Encuentro se realizó en Casa Central

Destacados expertos internacionales resaltaron la importancia de educar el cerebro para la Ética y los DD.HH.

Expertos resaltan importancia de educar el cerebro para Ética y DD.HH.
El director de la Unidad de Neurobiología Aplicada (UNA, CEMIC-CONICET), Argentina, Sebastián Lipina
El director de la Unidad de Neurobiología Aplicada (UNA, CEMIC-CONICET), Argentina, Sebastián Lipina
El Rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, en la inauguración del seminario.
El Rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, en la inauguración del seminario.
La directora del Centro de Buen Trato de la U. Católica, la psicóloga Ana María Arón
La directora del Centro de Buen Trato de la U. Católica, la psicóloga Ana María Arón
Los invitados internacionales, Kathinka Evers (4ta de izq. a derecha) y el Dr. Jean-Pierre Changeux (5to) junto al equipo del seminario.
Los invitados internacionales, Kathinka Evers (4ta de izq. a derecha) y el Dr. Jean-Pierre Changeux (5to) junto al equipo del seminario.

La ética tiene su base en el cerebro humano y éste tiene una estructura y organización complejas, con múltiples niveles, en el que hay una relación constante entre sus numerosas redes y conexiones y el entorno cultural y social de los sujetos. En otras palabras, pese a su predisposición genética, el cerebro es constantemente modulado por la experiencia de vida y el medioambiente. De allí la importancia de influir en él para generar conductas éticas.

Esa fue una de las conclusiones del seminario internacional “Educación, sociedad y Derechos Humanos: el aporte de la neurociencia”, que se realizó entre los días 25 y 26 de enero en la Casa Central de la U. de Chile, organizado por el Centro de Investigación Avanzada en Educación y la Facultad de Medicina de la universidad.

“Tenemos una gran variabilidad genética y una variabilidad epigenética”, explicó el profesor Jean Pierre Changeux, neurocientífico del College de France, y uno de los oradores principales del seminario, quien recibió de parte del Rector Ennio Vivaldi la distinción Honoris Causa, en una solemne ceremonia realizada al inicio del seminario.

En su charla magistral, el neurocientífico indicó que tenemos una predisposición biológica para ponernos en el lugar del otro, pero que eso no es suficiente. Por tanto, recomendó que establezcamos reglas desde las etapas tempranas de vida, que influyan en el desarrollo del cerebro, sobre nuestra relación con los otros. “Para evitar la deshumanización…, quizás algún día podamos establecer una declaración de deberes humanos”, dijo el profesor, quien es co-director de la División de Ética y Sociedad del Human Brain Project, proyecto financiado por la Unión Europea.

En el mismo sentido, la filósofa sueca y también co-directora del mismo proyecto, Kathinka Evers dijo que como el cerebro es plástico y es moldeable por el entorno social y cultural, “podemos ser activos constructores de nuestro cerebro”, para tratar de influir “éticamente en él y ser más pacíficos, innovadores y tolerantes”.

Pobreza y neurociencia

En el encuentro también expuso el director de la Unidad de Neurobiología Aplicada (UNA, CEMIC-CONICET), Argentina, Sebastián Lipina. El experto mostró evidencia sobre cómo la pobreza influye en el desarrollo del cerebro, pero cómo esta relación no es directa, ni causal ni predeterminada, sino que ocurre a través de diversos mecanismos de mediación. Algunos de ellos son los recursos comunitarios, la estimulación cognitiva, el ambiente lingüístico, la educación materna y el estrés. La influencia de los mediadores varía según el contexto y los aspectos sociodemográficos. “Hay que cambiar los anteojos con que miramos la pobreza y el desarrollo del cerebro e investigar cuáles son los mediadores para cada comunidad e invertir en ellos”, explicó el académico e indicó, por ejemplo, que uno de los mitos son las llamadas ventanas de oportunidad. “Es importante invertir en los primeros años de vida, pero no es lo único y si nos olvidamos de los años siguientes, corremos el riesgo de perder todo lo invertido”, agregó.

El seminario también contó con las exposiciones de la sicóloga de la UC y directora del Centro de Buen Trato de ese plantel, Ana María Arón, quien expuso sobre las dinámicas del abuso; y del doctor Fernando Novoa, académico de la U. de Valparaíso y miembro del Departamento de Ética del Colegio Médico, quien planteó una mirada a la ética desde la medicina.

El encuentro fue inaugurado por la directora del CIAE, Alejandra Mizala, y el decano de Medicina, doctor Manuel Kukuljan; y por los subsecretarios de Educación Parvularia, Isabel Díaz; y de Salud Pública (s), Pedro Crocco.

En sus dos jornadas, asistieron más de doscientas personas, entre quienes se encontraban académicos, estudiantes universitarios y profesores de enseñanza básica y media.