Mujeres de la tristamentalidad reflexionan sobre Género en U. de Chile

Mujeres de la tristamentalidad reflexionan sobre Género en U. de Chile

Ya sea por el Curso de Prevención del acoso sexual y acoso laboral, al que convocó la Dirección de Gestión y Desarrollo de las personas (VAEGI); el Diploma de Postítulo Gestión Universitaria con Perspectiva de Género, que organiza la Dirección de Igualdad de Género (Digen); la Campaña sobre el sello Genera Igualdad (VEXCOM); la publicación de la Ley N°21.369, que regula el acoso sexual, la violencia y la discriminación de género en el ámbito de la Educación Superior; o la presentación del nuevo Modelo Educativo de la Universidad de Chile (Departamento de Pregrado), donde se incorpora el principio orientador, el de "Igualdad de género y no discriminación"; la perspectiva de Género se encuentra en los pasillos, aulas, laboratorios y patios de los Campus de la Casa de Bello.

Lo significativo es que, ya no sólo se le considera contenidos-estanco, propios de Cátedras asociadas a las Humanidades, sino que comienza a permear, cada vez con mayor naturalidad y convicción a los discursos, debates, reflexiones, currículos de Pregrado y a la cultura de la Universidad Pública, referente de las transformaciones sociales en curso en el país.

La atmósfera que rodea a estudiantes, académicos/as y personal de colaboración instala con frecuencia la pregunta por el Género. Las respuestas son múltiples, diversas e interseccionales.

La perspectiva de Género en la U. de Chile: ¿Una deuda que se empieza a saldar?

La Dra. Anilei Hoare Teuche, académica del Departamento de Patología y Medicina Oral, recordó que “el año 2019, la Universidad de Chile adquirió el compromiso histórico de obtener el sello Genera Igualdad, en convenio con el PNUD, para la instalación de estándares de igualdad de género en nuestra Casa de Estudios. A partir de entonces, dos Facultades -Ciencias Sociales y de Ciencias Físicas y Matemáticas- comenzaron el desafiante proceso de dar los primeros pasos para que esta meta se haga realidad. Hoy llegamos al momento en que comenzará la difusión de tales avances para motivar a toda la Universidad a avanzar en disminuir brechas por género, generar un modelo institucional de educación no sexista, contar con Unidades de Género en todas las Facultades, entre otros”.

La docente, advirtió que, “sin duda, la voluntad expresada por la Universidad, al adquirir el compromiso de obtener este sello histórico, es un signo de reconocimiento de las desigualdades existentes en nuestra institución, que se reflejan tanto en la educación entregada a nuestros/as/es estudiantes, en la distribución de sueldos y tareas entre nuestros/as/es funcionarios/as/es, así como en la carrera académica. Todo lo anterior cruzado por problemas fuertemente arraigados en nuestra sociedad, como la distribución dispar de tareas de cuidado en el hogar, conductas de acoso sexual, por mencionar algunas”.

Este compromiso institucional por el avance en materias de igualdad de género, agregó la Dra. Hoare, “se ve reforzado por la actualización de su Modelo Educativo, recientemente presentado a la comunidad, el 30 de septiembre de 2021; el que incorpora un quinto principio orientador, el de ‘Igualdad de género y no discriminación. Esto es de gran relevancia para avanzar a una educación más inclusiva, sin sesgos de género, tanto en las aulas como en los conocimientos impartidos a nuestros y nuestras estudiantes”.

Para Rocío Segura Sepúlveda, estudiante 3° Año de la Facultad de Odontología, “en los últimos años, la Universidad de Chile ha adquirido un mayor compromiso con el Género, ya sea mediante la creación de diplomados, cursos, charlas y Políticas en torno a este tema, lo que ha permitido instaurar la perspectiva de Género en los distintos espacios universitarios. Sin embargo, podemos evidenciar, claramente, que el grado de relevancia que se le da al Género varía según la Facultad de la que seas parte -que va de la mano con el cierto grado de autonomía que tiene cada una de ellas-, por lo que, si bien queda clara la intencionalidad de saldar esta deuda, queda mucho camino por recorrer”.

