Con la participación de la documentalista y académica ICEI, Alejandra Carmona Cannobbio

Corporación Pequeñas Armas: El proyecto que ocupa el arte y la comunicación para combatir la violencia y delincuencia infantil

Pequeñas Armas: El proyecto contra la delincuencia infantil

Erradicar el uso de armas en niños, niñas y adolescentes, así como evitar el aumento de delincuencia infantil y su relación con el narcotráfico, como una forma de respetar el derecho de todos y todas a una infancia sin violencia”. Ese es el objetivo la Corporación Pequeñas Armas ha buscado desarrollar desde su creación en 2009, y que desde marzo ha levantado una campaña a través de sus redes sociales para sumar colaboradores y financiamiento a su cruzada.

Este proyecto sin fines de lucro nació cuando su fundador, Manuel Tello, se encontraba realizando un taller audiovisual en una población y vio que un niño jugaba a ser delincuente con una pistola de plástico, simulando entrar a una casa a robar. La escena, que para él fue una representación de cómo la violencia permea la forma en que los niños conciben su futuro, lo motivó a realizar el documental “Pequeñas Armas”, que muestra testimonios de menores de edad que han cometido delitos o que se encuentran insertos en ambientes violentos.

Según relata el realizador, “el objetivo de este documental no solo era documentar esa realidad para denunciar una situación que vulneraba los derechos de los niños, niñas y adolescentes, sino que también concientizar sobre la importancia de la prevención de la violencia a temprana edad”. De este modo, la gira del documental por diferentes ciudades se sumó a diferentes acciones emprendidas por la Corporación, como la fundación de la organización y la implementación de la iniciativa de talleres artísticos multidisciplinarios “Ponlecolor”, los cuales se lograron llevar a cabo con 1.500 niños de diversas escuelas y colegios con altos índices de vulnerabilidad.

Hoy, con esa misma meta, la Corporación Pequeñas Armas busca seguir desarrollando esta iniciativa e invitan a sumarse como colaboradores o a ayudar en la difusión de su causa, como ya lo han hecho periodistas y personalidades del mundo de la cultura, entre ellos Alejandra Matus, Eduardo Fuentes, Mirna Schindler, Marco Antonio de la Parra y Javiera Contador.

 

 

Desde el estallido social y el posterior inicio de la pandemia, hemos tenido muchas dificultades para seguir adelante con nuestro proyecto. Ya que los talleres son de carácter presencial, prácticamente se hicieron inviables, y aunque hay algunos que pudieran hacerse vía online, lamentablemente los espacios vulnerables muchas veces carecen de acceso a internet o telefonía celular. Sin embargo, como hemos visto que la violencia en la infancia y la relación de niños con armas y bandas delictuales no ha mermado, hemos levantado esta campaña en redes para seguir adelante y empezar a construir la nueva implementación de esta iniciativa”, comenta Manuel Tello, director de la Corporación.

De acuerdo con datos de la Fiscalía, entre 2019 y 2020, 6.101 niños y niñas murieron víctimas de la violencia. Tomando en cuenta estos datos y el contexto de pandemia, Tello es enfático en asegurar que hoy más que nunca es urgente no abandonar a estos los niños, niñas y adolescentes: “Esta es una Corporación que se ha construido con mucho esfuerzo y compromiso personal, pues sabemos que es un tema difícil, incómodo para las autoridades, pero esencial para el desarrollo de nuestros niños. Cuando un delito ocurre a manos de menores de edad, es una consecuencia de los problemas existentes en la sociedad y es responsabilidad de todos protegerlo. Primero, del Estado, y luego de nosotros que, en conjunto con nuestros talleristas y quienes quieran sumarse, queremos brindarles espacios para estudiar y crear, para ser niños”, asegura el realizador audiovisual.

El arte, la expresión y la comunicación para escapar de la violencia

El proyecto de innovación en prevención “Ponlecolor” consiste en la instalación de diversos talleres de comunicación, orientados a prevenir y revertir la violencia e inseguridad entre niños y niñas, tanto al interior de la comunidad escolar como en su entorno directo. Estos talleres están dirigidos a potenciar y generar sus capacidades creativas y comunicacionales, con un enfoque en la producción de videos, pinturas, textos y fotografías, cuyo eje de contenidos son el desarrollo de la autoestima, el debate y reflexión sobre prácticas y educación en derechos humanos, la solución a conflictos, la educación a la no violencia y la prevención al uso de armas.

Alejandra Carmona Cannobbio, realizadora audiovisual y académica del Instituto de la Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile, ha participado de la aplicación de estas instancias que entregan a los niños, niñas y adolescentes herramientas para a reconocerse a sí mismos como individuos con experiencias particulares, valores, ideas y emociones, para luego construir su propio discurso en función de una identidad definida que les permita resolver sus conflictos de manera no violenta.

“El trabajo que logramos realizar en las escuelas y que esperamos seguir realizando fue muy interesante y enriquecedor tanto para ellos como para nosotros. Ya que la idea fue que ellos pudieran problematizar su entorno y plasmarlo en un producto audiovisual, vimos cómo los niños son capaces de identificar elementos complejos en su vida y generar mecanismos para adaptarse, evadirlos o vivir con ellos. Temas como el abandono, el narcotráfico, las diferencias de clase, la calidad de la educación y las proyecciones profesionales son temas de los que están mucho más conscientes de lo que creemos y estos talleres les dieron una gran oportunidad para expresar sus inquietudes”, comenta la documentalista.

Para Cannobbio, ser parte de este proyecto también abrió una puerta a que los mismos niños y niñas pudieran desarrollar nuevos lazos, conociéndose y compartiendo emociones y experiencias. “Ya que el taller audiovisual incluía el proceso completo de creación, es decir, guion, grabación, edición, montaje, trabajamos en grupos y entre ellos había estudiantes que no solían tener relación. Sin embargo, la producción de las historias les dio esta oportunidad de conocerse, de darse cuenta que tenían los mismo problemas y que finalmente no estaban solos. Esa experiencia es la que queremos seguir haciendo posible”, asegura la docente, quien se suma a la invitación de Tello para todos los y las quer quieran sumarse al proyecto.

Si deseas ser colaborador de esta iniciativa, saber más de ella o darles tu aporte, puedes contactarte con la Corporación Pequeñas Armas escribiendo al correo pequenasarmas@gmail.com y ponlecolortalleres@gmail.com, o seguir su labor en su Instagram, Twitter, Facebook o su sitio web (https://pequenasarmas.wixsite.com/website).