El ex profesor de Derecho Romano e Historia del Derecho de nuestra Facultad, Alejandro Guzmán Brito, falleció en la tarde de ayer a los 76 años de edad.
Nacido en 1945, Alejandro Guzmán Brito era abogado de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y Doctor en Derecho por la Universidad de Navarra. En ambas casas de estudio fue profesor de Derecho Romano. Posteriormente, por 35 años, entre 1975 y 2010 fue profesor de dicha asignatura en nuestra Facultad, adscrito al Departamento de Ciencias del Derecho.
El profesor Guzmán Brito fue además Jefe de la Oficina de Planificación y Estudios , director del programa de Doctorado y posteriormente decano de la Escuela de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, donde en 2016 recibió la distinción de Profesor Emérito. Fue además Prorector y rector de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación.
Dirigió la Revista de Estudios Histórico-Jurídicos de Valparaíso y de la Revista de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. 1977-2021.
Entre sus obras más destacadas está el Tratado de Derecho Romano Privado, en dos tomos, publicado por la Editorial Jurídica de Chile (1996-1997).
El decano de nuestra Facultad, Pablo Ruiz-Tagle, destacó que el profesor Alejandro Guzmán Brito fue un maestro de generaciones, romanista, estudioso de Andrés Bello con una valiosa obra sobre interpretación y discípulo de Alvaro D’ors. “Recuerdo su carácter afable y dialogante. Lo conocí en las primeras jornadas de Derecho Civil en Jahuel en 1991 y siempre mostró hacia sus pares académicos y estudiantes una relación académica respetuosa y marcada por conversaciones profundas sobre la investigación del Derecho", señaló.
El profesor de la Facultad, Héctor Loyola, quien fuera su ayudante y amigo, señala que “su legado científico excede con mucho el campo de la romanística, y se extiende también a la historia y a la teoría del derecho y al derecho civil. Se trata, qué duda cabe, de uno de nuestros más grandes juristas. En nuestra Facultad impartió con brillo la cátedra de Derecho romano, desde muy joven, recién llegado al país luego de doctorarse en España con su maestro y amigo Álvaro D’Ors. Era perceptible para nosotros, sus alumnos, su temprana erudición, su talento, su rigor y disciplina, y, sobre todo, la elegancia de su oratoria”.
Agrega el profesor Loyola que “para sus colegas, era siempre el apoyo preciso y generoso. Ejercía el respondere con entusiasmo, pero no solo despejaba la duda: llegaría al próximo encuentro con varios libros o artículos concernientes al asunto. Y para quienes tuvimos la fortuna de recibir su docencia informal, sin cita previa ni hora de término, o per mensam, su figura representa la vocación bien dirigida, la actividad incesante que redunda en los frutos más refinados del quehacer intelectual. Nos hará falta, mucha falta. Solo resta, una vez más, agradecerle. Gracias AGB y ¡Hasta siempre Maestro!”
La Facultad de Derecho expresa sus condolencias a la familia y amistades del profesor Alejandro Guzmán Brito.