Incrementar el valor de tecnologías nacionales en el mercado, realizar colaboraciones que perfeccionen capacidades científicas y promover proyectos I+D asociados a la biotecnología, bioingeniería y medicina, son los objetivos del acuerdo de colaboración firmado entre la Universidad de Chile y el Centro de Excelencia en Medicina de Precisión de Pfizer Chile (CEMP), que se extenderá por tres años.
En la ceremonia, realizada el miércoles 26 de julio en la Facultad de Medicina, participó el Vicerrector de Investigación y Desarrollo (VID), Flavio Salazar; el Director Ejecutivo del CEMP de Pfizer Chile, Ricardo Ávila; y el Jefe de Investigación del CEMP de Pfizer Chile, Ricardo Armisén, quienes destacaron el compromiso de ambas instituciones por encontrar soluciones que mejoren la calidad de vida de la población.
Para el Vicerrector Salazar, “cuando hablamos de investigación que busca salir de los muros institucionales para impactar a la sociedad, es fundamental asociarse a organismos que funcionan en esta perspectiva, como se trata del área productiva. La empresa Pfizer es reconocida mundialmente por estudiar enfermedades y encontrar nuevas soluciones en medicina. Esta alianza es una oportunidad para que los investigadores concreten los sueños que se han planteado con sus proyectos e iniciativas. Además, ayuda a generar confianza respecto a la industria y que la Universidad vea el mercado como un potencial aliado para desarrollar capacidades futuras de mayor alcance”.
En cuanto a los ejes del acuerdo, la Casa de Bello desarrollará capacidades en investigación preclínica y fases clínicas tempranas sobre neurociencias; oncología, inmunología, fármacos antiinfectivos, y enfermedades cardiovasculares, endocrinas y metabólicas, entre otras. Por su parte, Pfizer capacitará al personal institucional sobre procedimientos y políticas que cumplan con el marco normativo aplicable. Asimismo, ambas partes evaluarán continuamente el avance de los proyectos, con el fin de analizar su viabilidad técnico-económica y así acceder a instalaciones con estándares internacionales, que permitan transferir tecnologías a la sociedad.
De acuerdo al Director Ejecutivo del CEMP, “la iniciativa responde a lo que ocurre en el mundo, pues la biomedicina no se puede desarrollar sin colaboración. Generar asociación entre el conocimiento académico y las capacidades del ámbito público y privado, permitirá fortalecer la investigación biotecnológica de frontera en el país. Esto es un primer paso para generar proyectos conjuntos, acciones y protocolos que permitan obtener suficientes recursos en el proceso de la transferencia de productos hacia la sociedad. Si no estamos impactando positivamente la vida de las personas, no estamos haciendo nada”.
En tanto, el Jefe de Investigación del CEMP, comentó que “actualmente, pacientes del Hospital Clínico de la U. de Chile participan en investigaciones clínicas para mejorar técnicas diagnósticas del cáncer del pulmón y detectar mejores tratamientos en aquellos que padecen cáncer renal. Además, la Facultad de Ingeniería ha desarrollado modelos predictivos para entender cómo las alteraciones genéticas son de utilidad en la medicina, específicamente en el tratamiento del carcinoma humano. Todo ello demuestra la importancia del conocimiento académico en diversas disciplinas, para construir herramientas que aportan con soluciones concretas a la salud de las personas”.
Investigación científica académica: una herramienta para la búsqueda de soluciones
Diagnóstico molecular, terapias celulares, dispositivos médicos, drogas y péptidos, son algunas de las áreas exploradas en los cuatro proyectos investigativos liderados por académicos de la Facultad de Medicina e Ingeniería, que cuentan con el apoyo financiero de Pfizer Chile para culminar con su etapa final y así transferirse como productos hacia el mercado.
La Académica del Departamento de Oncología Básico Clínica, Katherine Marcelaine, se encuentra trabajando en un proyecto para identificar mutaciones en tumores, específicamente en pacientes con cáncer, con el objetivo de encontrar un método de diagnóstico no intervencional y tener una mejor alternativa de tratamiento.
“A pesar de que los tumores tienen un mismo tipo histológico, no se componen de la misma forma ni reaccionan igual a las terapias. Debemos considerar que actualmente los tratamientos para el cáncer no son inocuos y con este estudio avanzaremos hacia terapias más personalizadas, dirigidas a las condiciones particulares de cada paciente e impactando positivamente su salud. Este convenio nos amplía las oportunidades investigativas, pues esta área requiere muchos recursos monetarios y de gestión logística, que no alcanzan a financiarse como proyecto Fondecyt. De esta manera, secuenciaremos tumores, plasma y obtendremos mayor información de los genes, implicando un beneficio académico que puede traducirse en más publicaciones y conocimiento científico”, señaló la Profesora Marcelaine.
En tanto, el Académico de la Facultad de Medicina y Subdirector del Instituto Milenio de Ciencia Biomédica (BNI), Claudio Hetz, desde hace dos años se encuentra desarrollando investigación para atacar el cáncer cerebral, a través de una red de colaboración con la comunidad europea. A partir de la postulación conjunta con Pfizer Chile de un proyecto Fondef, el equipo prueba drogas en modelos preclínicos con esta patología, para estudiar biomarcadores, diagnóstico temprano y analizar el funcionamiento de la terapia junto con sus efectos protectores, esperando pasar a pruebas clínicas.
El Profesor Hetz agregó que “este proyecto también se asocia con una empresa en EEUU, que desarrolló una droga que ataca la capacidad del tumor a resistir a la hipoxia y el estrés celular por microambiente tumoral. Es algo nuevo para nosotros, pues el laboratorio ha trabajado históricamente en enfermedades neurodegenerativas y la idea es aplicar el conocimiento al cáncer cerebral porque hay factores comunes. En Chile es imposible hacer ensayos clínicos o análisis con pacientes, porque es caro e implica una logística bastante compleja para lograrlo, entonces este trabajo colaborativo permitirá que el conocimiento científico pueda traducirse en productos concretos, que significarán un gran aporte para la medicina nacional e internacional”.
Asimismo, el Centro de Biotecnología y Bioingeniería (CeBiB) lidera una investigación sobre cáncer renal, donde participa el Profesor de la Facultad de Ingeniería, Álvaro Olivera, y el Director del Departamento de Oncología, Enrique Castellón.