Katherine Maher, directora ejecutiva de Wikimedia

"La tecnología es una herramienta que nos permite reunirnos incluso cuando no podemos hacerlo físicamente"

ICEI albergó encuentro con Wikimedia

"Si piensan que plataformas como Wikipedia no tienen un rol en la defensa de los DD.HH. probablemente es porque nunca han sufrido una crisis donde estos derechos se vean afectados, porque en esas circunstancias la importancia de la información libre se hace evidente". Con estas palabras Katherine Maher, directora ejecutiva de Fundación Wikimedia, enfatizó en la importancia de poder acceder a información de calidad, veraz y confiable en contextos de crisis sociales y políticas; declaraciones que entregó como parte de la mesa de conversación "Derechos Humanos en contextos de crisis: el rol de los medios y plataformas digitales" en el Instituto de la Comunicación e Imagen (ICEI) de la U. de Chile.

En la instancia, la experta destacó que si bien una enciclopedia como Wikipedia podía verse a primera vista como algo neutral o inofensivo y que simplemente agrupa conocimiento, al profundizar en preguntas sobre temas como el acceso libre a la información se logra valorar la importancia de un espacio enciclopédico vivo y dinámico.

"Como Fundación hemos asumido nuestro rol de defender la libertad de expresión, de la privacidad, de información y reunión, a través de diferentes formas y contextos. Ante el bloqueo a Wikipedia en Turquía hemos acudido a la justicia para desafiar esta medida por inconstitucional; también en Estados Unidos contra la Agencia de Seguridad Nacional basados en que la vigilancia de la lectura de Wikipedia afecta los derechos a la privacidad y a aprender", aseguró Maher.

Consultada respecto a los desafíos planteados a la democracia por la difusión de fake news en redes sociales y medios de comunicación, la directora ejecutiva explicó que desde el nacimiento de Wikipedia hace 19 años, uno de sus desafíos ha estado en diferenciar entre información de alta y baja calidad, por lo que estaban preparados cuando las fake news se transformaron en un fenómeno masivo. "En nuestra comunidad editora, conformada por alrededor de 250 mil voluntarios de diferentes lenguas, teníamos políticas preparadas al respecto, había definiciones sobre qué es una fuente confiable, cómo se identifican de acuerdo al contenido, la transparencia para revisar las fuentes es también importante", remarcó.

En la charla, co-organizada por Fundación Wikimedia capítulo Chile y el Núcleo "Inteligencia Artificial, Sociedad, Información y Comunicación" (AI-SIC) del ICEI, contó además con la participación de la directora del periódico digital El Desconcierto, Francisca Quiroga; con la periodista y académica, Javiera Olivares, representando al Programa de Libertad de Expresión del ICEI; y representantes de los proyectos Archivo Memoria Audiovisual (A.M.A.) y Prensa OPAL.

Respecto al rol de medios digitales, Quiroga destacó que desde el 18 de octubre la lectoría de El Desconcierto aumentó de dos millones a casi cinco millones, con especial énfasis en jóvenes y adultos mayores, y que ante el contexto decidieron asumir como objetivo "ser un medio que haga una fiscalización sobre el tema constituyente, visibilizar el debate, la crítica al modelo extractivista, la discusión sobre el feminismo es fundamental, y esto se traduce en entrevistas, reportajes de calidad, pero a partir de una serie de principios que, combinados con un periodismo de calidad, permite que la comunidad se sienta identificada, y también abrir espacio para el debate y el desacuerdo".

Por su parte Javiera Olivares, enfatizó en que los medios de comunicación tradicionales del país "han ido acumulando una forma de encarar situaciones de crisis social que evidencian una resistencia a lo que ocurre ya sea tergiversando posiciones, estigmatizando, criminalizando, o invisibilizando posiciones críticas".

En contraste, la académica valoró la necesidad de preguntarse sobre las garantías del derecho a acceder a una información veraz, plural, diversa "en el marco de la existencia de tecnología que permite tener herramientas distintas, proyectos que aprovechan la geolocalización para contrastar información plasmada en videos en redes sociales, o el papel de los cientos de voluntarios en plataformas como Wikipedia" u otras que funcionan bajo similares lógicas.