Kemy Oyarzún, nueva presidenta de ACAUCH

"Los académicos producimos saber en relación a nuestra sociedad, y ese vínculo está muy debilitado"

Kemy Oyarzún, nueva presidenta de ACAUCH, llama a fortalecer el gremio
La académica de la Facultad de Filosofía y Humanidades resultó electa como nueva presidenta de ACAUCH luego de las elecciones gremiales del organismo, desarrolladas el 7, 8 y 9 de mayo.
La académica de la Facultad de Filosofía y Humanidades resultó electa como nueva presidenta de ACAUCH luego de las elecciones gremiales del organismo, desarrolladas el 7, 8 y 9 de mayo.

La promoción del mejoramiento económico de sus integrantes y de sus condiciones de vida y de trabajo, dar a conocer ante las autoridades sus criterios y resoluciones sobre temas como la carrera académica, la calificación académica, la capacitación, y la defensa del rol de los académicos al interior del plantel, son algunos de los objetivos que tiene la ACAUCH, organismo gremial que representa a este estamento.

Para llevarlas a cabo, la organización renueva cada dos años a su directiva, de manera de renovar sus liderazgos y adecuar sus esfuerzos al cambiante escenario universitario, resultando escogida este año la profesora Kemy Oyarzún, académica de la Facultad de Filosofía y Humanidades, y especialista en Literatura Latinoamérica Contemporánea, Estudios de Género, Poesía Chilena Contemporánea y Estudios Culturales.

Inyectarle nueva energía al organismo, en particular revitalizando los capítulos de la ACAUCH y buscando captar nuevos socios, junto con buscar mejorar las condiciones de trabajo y producción de conocimiento al interior de la Universidad de Chile, serán algunos de los lineamientos de esta nueva gestión, según explicó también la ex senadora universitaria.

¿Cuál cree que debe ser el rol de la ACAUCH en estos años?

Creo que las y los académicos debemos volver a pensarnos como un espacio colaborativo de trabajo. La academia es también un trabajo y la Asociación tiene en mente principalmente mejorar las condiciones de trabajo de los académicos.

Hay demasiado individualismo entre nosotros y eso no mejora nuestra calidad en el trabajo y la producción del saber.

En esa línea, ¿cómo cree que pueden revitalizar la Asociación?

Vamos a instalar espacios de encuentro y reflexión, seminarios y otras instancias para colocar sobre la mesa los 12 puntos que orientarán nuestro trabajo estos años, pero de manera que hagan eco en los académicos.

Creo que hay aquí aspectos de la vida cotidiana de nuestra labor que necesitan urgente atención, y eso no es un asunto que viene desde arriba de la ACAUCH, sino que tiene que venir de los capítulos. La capacidad de escucha y participación colaborativa es lo que está ausente de nuestro quehacer cotidiano y aspiramos a cambiarlo.

¿Qué iniciativa concreta tienen pensada para iniciar este camino?

Queremos convertir a la ACAUCH, que está en Vicuña Mackenna junto al CEAC, en un lugar de encuentro: ciclo de conciertos, cine, convertirlo en un espacio abierto a las y los académicos que promueva ese encuentro.

Los académicos producimos saber y lo hacemos en relación a nuestro país, nuestra sociedad y ese vínculo está muy debilitado y queremos recuperarlo. Pero ese esfuerzo no solo se hará desde las ACAUCH Central sino que también y preferentemente desde los capítulos, para por ejemplo repensarnos desde los campus. Hay que ir fortaleciendo nuestra participación y capacidad de escucha para convertirnos en actores y actoras del saber universitario con sentido país.

¿Cuáles serán sus prioridades?

Tenemos un dodecálogo que resume nuestras principales propuestas bajo el lema "Reconstruyamos la ACAUCH", y entre sus principales ideas está avanzar hacia mayor equidad e integración de las unidades académicas en la Universidad. Hay una falta de aprecio entre las distintas áreas del saber que se expresa fundamentalmente en el presupuesto.

Junto con esto creemos que debe haber un trabajo colaborativo entre pares en los procesos de calificación académica, a lo que se debe sumar el superar la desventaja histórica de las mujeres en el ingreso y ascenso en la carrera académica, abarcando docencia e investigación.

También queremos terminar con la precarización de los docentes e investigadores postdoctorales que se encuentran a honorarios postulando que ingresen a la carrera académica, y acelerar de forma urgente el traspaso a planta de todos los académicos titulares y asociados sin que eso requiera nuevos concursos, entre otras propuestas.

¿Cree que es necesario hacer algún énfasis especial en los académicos jóvenes? 

Creo que no se puede tener académicos y académicas enseñando como profesores taxi por toda la ciudad. Necesitamos, para poder producir con calidad y con sentido de país, que las y los académicos jóvenes tengan acceso a por ejemplo un año sabático para investigar y escribir ya que se nos exige publicaciones pero no hay tiempo ni capacidad para hacerlo, acceso a carrera académica regular con planta, que terminemos con los honorarios y con la parcelación de nuestras actividades.

La academia requiere de la integración de nuestras tres misiones universitarias, que son indispensables para articular una producción de conocimiento con servicio de país, y en ese sentido creo que la carrera académica está muy debilitada para las y los jóvenes. Debemos luchar para que no continúe, porque va en desmedro del sentido de vocación estratégica de país y también de la calidad de vida de los jóvenes, que no se pueden integrar a la Universidad.