Día de acción por el aborto

Sin prejuicios: La necesidad de abordar la interrupción voluntaria del embarazo desde la salud pública

La necesidad de abordar el aborto desde la salud pública
Según el Fondo de poblaciones de las Naciones Unidas, un 8 por ciento de las muertes maternas se deben a abortos practicados en condiciones riesgosas.
Según el Fondo de poblaciones de las Naciones Unidas, un 8 por ciento de las muertes maternas se deben a abortos practicados en condiciones riesgosas.
"Las mujeres han utilizado esto (el aborto) desde hace milenios. La pregunta es si se puede hacer con seguridad o no y para esto necesitamos que sea legal y gratuito", señaló la Dra. Soledad Barría.
"Las mujeres han utilizado esto (el aborto) desde hace milenios. La pregunta es si se puede hacer con seguridad o no y para esto necesitamos que sea legal y gratuito", señaló la Dra. Soledad Barría.
"Debemos tener aborto legal, seguro y gratuito, reconociendo las legítimas razones de las mujeres y estableciendo plazos razonables", afirma la Dra. Pamela Eguiguren.
"Debemos tener aborto legal, seguro y gratuito, reconociendo las legítimas razones de las mujeres y estableciendo plazos razonables", afirma la Dra. Pamela Eguiguren.

A comienzos de la década de los 90’, en el quinto encuentro feminista latinoamericano, se decidió declarar el 28 de septiembre como el “Día por el derecho al aborto de las mujeres en Latinoamérica”. Posteriormente, esta fecha fue denominada “Día de acción por un aborto legal y seguro” y asumió un carácter global, dado que se sumaron organizaciones feministas del resto del planeta con el objetivo de promover condiciones propicias para una Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y disminuir las muertes de mujeres por esta causa. Los datos son claros, según el Fondo de poblaciones de las Naciones Unidas (UNFPA), un 8 por ciento de las muertes maternas se deben a abortos practicados en condiciones riesgosas. Es por esto que resulta fundamental abordar el fenómeno desde la perspectiva de salud pública.

Para tener una perspectiva integral, es necesario comprender las dinámicas de poder y violencias de género presentes al momento de hablar de políticas públicas que vayan en la línea de promover los derechos de las mujeres. En este sentido, por ejemplo, es central tener claridad respecto a la prevención del embarazo: acceso a la anticoncepción, a la Educación Sexual Integral y a la prevención de la violencia de género, por mencionar algunas problemáticas que aún están en deuda.

Por otra parte, el tratamiento profesional y técnico del tema debe promover las condiciones necesarias para las mujeres que deseen realizarse una Interrupción voluntaria del embarazo. En este sentido, la “objeción de conciencia” profesional se instala como una barrera en la que, finalmente, mujeres que podrían abortar dentro del marco legal (considerando las tres causales disponibles en el país) son forzadas a no hacerlo por el miedo a represalias o porque los profesionales no realizan la prestación de salud en el servicio de salud regional.

La Corporación Humanas realizó en diciembre de 2019 un informe ligado a este problema y los resultados demostraron que, del total de médicos y obstetras contratados por los servicios públicos, para la primera causal (de riesgo vital de la madre) un 18,4 por ciento de los profesionales se declaraban objetores de conciencia. En el caso de la segunda causal (inviabilidad fetal), el número de objetores aumentaba a un 25,3 por ciento; mientras que para la tercera causal (violación) los objetores crecían hasta el 46 por ciento de los profesionales, es decir, casi la mitad de los médicos y obstetras no practicaban una interrupción al embarazo por esta causal.

Al desglosar la información por cada servicio de salud (dentro del mismo informe) se observó que, en algunos casos, los porcentajes aumentaban considerablemente, llegando a casi la totalidad de profesionales que se declaraban en contra de realizar esta prestación de salud. En los servicios de salud de Osorno y Araucanía Norte, por ejemplo, los objetores llegaban al 89,5 por ciento del total de profesionales del área al interior de los recintos.

Un problema de salud pública

En este contexto, para la académica de la Escuela de Salud Pública de la U. Chile, Dra. Pamela Eguiguren, es necesario que la discusión sobre la interrupción voluntaria del embarazo se realice desde la perspectiva de salud pública, porque independiente de si exista o no regulación, el aborto se seguirá realizando y practicando en todo el mundo. En este sentido, plantea, es importante escuchar a las comunidades y organizaciones feministas que durante décadas han exigido el derecho al aborto.

Debemos tener aborto legal, seguro y gratuito, reconociendo las legítimas razones de las mujeres y estableciendo plazos razonables. No se puede pretender cambiar la realidad que enfrentan las mujeres solo por el hecho de prohibir y criminalizar, hay evidencia de sobra de que esto tiene consecuencias sobre la salud de las mujeres”, señaló la Dra. Eguiguren.

La profesora del Departamento de Atención Primaria y Salud Familiar de la U. Chile, Dra. Soledad Barría, concuerda con la Dra. Eguiguren, en relación a que el tratamiento de este tema debe salir de la perspectiva moral, trasladándose a un plano sanitario y hablando claro respecto a las cifras y problemáticas que se arrastran por la realización de abortos inseguros, tanto en Chile como en el mundo.

“Las mujeres han utilizado esto (el aborto) desde hace milenios. La pregunta es si se puede hacer con seguridad o no y para esto necesitamos que sea legal y gratuito. No habrá más o menos abortos si se legaliza, porque quienes tienen recursos pueden realizar la interrupción fuera del país y las que no lo hacen en malas condiciones, pero al menos tendremos la seguridad de que sean seguros para quien lo necesite”, agregó la Dra. Barría.

Diversas organizaciones feministas, en tanto, han convocado para la conmemoración de esta jornada a un “pañuelazo virtual” por el aborto, además de concentraciones en distintas ciudades del país y del mundo. Por otro lado, durante esta jornada la Cámara de Diputados votará la despenalización del aborto hasta las catorce semanas de gestación, con el objetivo de avanzar hacia garantizar los derechos de las mujeres en el país.