Hernán Ramírez Necochea revive en presentación de "Obras Escogidas"

Hernán Ramírez Necochea revive en presentación de "Obras Escogidas"
En la ceremonia, el hijo del destacado académico, Álvaro Ramírez, expresó su gran agradecimiento a quienes hicieron posible la reedición de los escritos de su fallecido padre.
En la ceremonia, el hijo del destacado académico, Álvaro Ramírez, expresó su gran agradecimiento a quienes hicieron posible la reedición de los escritos de su fallecido padre.
Ramírez Necochea exploró archivos ingleses, norteamericanos y franceses para demostrar que las presiones y los intereses del imperialismo inglés habían incidido en las políticas internas del país.
Ramírez Necochea exploró archivos ingleses, norteamericanos y franceses para demostrar que las presiones y los intereses del imperialismo inglés habían incidido en las políticas internas del país.
En la ceremonia se recordó la pasión de Ramírez Necochea por la labor docente en liceos de enseñanza media y para obreros cesantes o sin su educación completa.
En la ceremonia se recordó la pasión de Ramírez Necochea por la labor docente en liceos de enseñanza media y para obreros cesantes o sin su educación completa.

Destacado académico, hombre justo y transparente, militante comunista, maestro de generaciones, excelso investigador. Estos son algunos de los calificativos con los que describen quienes lo conocieron al Prof. Hernán Ramírez Necochea -quien fuera Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades-, considerado un impulsor de los estudios de historia social en Chile.

En ese contexto, gracias al apoyo del Consejo del Libro y a través de LOM Ediciones, se presentó al público la reedición de dos volúmenes pertenecientes a su obra historiadora, denominados Obras Escogidas.

Éstas surgieron de un exhaustivo trabajo de selección que trató de localizar aquellos escritos más significativos, que mejor reflejen su pensamiento y contribución, además de aquellos que hayan tenido un mayor impacto en el debate y conocimiento histórico del país.

Obras Escogidas en su volúmen número uno incluye: "Balmaceda y la contrarevolución de 1891" y "Antecedentes de la Historia del Movimiento Obrero en Chile". En el dos figuran: "Antecedentes económicos de la Independencia", "Origen y formación del Partido Comunista" y "Las Fuerzas Armadas y la Política en Chile".

La presentación de estos ejemplares contó con la presencia del Vicerrector de Extensión de nuestra Casa de Estudios, Francisco Brugnoli; el Vicedecano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Bernardo Subercaseaux; la Directora de Bienestar Estudiantil e historiadora María Eugenia Horvitz; el historiador Julio Pinto; la familia de Ramírez Necochea, y los representantes de LOM Ediciones.

En la ceremonia, Álvaro Ramírez, hijo del destacado académico, expresó su enorme agradecimiento a quienes hicieron posible la reedición de los escritos de su fallecido padre. Además, destacó a la Universidad de Chile como la institución que formó y ofreció a su progenitor la posibilidad de desarrollarse profesionalmente.

Concluyó diciendo que la alta concurrencia a la presentación de los libros da cuenta de que el legado humano e intelectual que dejó su padre "sigue todavía vivo".

Maestro indiscutido de generaciones

Ramírez Necochea en su historia se acercó a nuevos mundos sociales, fue la voz de aquellos que históricamente no la tenían, describió los hechos, las fechas y los personajes de un mundo hasta ese entonces anónimo y paralelo al de las élites.

Militante comunista desde su juventud, fue ayudante del profesor y Rector de la Universidad de Chile Juan Gómez Millas; fue profesor titular de la Universidad en la cátedra de Historia Económica y Social, y llegó a ser Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, en ese entonces Facultad de Filosofía y Educación. 

Otro de los objetivos que lo apasionó fue la labor docente en liceos de enseñanza media, y también con obreros cesantes o sin su educación completa. Su labor sindicalista lo llevó a ser dirigente de la Sociedad Nacional de Profesores, entre otros cargos que se paralizaron con el exilio político tras el golpe militar de 1973.

