La pandemia puso de evidencia que la escuela juega un rol fundamental en la sociedad"

Entrevista a Djian Sadadou de la Office for Climate Education
Djian Sadadou, gerente de comunicaciones de la OCE, participó del panel: "Construyendo Territorios STEAM: El rol de los docentes en la Educación en Cambio Climático".
Djian Sadadou, gerente de comunicaciones de la OCE, participó del panel: "Construyendo Territorios STEAM: El rol de los docentes en la Educación en Cambio Climático".
Sobre la Conferencia y el cambio climático, Sadadou sostuvo que "todo el mundo tiene que participar porque si no participamos no vamos a salir de esto, por eso necesitamos estos espacios".
Sobre la Conferencia y el cambio climático, Sadadou sostuvo que "todo el mundo tiene que participar porque si no participamos no vamos a salir de esto, por eso necesitamos estos espacios".

"Lo que me motiva hoy es la transición climática y sus desafíos en términos de educación, energía e inclusión social. Como resultado, me especializo en comunicación de impacto, distribución de contenido educativo y desarrollo de comunidades. Durante 4 años he puesto mi perfil y mis habilidades al servicio de organizaciones internacionales que tienen como objetivo principal contribuir a la transición climática". Esta es parte de la descripción de Djian Sadadou en el sitio Office for Climate Education (OCE), institución en la que se desempeña como gerente de comunicaciones. 

El profesional es uno de los expositores que participa en la III Conferencia Internacional Educación en Cambio Climático y Desarrollo Sostenible, que se extenderá hasta este jueves 24 de junio. En conversación con Prensa UChile, el licenciado en ciencias políticas y ambientales explicó las motivaciones que lo mueven hoy y el rol de las escuelas en medio de la pandemia para contribuir al manejo del cambio climático. "La pandemia como crisis se acerca mucho a lo que hoy llamamos crisis climática, que es otra catástrofe que nos está por caer encima, y justamente lo que estamos viviendo hoy nos permite poner las urgencias de nuevo al centro de la mesa. O sea, si no queremos vivir momentos así hay que actuar por el cambio climático”, sostuvo. Y, añadió que “hay que enseñar sobre esto, sobre el desarrollo sostenible, hay que tener educación STEM, porque son las únicas maneras que vamos a tener de protegernos de las catástrofes que pueden venir”.

Tras su participación en el encuentro organizado por la Universidad de Chile, en conjunto con el Programa Indagación Científica para la Educación en Ciencias ICEC 2019 – 2021 MINEDUC, a través del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, del Instituto de Estudios Avanzados en Educación, del CIAE y del Programa ECBI; por la Office for Climate Education (OCE); por la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe de la UNESCO (OREALC/UNESCO Santiago); y por la Fundación Internacional Siemens Stiftung, y que cuenta con el patrocinio de la Embajada de Alemania en Chile y del Ministerio de Medio Ambiente, Djian Sadadou aprovechó de realizar una invitación a todos quienes se interesen por participar en este tipo de instancias.

“Los invito a descubrir el súper trabajo que todas estas entidades están haciendo para el desarrollar educación STEM en Latinoamérica, por la educación en cambio climático desde Latinoamérica que es algo muy importante”, aseguró.

En medio de la pandemia y los cambios que ha traído a nivel educativo, ¿de qué manera aprovechar esto a favor de la enseñanza? ¿Qué oportunidades o desafíos ven a corto y largo plazo?

Esta pandemia ha puesto a la luz desafíos, pero también oportunidades. En los desafíos lo que hemos visto mucho nosotros como Centro UNESCO -trabajamos bastante con la UNESCO, en la oficina para el Cambio Climático- son reportes que han mostrado que tristemente en América Latina y en varios países en desarrollo la pandemia ha tenido consecuencias fatales para la educación. Hemos visto que los sistemas no estaban preparados y hemos visto también con más preocupación las fracturas sociales o desigualdades. La educación pasó a realizarse a distancia, y eso ha sido muy complicado para familias que no tienen internet, que no tienen computadoras, donde hay un teléfono celular por casa, y que el papá o la mamá se lo lleva para ir a trabajar. Eso es lo que hemos visto en muchas partes del mundo, entonces los desafíos que la pandemia ha puesto a la luz, son la digitalización de la educación, hay que prepararse para la educación remota. Hay que hacer llegar internet a todas partes de los países de América Latina, en Chile, México, Brasil, Colombia y/o Argentina. Y, sobre todo, hay que seguir considerando a la educación como una prioridad. La pandemia puso de evidencia que la escuela juega un rol fundamental en la sociedad, es la base que permite a la sociedad de servir concretamente.

Las familias se dieron cuenta, al tener a sus hijos e hijas en casa y al no poder ir a trabajar, que finalmente la escuela juega un papel súper importante, más allá de la educación, más allá de lo que los niños aprenden en casa, es el rol que juega el docente. De un día para otro todos los padres sabían lo difícil que es el día a día, al tener que educar a sus hijos.

Y, ¿en términos de oportunidad?

