La Plataforma Cultural, espacio de innovación, creación y resguardo patrimonial de la Universidad de Chile, junto al Museo de Arte Popular Americano Tomás Lago (MAPA), también de la Casa de Bello, recibieron este miércoles una colección de artesanías que buscan el Reconocimiento de Excelencia para Artesanías de América del Sur, otorgado por el World Crafts Council (WCC) y UNESCO en el marco del el Mercado de Industrias Culturales del Sur (MICSUR).
Las obras seleccionadas por los países participantes de MICSUR -Brasil, Bolivia, Chile, Ecuador, Uruguay, Perú y Paraguay- llegarán a este espacio ubicado en el Campus Juan Gómez Millas, donde serán cuidadosamente resguardadas hasta el jueves, momento en que los jurados Romain Juilha y Edric Ong las revisarán para tomar su decisión, la que será dada a conocer este viernes 19 de abril.
El Reconocimiento de Excelencia para Artesanías de América del Sur es organizado por el World Crafts Council y, al igual que en oportunidades anteriores para el Cono Sur y la Región Andina, esta convocatoria -la primera desde 2018 debido a la pandemia de COVID- se realiza en continuidad con el anterior programa de UNESCO denominado “Sello” y -posteriormente- “Reconocimiento de Excelencia”. Su objetivo es estimular a artesanos y artesanas a crear productos de calidad mediante el uso de destrezas, diseño y temas tradicionales de modo innovador, a fin de asegurar la continuidad y sostenibilidad de la diversidad de técnicas y tradiciones culturales.
La directora de la Plataforma Cultural de la U. de Chile y presidenta de WCC, Bárbara Talia Velasco, explica que, junto con el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, “nos pusimos de acuerdo para poder hacerlo (ser anfitriones del Reconocimiento de Excelencia, que no se realizaba de 2018) y así también mostrar el rol que tiene la propia Universidad de Chile en todo este círculo virtuoso que es reconocer, resguardar y poner en valor la artesanía chilena a nivel latinoamericano”.
“Hacerlo aquí (en Plataforma Cultural) nos vuelve a posicionar como un espacio abierto a la comunidad, que dialoga, que ofrece un discurso con respecto al arte popular y a la artesanía, que permite abrir las fronteras sobre lo que es el valor del arte popular, dignificarlo y ponerlo en una esfera mucho más importante dentro del mundo de la cultura”, asegura Bárbara Talia Velasco.
Por su parte, la coordinadora del Área de Artesanía del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Mercedes Montalva, añade que “es sumamente relevante para nosotros como Chile haber podido levantar este Reconocimiento nuevamente. Fueron casi cuatro años que no se entregó, y Chile ha tenido un trabajo sistemático en reconocer piezas año a año y esas piezas iban a esta etapa internacional que no se estaba dando. Entonces es muy relevante que la colaboración entre países latinoamericanos haya permitido volverlo a levantar, que las personas hayan escuchado nuestro llamado y hayan venido a Chile para poder mostrar la diversidad de sus artesanías, pero también para poder mantener esta herramienta de colaboración en la disciplina de artesanía”.
La artesanía como testimonio de historia y protectora de los saberes ancestrales
Las autoridades encargadas de las artesanías de cada país participante -salvo Ecuador, que arribó la noche del miércoles- llegaron hasta el MAPA en la Plataforma Cultural con las piezas seleccionadas de cada país, entregándolas al equipo profesional de resguardo y conservación del Museo para que ellos las pongan a disposición del jurado que el viernes dará a conocer a los ganadores.
La presidenta del Instituto Paraguayo de Artesanía, Andrea Vásquez, cree que “este tipo de plataformas ayuda a que las diferentes comunidades dimensionen el valor real que tiene la labor que ellos están haciendo dentro de las comunidades, sobre todo para poder lograr que ellos mismos anhelen y busquen nuevos espacios de exposición y de comercialización, y para que diferentes instituciones, gubernamentales y no gubernamentales, vayan entendiendo el potencial que tienen estas técnicas ancestrales que se vienen desarrollando dentro de las comunidades para que podamos lograr la excelencia y la calidad en las piezas, y que los artesanos se sientan no solamente autores, sino que también verdaderos custodios del patrimonio cultural inmaterial de sus comunidades. Ellos son los protectores de los saberes de nuestras tierras y eso se puede visibilizar en estas piezas”.
Jocelyn Laurel, de la Dirección General de Artesanía del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo de Perú, destacó la hermandad que se ve en iniciativas como esta, así como el valor de poder “intercambiar experiencias tanto Chile como nosotros, que hemos tenido tanto éxitos como fracasos en las diferentes implementaciones de políticas y normas. Entonces siempre nos va ayudar a seguir mejorando”.
María Elsa Rodríguez, coordinadora de Artesanías de Paraíba, Brasil, asegura que “todo es un desafío, justamente unir la conservación y preservación de los oficios tradicionales y la modernidad de la innovación tecnológica, esto con mucho apoyo de nuestro gobierno federal y de una política pública efectiva para que los artesanos mejoren su calidad de vida a través, justamente, de la comercialización de sus productos, con capacitación y también en sus procesos productivos”.
El artesano en cerámica y representante de la Red OEPAIC, Rodolfo Lifonso, miembro de la Unión de Ceramistas Quechuas y Aymara de Bolivia, destaca la presencia de su país en esta actividad, asegurando que “es bueno lo que están organizando, estoy feliz de estar en este evento”; mientras que Mauro Escudero Lacroix, director del Área de Desarrollo Artesanal de Uruguay, añade que “estos son eventos a los que hay que ir. Es fundamental que todos los países estemos aquí reunidos en un espacio espectacular y creo que esto tiene que seguir avanzando”.
Junto con la delegación de cada país, también estuvieron presentes en la cita el vicepresidente de WCC, el uruguayo Alberto de Betolaza, y la directora de Artesanía UC, Elena Alfaro.
Conservación y difusión de las piezas de Chile y Sudamérica
Desde el año 2014, el Museo de Arte Popular Americano Tomás Lago (MAPA) de la Universidad de Chile es el encargado de las acciones de conservación, difusión y circulación de piezas ganadoras del Sello de Excelencia Chile, convenio establecido junto al Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Constanza Urrutia Beckmann, directora del Museo de Arte Popular Americano Tomás Lago y académica de la Universidad de Chile, destaca la importancia del trabajo de resguardo y protección de este tipo de piezas, “que hablan de una identidad nacional”. Enfatiza, en esta línea, que “la condición de las artes populares y de la artesanía, en este caso, es que cumplen no solamente con un oficio que muchas veces es impecable, con técnicas que son representativas de localidades y materialidades, sino que hablan de una identidad nacional, de una identidad que es local”.
“Enfrentamos el resguardo de las piezas con todo el cuidado y normativas y protocolos que tiene el Museo para ello. El área de restauración y conservación son quienes reciben las piezas, son quienes hacen los embalajes preventivos para que las piezas puedan vivir en los depósitos y son los que cautelan cuando las piezas migran hacia alguna exhibición. Acá se hacen las restauraciones, en caso que se requieran, se hacen los registros y también se toman todas las medidas de cuidado del espacio, como humedificación, el clima que tienen que tener para que esas piezas puedan vivir 100, 200 o 300 años más”, explica Constanza Urrutia.
El equipo de MAPA se hizo cargo de las piezas provenientes de los países sudamericanos participantes (las chilenas ya son parte de su colección). Las artesanías ganadoras del Reconocimiento de Excelencia serán exhibidas este viernes 19 y sábado 20 de abril en la sala MAPA del GAM.