En un año que estará marcado por la Reforma a la Educación Superior y el debate sobre un nuevo proceso constituyente, nueve listas –una vinculada a la centro-derecha y las restantes a la izquierda–, están en plena carrera por conformar la federación de estudiantes más antigua del país a través de una elección con un sistema proporcional en que el candidato más votado de la lista que concentra la primera mayoría se convierte en presidente. Si la lista vencedora dobla a la siguiente, también obtiene una vicepresidencia. De no ser así, el vicepresidente es el candidato mejor posicionado de la segunda lista y los cargos restantes se deciden con una “cifra repartidora” que integra a los distintos sectores a la mesa.
A continuación las listas competidoras y algunas de sus ideas que se someterán al escrutinio de las urnas el próximo lunes 9 y martes 10 de noviembre en los diferentes campus y unidades de la U. de Chile.
Lista A: La Juventud y la FECH, juntos por la AC
José Tomás Leturia, estudiante de Derecho, encabeza el proyecto con el cual el Movimiento de Izquierda Revolucionario, MIR, vuelve a disputar la FECh. Con una crítica a las organizaciones que condujeron la Federación este último año, la lista apunta a “retomar la discusión de los problemas centrales de la educación en Chile, la democratización de la sociedad y el rol de la Federación en un país en donde la lucha por una educación gratuita, al servicio de sus trabajadores y sus pueblos, es un tarea imperante”.
Lista B: Vamos Construyendo
Por tercera vez compitiendo por la presidencia de la FECh –y tras dos años de participación en la mesa–, Vamos Construyendo, propuesta que lidera José Zapata, egresado de sociología, se define como una “alternativa revolucionaria en la Universidad de Chile”, cuyo objetivo es cambiar radicalmente “nuestra educación y nuestra sociedad, lo cual pasa por eliminar de raíz el mercado y por crear una vida digna y plena para todos”. Construir el camino hacia una nueva educación, que ofrezca condiciones dignas y justas para sus estudiantes, se levanta como un desafío central de la lista.
Lista C: Vencer, La Fech para las bases
Dauno Tótoro, estudiante de historia, conduce la propuesta impulsada por la Agrupación Combativa y Revolucionaria y la agrupación feminista Pan y Rosas Teresa Flores. Entre sus planteamientos se encuentran “la lucha contra el subcontrato, contra la precarización del SEMDA y una educación 100% financiada por el Estado a través de aportes fiscales directos”. La lista apuesta además por democratizar la Universidad de Chile por medio de claustros triestamentales resolutivos y exigiendo el voto universal en la elección de las autoridades.
Lista D: Atrévete! Centro Derecha Universitaria + Independientes
La única de las nueve listas competidoras vinculada a la centro derecha está encabezada por el estudiante de derecho, Marcos Vargas. Críticos a la mesa directiva actual, plantean la necesidad de una “FECh abierta, pluralista, comprometida con la dignidad de todos, con los valores de la libertad y la democracia”. El bloque tiene reparos al proceso de reforma de estatutos del Senado Universitario y respecto a la reforma educacional advierten que: “El movimiento social se ha estancado por culpa de las dirigencias de la Federación y por una desmovilización conducida activamente por ex dirigentes estudiantiles desde el Ministerio de Educación”.
Lista E: Creando. Organización para un nuevo Chile
Compuesta por militantes de Izquierda Autónoma, Frente de Estudiantes libertarios, Fuerza Colectiva, Convergencia de Izquierdas e independientes, la lista de continuidad a la actual mesa está liderada por el estudiante de sociología Vicente Valle. “Tras un año de movilizaciones nacionales y locales, aprendimos que nuestra lucha debe darse tanto contra las reformas del gobierno que sólo regulan el mercado en educación, como contra los efectos de la mercantilización de nuestras casas de estudio, sean de propiedad estatal o de propiedad privada”, plantean.
Lista F: Juventud en Lucha ¡Para Luchar y triunfar: A revolucionar la FECh!
Camila Ruz, estudiante de química, está al frente de esta propuesta conformada por la Izquierda Comunista e Independientes. “Luchamos por llevar al movimiento estudiantil nuevamente a las calles, con toda su fuerza; por ello somos críticos e independientes de los gobiernos de turno y de las rectorías que le hacen amén”, señalan. Educación gratuita universal y de libre acceso, democracia y unidad entre estudiantes y trabajadores, además de la incorporación de demandas por estudiantes del mundo LBGTI, mujeres y sectores oprimidos, son parte de sus propuestas.
Lista G: Avancemos, Decididas y decididos a vencer.
La reconstrucción de la educación pública está en el centro de los desafíos propuestos por la lista conformada por las Juventudes Comunistas, Izquierda Ciudadana e independientes, que conduce Javiera Reyes, estudiante de ingeniería comercial y ex vicepresidenta FECh. Plantean que el movimiento estudiantil debe ser la fuerza que “le pare la mano a los sectores que buscan frenar los cambios en educación, exigen transformaciones estructurales y recuperar la FECh “como un actor de peso en la sociedad y que esté más presente y cercana en los espacios locales”.
Lista H: Seamos más FECh
Representando a las Juventudes Socialistas, este bloque es liderado por el estudiante de medicina, Matías Libuy. “Nuestra apuesta es clara: una invitación a que los estudiantes nos reapropiemos de nuestra Federación, para que todos, con más fuerza y convicción, conquistemos una nueva educación, tanto a nivel nacional como en nuestra propia Universidad”. La reforma educacional y la reforma a los estatutos universitarios son dos de los desafíos que llaman a enfrentar como mesa directiva.
Lista I: Manos a la obra
Propuesta que reúne a independientes y a miembros de la Unión Nacional Estudiantil, la lista tiene como su opción preferente a Daniel Andrade, saliente presidente del centro de estudiantes de ingeniería. Se definen como “los estudiantes de las universidades populares, de las nivelaciones de estudios, del deporte, las ayudantías y medios de comunicación comunitarios”. Plantean hacer de la FECh “algo más agradable, familiar y acogedor para todos” y urgen por una federación que logre articular un nuevo movimiento universitario, incluyendo a los funcionarios y académicos que hagan frente a los procesos de reforma del país.