El Vicedecano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Fernando Subercaseaux, lo describió como un gran académico y caballero. Recalcó que su obra y ejemplo fueron de gran importancia para los duros años que viviera la Universidad durante el régimen militar, puesto que la expropiación del Pedagógico robó en cierta medida el espíritu del profesor Ramírez.

"El edificio en que hoy estamos era la biblioteca de la antigua Facultad de Educación y de Filosofía, que era excelente como biblioteca, pero que no es adecuada como infraestructura de una facultad. Pero ahí estamos", afirmó.

Pese a ello,agregó, "hoy contamos con el proyecto Juan Gómez Millas y esperamos que se materialice". Además, expresó su deseo de que la actual y nueva biblioteca Facultad de Filosofía lleve el nombre del profesor Ramírez, porque fue él quién gestionó e hizo posible su creación.

La historiadora María Eugenia Horvitz, quien lo recordara en la ceremonia como un maestro indiscutido de generaciones, destacó de Ramírez Necochea la determinación de ampliarse a nuevas temáticas y poner a disposición de los historiadores nuevos archivos, pero por sobre todo valoró su misión como formador de generaciones de investigadores y profesores de Educación Básica y Media, además de destacar su participación en la transformación y administración de nuestra Universidad.

"En la modestia que lo caracterizó sólo habría esperado que a través del recuerdo se volviera a mirar a la sociedad chilena desde la perspectiva de la ética y la solidaridad, reconocer las diversidades, los conflictos de clases, los poderes ocultos y palpables, los silencios culpables y las razones de Estado", expresó. Agregó que "esto explica quizás el silenciamiento de sus aportes. Él nunca consideró que en la ciencia histórica hubiera una sola verdad. Ha sido el historiador que con más ahínco discutió las bases fundacionales de la nación y el Estado. Estableció interrogantes donde otros veían verdades inamovibles".

Su primera investigación, que fue su tesis, fue la guerra civil de 1891, donde discrepó de las históricas causas que supuestamente la habían provocado. Ramírez Necochea exploró archivos ingleses, norteamericanos y franceses para demostrar que las presiones y los intereses del imperialismo inglés habrían incidido en las políticas internas del país, co-ayudando a hacer colapsar el proyecto de desarrollo capitalista promovido por el Presidente Balmaceda.

Un nuevo enfoque

El historiador Julio Pinto relató en el encuentro que, hasta mediados del siglo XX, en la mayor parte de los libros de Historia de Chile no existían ni los trabajadores ni los pobres. Los intereses económicos no tenían ninguna incidencia en el desenvolvimiento de los procesos históricos.

"La Historia de nuestro país era la de grandes personajes, de próceres, estadistas o militares, que casi individualmente la habían forjado, y cuando mucho era la historia de las élites, que por su sola presencia estaban destinadas a dirigir", explicó.

En este sentido, Pinto reconoció a Ramírez ser uno de los primeros que, desde la disciplina de la historia, empleó el materialismo histórico, el marxismo, como una herramienta no sólo de estudio sino también de comprensión y transformación de la realidad. En síntesis, Ramírez Necochea habría aportado con nuevos enfoques y personajes como actores relevantes en la dinámica de los procesos históricos. 

Para finalizar, el Vicerrector de Extensión de la Universidad, Francisco Brugnoli, habló de la deuda histórica que el país mantiene con nuestra Casa de Estudios.

Relató cómo más del 70% de los profesores de su unidad académica, la Facultad de Artes de aquel entonces, fueron exonerados tras el golpe militar.

Añadió que el objetivo de la dictadura era la de un cambio generacional, "un corte cultural para el país, y en ese sentido la Universidad de Chile debía ser desmantelada naturalmente, desprovista de su presencia nacional y de su presupuesto, que pasó a integrar el de las Fuerzas Armadas", acotó.

Sin embargo, continuó, "nuestra Universidad tuvo la capacidad de resistir y de sobrevivir con muchas dificultades para instalarse nuevamente en la situación histórica del país. Somos una universidad nacional, más allá de que si estamos presentes a lo largo del país. Los intereses del país y la nación son nuestra vocación" dijo.