Bienestar y calidad de vida

Subdirección de Relaciones Humanas ejecuta un nutrido programa de salud mental para académicos y funcionarios

Subdirección de RRHH ejecuta nutrido programa de salud mental
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La Subdirección de RRHH lleva adelante plan de acción para generar mecanismos de protección a través de herramientas preventivas
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La Subdirección de Relaciones Humanas de la Dirección Económica y de Gestión Institucional (DEGI), a través de un trabajo realizado durante el 2020 con las unidades de Bienestar y Desarrollo Organizacional, evidenció que realidades como las cuarentenas han alterado las formas habituales de convivir y es comprensible que, ante situaciones de incertidumbre, aparezca el temor y la ansiedad en los trabajadores y su grupo familiar, lo que puede afectar el bienestar de las personas y, por ende, la salud mental.

“Desde marzo del 2020 hemos trabajado en un programa de bienestar y calidad de vida que inició con conversatorios en la facultad, los cuales, si bien se enfocaron en lo laboral,  tomaban en cuenta factores intrínsecos relacionados a la familia, al entorno de trabajo y otras áreas extralaborales que forman parte de la cotidianeidad de las personas en sus hogares”, relata Ximena Mena, subdirectora de Relaciones Humanas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile

“A raíz de los conversatorios y las encuestas que estamos aplicando constantemente, logramos recoger información de acuerdo con la percepción que tienen los funcionarios y en qué les gustaría capacitarse para extender y adecuar las capacitaciones y los programas a las necesidades que tienen. Con eso, damos continuidad y nos vamos adaptando”, comenta Lorena Del Río, analista de desarrollo organizacional de la subdirección.

En este sentido, la subdirectora de Relaciones Humanas encomendó al equipo de trabajo gestionar un plan de acción que apunte a generar mecanismos de protección a través de herramientas preventivas. Paula Jara, jefa de bienestar de la subdirección, explica que “tras la experiencia que tuvimos el año pasado, durante el cual realizamos conversatorios, levantamos algunos indicadores que nos permitieron crear un programa enfocado en la prevención de los factores respecto de la salud mental de los funcionarios”.

Desarrollo integral en el trabajo

El programa de Bienestar y Calidad de Vida fue diseñado para abordar temáticas en el ámbito de la salud emocional, laboral y física. Este busca propiciar el desarrollo integral de los funcionarios y académicos para apoyarlos en su vida laboral, a través intervenciones por medios de cursos o capacitaciones. Es decir, son actividades extraprogramáticas, que se realizan todos los lunes, miércoles y viernes, a contar de las 18:00 horas. Algunas de ellas son: Yoga, Zumba, talleres de Repostería y Mindfulness.

Dicho programa cuenta y convoca mensualmente a cerca de 140 participantes, entre funcionarios y académicos, de los cuales el 40% pertenece a este último grupo. “Comenzamos en agosto del año y, a raíz de toda la experiencia, hemos logrado aumentar el número de participantes, especialmente de académicos. La idea es seguir proyectando el autocuidado mientras estemos trabajando en la virtualidad”, señala Elena Escudero, coordinadora de capacitación de la subdirección.

En el marco de esta iniciativa, están realizando la Encuesta de Salud Emocional. ¿Cómo se ha vivido la pandemia COVID- 19? para funcionarios y académicos, con el fin conocer las emociones y opiniones del personal de colaboración, respecto de las condiciones laborales por trabajo remoto y corresponsabilidad en la conciliación trabajo y familia.

Además del Programa Bienestar y Calidad de vida, la Subdirección de Relaciones Humanas ha realizado, con el mismo propósito, las siguientes actividades en este periodo: Programa de becas ESUCOMEX con financiamiento SENCE, de Liderazgo para jefaturas mandos medios, Cursos de Inglés (TACENGLISH), Herramientas tecnológicas, Programa para secretarias y Asistentes Administrativos, Programa Senior, Capacitación en salud emocional

A través de estas acciones pensadas y desarrolladas para la comunidad, se busca generar condiciones que permitan gestionar herramientas preventivas en la salud emocional, física y laboral de los colaboradores. “Cuando nos reincorporamos al trabajo presencial, la idea es seguir trabajando en la línea de calidad de vida, queremos seguir manteniendo las actividades. No sabemos qué va a pasar cuando volvamos a la nueva realidad, pero pensamos continuar”, asegura la jefa de bienestar de la subdirección.