Circular a la comunidad universitaria

Rectoría entrega nuevas recomendaciones para trabajo remoto

Rectoría entrega nuevas recomendaciones para trabajo remoto
Desde el 18 de marzo la U. de Chile Universidad de Chile se encuentra desempeñando la mayoría de sus labores bajo la modalidad de trabajo remoto, como forma de resguardar la seguridad de su comunidad.
Desde el 18 de marzo la U. de Chile Universidad de Chile se encuentra desempeñando la mayoría de sus labores bajo la modalidad de trabajo remoto, como forma de resguardar la seguridad de su comunidad.
El documento emanado por el Rector Vivaldi insta a las jefaturas a asumir un rol activo en el cuidado de sus equipos y otorgar flexibilidad horaria durante este período.
El documento emanado por el Rector Vivaldi insta a las jefaturas a asumir un rol activo en el cuidado de sus equipos y otorgar flexibilidad horaria durante este período.
La circular requiere a cada jefatura reformular el plan de trabajo atendiendo al cumplimiento de metas y objetivos, a través de la fijación de prioridades claras.
La circular requiere a cada jefatura reformular el plan de trabajo atendiendo al cumplimiento de metas y objetivos, a través de la fijación de prioridades claras.

La rápida propagación del Sars-Cov2 en nuestro país empujó a modificar las rutinas de miles de personas, obligando también a instituciones públicas y privadas a adaptar sus labores a un formato de teletrabajo, ante las restricciones de movilidad y protección sanitaria. Es en este escenario que la Universidad de Chile se encuentra desempeñando la mayoría de sus labores bajo la modalidad de trabajo remoto; medida responde al interés de la Casa de Bello de resguardar la seguridad de todos sus colaboradores y familias. 

Especialistas han identificado diversos impactos del trabajo remoto prolongado en las personas, razón por la cual Rectoría ha emitido este jueves 11 de junio la Circular 26, con indicaciones para gestionar de mejor manera el cumplimiento de las actividades, compatibilizando la modalidad remota con la vida familiar.

Entre las disposiciones se insta a las jefaturas a asumir un rol activo en el cuidado de sus equipos; considerando el cumplimiento de las normas laborales en conciliación con las características excepcionales de esta modalidad de trabajo.  En este sentido, promueve otorgar flexibilidad horaria para el desarrollo de la jornada de trabajo, así como el debido resguardo del horario de colación; teniendo presente los diversos roles que asume el personal, que compatibilizan el cumplimiento de sus labores con el cuidado y alimentación de niñas, niños y adultos mayores, tareas escolares, limpieza y abastecimiento del hogar, entre otras.

Además, considerando que más del 50 por ciento del personal académico y de colaboración son mujeres, cada jefatura debe tener presente no generar sesgos ni discriminaciones de género, al interior de los equipos ni de manera individual, propiciando la distribución de cargas de trabajo de manera equitativa entre todos sus colaboradores.

De la mano con lo anterior, el documento incluye la promoción de pausas durante la jornada laboral, para que cada persona pueda contar con los debidos descansos y permita la realización de ejercicios ergonómicos al menos dos veces al día.

Planificación de la jornada

Otro de los aspectos incluidos en la Circular es la coordinación en las diferentes áreas y la organización del trabajo remoto. Para ello requiere a cada jefatura reformular el plan de trabajo atendiendo al cumplimiento de metas y objetivos, a través de la fijación de prioridades claras, que deben ser comunicadas de manera explícita y oportuna a cada uno de los miembros de sus equipos. A su vez, deberá evaluar las cargas de trabajo, priorizando aquellas tareas esenciales, considerando que el actual contexto no necesariamente permitirá la misma productividad que un escenario de trabajo presencial.

En esta misma línea, las comunicaciones de índole laboral deben ser realizadas dentro de la jornada laboral, salvo en casos de extrema necesidad o urgencia, utilizando preferentemente medios institucionales.

Adicionalmente, cada jefatura debe velar por una comunicación genuina y fluida entre sus colaboradores, definiendo con anticipación un horario de reuniones de equipo y procurando mantenerlo a lo largo de las semanas. También se recomienda mantener conversaciones individuales periódicas, para facilitar el apoyo y retroalimentación a cada persona.

De igual manera, las y los funcionarios académicos y administrativos deben tener las facilidades horarias para asistir, dentro de la jornada laboral, a las diferentes actividades de capacitación online que han sido definidas como parte del Programa de Capacitación año 2020 de la Universidad de Chile.

El documento también hace referencia a los deberes de académicos y personal de colaboración, vigentes tanto en escenario de trabajo presencial y remoto. Entre ellas destacan el desempeño de las funciones del cargo en forma regular y continua, orientados al cumplimiento de los objetivos de la Universidad; cumplir con las instrucciones de sus jefaturas y con su jornada de trabajo, en el marco de la flexibilidad dispuesta ante el actual escenario; observar estrictamente el principio de probidad administrativa y guardar secreto de aquellos asuntos de carácter reservado, en virtud de la ley o que por su naturaleza o reglamento así lo requieran; además de cumplir con las demás obligaciones funcionarias que prescribe la ley.