Como parte del estamento Personal de Colaboración, Paulina Navarrete Castro, Asistente Social de la Facultad de Odontología, reconoció que “la Universidad de Chile tiene un compromiso y realiza un esfuerzo sostenido por generar condiciones de igualdad de género en la comunidad universitaria, además de erradicar la violencia de género, lo que se refleja  en distintas iniciativas, como el convenio con el PNUD, para la instalación de estándares de igualdad; la creación de Unidades de Género locales en toda la Universidad; el Modelo de atención para víctimas de acoso/abuso sexual, que se ha ido perfeccionando progresivamente; hasta llegar a la incorporación al Modelo Educativo del principio de igualdad de género y no discriminación”. Estos, dijo la profesional, “son algunos de los grandes pasos que ha dado la Universidad para generar igualdad de género, lo que marca una ruta a seguir para tod@s l@s integrantes de la comunidad universitaria”

Problematizar la desigualdad de Género en la U. de Chile

Como institución de Educación Superior, la Universidad de Chile se caracteriza por abordar, con rigurosidad, las complejidades propias de la sociedad que habitamos, gestionando un debate crítico, con estatura país. Por ello, la Dra. Anilei Hoare aseguró que “quienes hemos participamos en la construcción de la institucionalidad de Género en la Universidad, reconocemos que, pese a los avances en Políticas, manuales institucionales, entre otros, que tienden a regularizar y aplanar las desigualdades entre géneros en nuestra institución, aún existen resistencias y desconocimiento por parte de sectores de nuestra institución”.

Según continuó la académica, “todos los esfuerzos tendientes a sensibilizar y problematizar las desigualdades existentes, deben ser relevados y difundidos. Creemos firmemente que, en la medida que nuestra comunidad, se encuentre con la posibilidad de reflexionar en torno a estos temas, de discutir, de informase sobre los alcances de los problemas detectados y las soluciones institucionales, nos acercaremos a construir una comunidad más saludable y respetuosa”.

Rocío Segura complementó que “es esencial que, en los espacios locales, se generen las instancias de dialogo sobre las desigualdades de Género existentes en la Universidad; la mayoría de las personas saben que se dan estas desigualdades en otros aspectos de la vida, pero no logran verlo en su círculo más cercano -la típica “no eso no ocurre acá”-, por lo que estas oportunidades nos permiten compartir, como comunidad, aquellas problemáticas que permanecen dormidas como simples rumores de pasillo y generar acciones para corregirlas, de tal forma de se cree la costumbre de alzar la voz frente a las desigualdades de Género”.

Comprometerse en comunidad

La experiencia confirma que, la sola responsabilidad institucional con el Género es insuficiente y se requiere un compromiso de la comunidad universitaria. “Queda cuestionarnos si los esfuerzos institucionales realizados por las autoridades universitarias en materias de Género, avaladas por las desigualdades históricas, tremendamente arraigadas en nuestra sociedad, han logrado permear a toda la comunidad universitaria. Para fomentar aquello, es clave contar con Unidades de Género reconocibles en cada espacio local, así como el apoyo de las autoridades locales, de manera que los esfuerzos realizados tengan frutos”, aseveró la Dra. Anilei Hoare.

La convocatoria a participar de un Diplomado en Género dirigida a todo el cuerpo académico, el Diplomado para gestión en Género orientado a profesionales que forman parte de las Unidades de Género, capacitaciones en materias de acoso sexual, manuales institucionales tendientes a disminuir las brechas entre hombres y mujeres en su carrera académica, entre otros promueven “la capacitación en Género, que es clave para que los y las docentes de la Universidad podamos incorporar a los procesos formativos de nuestros/as estudiantes el principio de igualdad de género y no discriminación, recientemente incorporado a nuestro modelo educativo. Estamos convocados/as a formarnos en ese sentido, para que entendamos la relevancia de avanzar en estas materias que afecta al 50% de la población”, dijo la Dra. Hoare.

Y, así como la Universidad de Chile adquiere este compromiso con el Género, recalcó Rocío Segura, “todos los integrantes de la comunidad debemos velar para que el tema se mantenga presente en cada espacio dentro de nuestra Facultad, porque de nada sirve la institucionalidad si no logramos implementarlo o esperamos que ‘alguien más lo haga por nosotros’. Debemos ser conscientes de la relevancia del tema en nuestra sociedad actual y comprender que nos afecta a todos y que debe ser corregido en este espacio, en el que pasamos gran parte de nuestro día a día”.

A juicio de Paulina Navarrete, “los principales desafíos son avanzar en una educación no sexista, la transformación de los currículos, la erradicación de la violencia de género en todas sus formas, la instalación de unidades locales de género que formen parte de la institucionalidad y seguir sensibilizando en género, para que así las Políticas y Reglamentos se interioricen en la comunidad universitaria. Sin duda, hemos dado pasos agigantados, pero aún falta mucho trabajo por hacer, es un proceso continuo y desafiante”.