En la jornada del lunes 18 de marzo, el académico y docente de la Facultad de Comunicación e Imagen Alejandro Morales conversó con la periodista Paula Molina en el programa “Lo que queda del día” de Radio Cooperativa sobre el revuelo mediático que ha causado la foto de la princesa de Gales, Kate Middleton, publicada en la cuenta oficial del Palacio Kensington en X e Instagram tras verificar su manipulación.
La princesa Middleton lleva meses sin ser vista públicamente, lo que ha levantado una ola de conspiraciones en redes sociales sobre su paradero, pasando por teorías de divorcio, muerte, enfermedad y hasta de rituales mágicos. Frente a este panorama, el Palacio Kensington subió una foto que fue rápidamente verificada por los internautas y que acabó por ser retirada de aquellos medios que la replicaron en primera instancia confiando en la veracidad de la fuente oficial.
Este suceso abre una gran discusión que el doctor en Comunicación Alejandro Morales analizó en el programa radial de la tarde: “estamos ante un caso de desinformación oficial. (...) Ellos querían mitigar las especulaciones y lo que hacen es amplificarlas mucho más, como acusando un cierto desconocimiento de cómo operan las redes sociales hoy en día. Pareciera ser una desinteligencia muy grande y pone en entredicho la credibilidad de la Casa Real en cuanto a sus comunicaciones. (...) De hecho, el mismo Instagram le pone abajo una franja advirtiendo que la imagen está manipulada y que hay que dudar de su veracidad”.
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¿Estamos preparados para el fin de una era de confianza?
Esta vez fueron las y los internautas, personas –en su mayoría– sin mayor instrucción de verificación, quienes levantaron las primeras alertas sobre un contenido proveniente de una fuente que fácilmente podría haber brindado confianza en un primer momento sólo por ser quien es. Morales considera al respecto que: “Photoshop es una herramienta de vasto recorrido que se usa mucho en retoques de imágenes digitales, de fácil acceso, está a disposición de todo el mundo, pero por lo mismo ya la gente tiene su ojo entrenado en darse cuenta cuando algo no calza. (...) Teníamos una sola cosa para basarnos en evidencia, que era la imagen, el poder de la imagen, y ya no podemos creer en eso. Incluso, tampoco en la imagen audiovisual. Ya vemos que con inteligencia artificial podemos crear todo tipo de videos con un nivel de perfección bastante asombroso”.
Finalmente, el académico afirmó en Cooperativa que esto “es el fin de la evidencia visual. Nosotros estábamos acostumbrados a que las fotografías eran testigos y ahora hay que considerarlas dudosas y falsas por defecto y uno ir haciendo la tarea de verificar la información, incluyendo las que vienen de fuentes oficiales, como en este caso, la Casa Real”.