Hay muchísimas para tratar por medio de la educación, por ejemplo, el cambio climático. La pandemia como crisis se acerca mucho a lo que hoy llamamos crisis climática, que es otra catástrofe que nos está por caer encima y justamente la pandemia permite poner las urgencias de nuevo al centro de la mesa, o sea, si no queremos vivir momentos así hay que actuar por el cambio climático. Hay que enseñar sobre esto, sobre el desarrollo sostenible, hay que tener educación STEM, porque son las únicas maneras que vamos a tener de protegernos de las catástrofes que pueden venir.

¿Cómo transmitir de manera efectiva conocimiento a los estudiantes en torno al cambio climático? ¿Qué estrategias utilizar?

Nosotros en la OCE utilizamos mucho las pedagogías que llamamos activas, el método de indagación y la pedagogía de proyectos con la idea de justamente hacer que los jóvenes puedan ser actores de soluciones locales ante el cambio climático. Estas pedagogías activas o de indagación son muy buenas para enseñar sobre el cambio climático porque permiten varias cosas. Primero, permiten actuar concretamente, utilizar el razonamiento, todo el proceso de pensar, e identificar el problema con los alumnos, sobre ¿qué estamos viendo? Identificar el problema, proponer inmediatamente una solución, y lo que tiene que cambiar también. Es lo que se busca con las pedagogías activas, luchar contra la ansiedad debido al cambio climático, que estamos viendo pre-pandemia, durante y seguro posteriormente. Los alumnos y alumnas están muy ansiosos, estamos teniendo una generación de jóvenes ansiosos que a lo largo del día escuchan un discurso de parte de las noticias, de sus padres, de los adultos, del mundo que finalmente es muy catastrófico: ‘no estamos haciendo lo suficiente’. ‘el nivel del mar está aumentando’, ‘no nos vamos a poder librar de esto’ y así es muy difícil para ellos proyectarse en un futuro donde todo es malo.

Lo que nosotros estamos haciendo en la OCE con las pedagogías activas del cambio climático es entregar las herramientas a las próximas generaciones de comprender los efectos del cambio climático, comprender la ciencia para permitirles proyectarse en un mundo cambiante, en un mundo en evolución, pero que al final del día va a estar ahí, para ellos y tienen que saber entenderlo para poder proyectarse de manera positiva. El otro aspecto de pedagogía de proyectos es justamente anclar eso en un contexto local. Una idea es de pasar de la noción global del cambio climático, como el efecto invernadero, que es un problema que afecta a todo el mundo, a mi escala, a mi nivel, que problema veo y qué puedo hacer. Nosotros en nuestros cursos pedagógicos tenemos una parte que se llama “nosotros hacemos”, que permite a los docentes y a los estudiantes unirse a la comunidad para poner en pie proyectos de atenuación al cambio climático. Pueden ser diversos, como organizar, por ejemplo, ir a pie a la escuela para reducir las emisiones de carbono, puede ser un día de alimentación sin carne, o se puede organizar una obra de teatro porque la educación en cambio climático no es solo científica, es totalmente interdisciplinaria y se puede hablar de esto en todas las materias. Y, ahí vemos nuevamente que la escuela juega este rol fundamental de conexión de las comunidades: la educación en cambio climático permite desde la escuela expandir soluciones a la comunidad.

Sobre la III Conferencia Internacional dónde participó junto a otros destacados especialistas, ¿cuál crees es la principal importancia de generar este tipo de espacios?

La importancia es capital. Es súper importante que estos espacios existan para permitir a actores que trabajan en torno al cambio climático inspirarse mutuamente, conectarse, ver que no están solos, que están en movimiento porque finalmente los territorios STEM son un movimiento en marcha, como una locomotora, porque una vez que comienza, avanza y al avanzar va recogiendo más “carriles” a su locomotora. Y, un movimiento necesita estos momentos de inspiración, de compartir, de conversar de analizar, estos momentos son capitales y también sirven para mostrar a las autoridades políticas que hay acciones en la educación climática que es importante que se tome en cuenta al momento de tomar las decisiones para la educación, que hay una voluntad, una necesidad y actores que son capaces de venir a ayudar en la implementación de estas políticas concretamente. Además, las soluciones que se van a aportar tienen que ser globales y hay que tener noción de eso, tenerlo muy presente. Hay soluciones a nivel local que pueden poner en marcha los estudiantes, pero el problema es global. Y, todo el mundo tiene que participar porque si no participamos no vamos a salir de esto, por eso necesitamos estos espacios.

¿Qué te gustaría decirles a quienes leerán esta entrevista y están interesados en estos temas?

Los invito a descubrir el súper trabajo que todas estas entidades están haciendo para el desarrollar educación STEM en Latinoamérica, la educación en cambio climático desde Latinoamérica que es muy importante. Que hay conocimientos, hay estrategias, hay actividades que están siendo desarrolladas por y para América Latina, y que es un momento muy bonito para ver como este continente se une para promover, expandir la educación en cambio climático.