En la región de Aysén:

Observatorio U. de Chile permitirá capturar datos claves para prevenir amenazas y efectos del cambio climático

Universidad de Chile instalará observatorio geofísico en Aysén
La U. de Aysén recibió a equipo científico del Programa Riesgo Sísmico de la U.de Chile y la Dirección Meteorológica, para iniciar la instalación de un observatorio geofísico en Cerro Castillo.
La U. de Aysén recibió a equipo científico del Programa Riesgo Sísmico de la U.de Chile y la Dirección Meteorológica, para iniciar la instalación de un observatorio geofísico en Cerro Castillo.
La iniciativa permitirá capturar datos claves para el análisis de escenarios de geoamenazas y cambio climático. Esta iniciativa será parte de una red de observatorios en el país.
La iniciativa permitirá capturar datos claves para el análisis de escenarios de geoamenazas y cambio climático. Esta iniciativa será parte de una red de observatorios en el país.
En esta zona, señala Jaime Campos, "hay mucha sismicidad difusa, una actividad sísmica cortical, a profundidades de menos de 2 kilómetros".
En esta zona, señala Jaime Campos, "hay mucha sismicidad difusa, una actividad sísmica cortical, a profundidades de menos de 2 kilómetros".

Comprender y proyectar los efectos, riesgos y amenazas de los fenómenos naturales para mejorar la respuesta ante el impacto de los desastres socio-naturales, del cambio climático y de la sequía. Este es uno de los objetivos centrales de la alianza generada entre la Universidad de Aysén, el Programa de Riesgo Sísmico (PRS) de la Universidad de Chile y la Dirección Meteorológica (DMC), quienes iniciarán un trabajo conjunto en el marco del Programa Observatorio Geofísico Multiparámetros Nodo G-Data Aysén.

Esta iniciativa comprende la instalación de observatorios “nodos” de instrumentos geofísicos en cinco macrozonas: Nodo-Norte (Putre), Nodo-Centro (CAREN), Nodo-Sur (Aysén), Nodo-Antártica y Nodo-Isla Rapa Nui. En el caso puntual de Aysén, se trabajará en la estación de investigación Cerro Castillo de la Universidad de Aysén, donde se pondrá en operación una estación sismológica. También se inspeccionará y evaluará la factibilidad de instalar una Estación Meteorológica Automática (EMA), además de levantar condiciones de comunicaciones y energía para la operación.

Para el director de Investigación de la Universidad de Aysén, Gerard Olivar, este proyecto no solo permitirá ser parte de un trabajo innovador, sino que también impactará positivamente en otros ámbitos. “Para la Universidad es muy importante esta colaboración, ya que este equipamiento, además de reportar datos a la red nacional, nos puede ayudar a hacer aplicaciones en agroecología, en temas forestales, incluso con la carrera de ingeniería informática puede haber muchas aplicaciones con los datos que proporcione la estación. En cuanto a educación de postgrado, también puede dar pie a la elaboración de algún magíster o educación continua, pero será un servicio para la región de Aysén y eso hay que ponerlo en primera línea de esta iniciativa”, indicó Olivar.

¿Por qué un observatorio en Aysén?

El profesor Jaime Campos, sismólogo y director del Programa Riesgo Sísmico, afirma que Aysén tiene un enorme interés para la comunidad científica mundial porque ocurre un fenómeno “único”. En esta zona (penínsulas de Taitao y Tres Montes) el fondo oceánico tiene una grieta.

El académico explica que “los científicos la conocen como 'la dorsal Chile', una abertura de la corteza oceánica desde donde sale material directamente del manto, magmas calientes que ascienden, se encuentran con las aguas, se enfrían y se va haciendo la corteza oceánica. Es decir, allí está naciendo la corteza oceánica. Es una ventana abierta a las rocas del manto, con un volcanismo muy particular. Esa zona es conocida como un “punto triple” donde se encuentran tres placas: el extremo sur de la placa de Nazca, donde termina y subducta (colisiona) con la placa Sudamericana. Al sur de este lugar ya no existe la placa de Nazca y empieza a aparecer la placa Antártica”.

En esta zona, señala Jaime Campos, “hay mucha sismicidad difusa, una actividad sísmica cortical, a profundidades de menos de 2 kilómetros”. Añade que un ejemplo de aquello “fue el terremoto del 2007, que demostró que puede haber terremotos muy cerca de la superficie, de magnitud 7, por lo tanto, pueden ser muy destructivos. Es una zona sísmicamente activa, pero con un comportamiento que no se da en el resto del país. Por eso es tan importante estudiarlo”.

Asimismo, el jefe del Subdepartamento Pronósticos de la DMC, Ricardo Alcafuz, asegura que -desde el punto de vista meteorológico- es importante contar con un observatorio en Aysén que incluya además la Estación Meteorológica, puesto que “permitirá crear un registro climático de alta resolución necesario para validar los modelos climáticos globales y hacer un seguimiento más exhaustivo del tiempo diario, contribuyendo directamente a la protección civil y a la investigación”.

El meteorólogo explicó que la estación se instalaría el próximo año, y es la primera de un total de 14 estaciones que están consideradas instalar en la Región de Aysén a mediano plazo. Estas se sumarán a las 10 que actualmente posee la DMC en esta ciudad. “Sin duda, esta implementación permitirá reforzar la labor operativa de la DMC al realizar un seguimiento más detallado de los fenómenos y variables meteorológicas del día a día, entregar pronósticos más precisos para la Región y contar con más registros meteorológicos para estudios e investigación del clima y del calentamiento global, del medio ambiente y otros”, recalcó Alcafuz.