Revista Nº12 "Arte en la Chile":

Rosa Medina: "La magia del arte ha hecho que me quede en la Facultad por más de 30 años"

Rosa Medina: "La magia del arte ha hecho que me quede en la Facultad"
"La magia del arte ha hecho que me quede en la Facultad por más de 30 años"
"La magia del arte ha hecho que me quede en la Facultad por más de 30 años"

Soy Rosa Medina, secretaria del Teatro Nacional Chileno (TNCH). Llevo 36 años trabajando en distintas oficinas de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile y la experiencia me ha encantado.

Entré apenas cumplí los 19 años de edad, después de salir de la Técnica 6, actual Liceo A 102. Comencé cumpliendo labores en el Departamento de Música y Sonología hasta principios del ’81. Después, cuando se achicó la universidad con la reforma, me quedé sin cargo, sin director, sin nada, y estuve como seis meses dando vueltas hasta que llegué a la Dirección de Extensión. Luego, me derivaron al Instituto Interamericano de Educación Musical que tenía convenio con la OEA y hacía perfeccionamiento a profesores de música de América Latina. Al tiempo pasé al vespertino del Departamento de Música y Sonología, y en diciembre de 1999 me trasladé al teatro, a la sala Antonio Varas.

Siento que cuando llegué era una ignorante total y aquí he aprendido mucho. Por ejemplo, he agudizado el oído, sobre todo en la época en que estuve con la profesora de educación de la voz. Ella hacía clases en su oficina y yo la escuchaba, entonces cuando los chiquillos salían me preguntaban ¿y… cómo estuve? y yo podía saber quién estaba cantando bien y quién no.

Sin duda, la experiencia ha sido hermosa porque, también, he conocido a los más grandes de la música, como Samuel Claro, Manuel Dannemann e Isis Muñoz, entre otros maestros.

Este es mi primer y único trabajo y lo he pasado muy bien, con sus momentos buenos y malos. Soy una enamorada de la Facultad, sobre todo de los conciertos y las obras de teatro que me hacen alucinar desde que entré.

Cuando llegué la secretaria jefa me decía: ‘tú que eres joven ándate de acá, porque si te quedas te enamorarás de la facultad’ ¡Y así fue! Yo creo que la magia del arte ha hecho que me quede por más de 30 años.