“Destinado a la aplicación y experimentación de nuevas organizaciones, métodos y programas de enseñanza secundaria”, ese fue el fin que se le decretó al Liceo Experimental Manuel de Salas el día de su fundación, un 28 de marzo de 1932. Diez años después, el Liceo pasó a depender del Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile y a fines de esa misma década, sus instalaciones se trasladan a la calle Brown Norte 105, donde se ubica actualmente y donde este 23 de junio autoridades, académicos, estudiantes, funcionarios, apoderados y ex alumnos celebraron su octogésimo quinto aniversario.
Cada año en esta ceremonia el Liceo renueva su compromiso educativo con sus estudiantes y la comunidad en general. En esta ocasión, el encuentro contó con la presencia del director del Liceo Experimental Manuel de Salas, Federico Tapia; el jefe de gabinete de la Vicerrectoría de Asuntos Académicos (VAA) de la U. de Chile en representación de la Rectoría de la Casa de Estudios, Iván Silva; y el rector de la U. Metropolitana de Ciencias de la Educación, Jaime Espinosa Araya.
“Este liceo es una institución que está llamada a jugar un rol crucial en la formación integral de todas y todos sus estudiantes, pero además a hacer un importante esfuerzo para recuperar su lugar en la nueva y fortalecida educación pública chilena, como laboratorio pedagógico que aporta con la educación del país. Para alcanzar esta finalidad no sólo se requiere de compromiso y de esfuerzo de su comunidad educativa sino también de la U. de Chile con el Liceo. Seguiremos trabajando en conjunto para alcanzar las metas que nos hemos propuestos”, afirmó el director del establecimiento.
Por su parte, el Rector de la U. de Chile, Ennio Vivaldi, celebró los 85 años de historia del Liceo destacando su rol en la educación chilena: “Saludamos de todo corazón al Liceo Manuel de Salas, que representa una parte muy importante de nuestra Universidad, un lugar donde se buscan nuevas formas de entender la docencia, la convivencia, los procesos de aprendizajes, enseñanza e interacción. Claramente este vínculo entre nuestra Casa de Estudios y el Liceo da cuenta de la relevancia que tiene para la U. de Chile la articulación de toda la educación pública. Por lo mismo, creo que las instancias de la Universidad que están comprometidas con la educación deberían considerar al Liceo como un área de perfeccionamiento de los modelos educativos”.
El establecimiento, cuyo nombre honra al destacado pensador, político y humanista, Manuel Salas vio interrumpida su pertenencia a la Casa de Bello a raíz de la crisis institucional que vivió el país con el Golpe de Estado y la posterior dictadura militar. Producto de la reforma educacional de 1981 que desmembra a la U. de Chile, el Liceo Experimental Manuel de Salas es traspasado a la U. Metropolitana de Ciencias de la Educación, sucesora natural del antiguo Instituto Pedagógico. Y no es hasta el 2002 que el Congreso de la República reincorpora el Liceo a la U. de Chile, dependiendo desde entonces, específicamente, de la Vicerrectoría de Asuntos Académicos de nuestro plantel.
“No son tiempos fáciles para la educación en Chile, sobre todo para nuestra Universidad, hay reformas educacionales dando vueltas y lo que le pase a la U. de Chile, por supuesto que también afecta al Liceo Manuel de Salas, que es parte integral de nuestra Casa de Estudios. El rector Vivaldi ha encabezado una defensa de la educación pública y el Manuel de Salas, justamente, es una muestra de esa educación. Ese símbolo, esa unión entre estas dos instituciones grafican lo que es este aniversario para nosotros”, afirmó el jefe de gabinete de la Vicerrectoría de Asuntos Académicos, Iván Silva.
El acto contó con presentaciones artísticas, que incluyeron desde bailes contemporáneos hasta la interpretación de la Orquesta de Cuerdas del Liceo, a cargo de las y los estudiantes de sus distintos ciclos, desde transición menor hasta los cuartos años medios.