Sexta Sesión Ordinaria, martes 21 de junio del año 2005

El día martes 21 de junio de 2005, siendo las 9:00hrs., se reunió el Consejo Universitario presidido por el Sr. Rector Prof. Luis A. Riveros C., con la asistencia del Sr. Prorrector, Dr. Jorge Litvak, y de los señores Decanos de las Facultades que a continuación se indican:

  • Arquitectura y Urbanismo Sr. Julio Chesta
  • Artes Sr. Pablo Oyarzún
  • Ciencias Sr. Víctor Cifuentes (Vicedecano)
  • Cs. Agronómicas Sr. Mario Silva
  • Cs. Forestales Sr. Guillermo Julio
  • Cs. Físicas y Matemáticas Sr. Francisco Brieva
  • Cs. Económicas y Administrativas Sr. Joseph Ramos
  • Filosofía y Humanidades Sra. María Isabel Flisfisch
  • Medicina Sr. Jorge Las Heras
  • Odontología Sr. Julio Ramírez
  • Cs. Químicas y Farmacéuticas Sr. Luis Núñez
  • Cs. Sociales Sr. Eugenio Aspillaga (Decano (S))
  • Cs. Veterinarias y Pecuarias Sr. Santiago Urcelay

Excusa su inasistencia el Sr. Decano de la Facultad de Derecho, profesor Roberto Nahum.

Asiste el representante del Presidente de la República, Sr. Patricio Rojas y se excusa el Sr. Carlos Martínez. Están presente los Consejeros Sra. Faride Zeran y Sra. Rosa Devés. Se excusa el Consejero Sr. Jorge Valenzuela-.

Concurren por invitación del Sr. Rector la Sra. Vicerrectora de Asuntos Académicos, Sra. Cecilia Sepúlveda; el Vicerrector de Asuntos Económicos y Gestión Institucional, Sr. Carlos Cáceres; el Vicerrector de Investigación y Desarrollo, Sr. Camilo Quezada; el Contralor de la Universidad, Sr. Juan Manuel Pino; el Subdirector del Instituto de Estudios Públicos Sr. Carlos Miranda; el Director del CEAC, Sr. Luis Merino; el Director del INTA, Dr. Fernando Vio; el Director del Programa de Bachillerato, Sr. Jorge Babul; el Director del Hospital Clínico José Joaquín Aguirre, Dr. Italo Braghetto.

Se hace presente también el Presidente de la FECH, Felipe Melo.

Actuó como Secretario del Consejo Universitario, el Sr. Antonio Zapata Cáceres, Secretario General (S).

Tabla

  1. Aprobación del acta correspondiente a la V sesión ordinaria, de 7 de junio de 2005.
  2. Cuenta.
  3. Análisis del conflicto estudiantil.
  4. Varios.

1.- Aprobación del acta correspondiente a la V sesión ordinaria, de 7 de junio de 2005.

El acta es aprobada sin observaciones.

El Decano Sr. Oyarzún señala que hará llegar a la Secretaría del Consejo algunos alcances respecto a su intervención en la sesión del 7 de junio.

El Sr. Secretario General explica que se encuentra pendiente de aprobación el acta de la I Sesión Extraordinaria del Consejo, realizada el 17 de mayo del corriente, por las circunstancias de la ocupación del Casa Central ya que el respectivo material quedó retenido en las oficinas de la Secretaría del Consejo. Dicha acta será distribuida para la próxima sesión.

2.- Cuenta.

Cuenta del Sr. Rector:

  • Proyecto de Estatuto de la Universidad de Chile: Informa que esta tarde asistirá a la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados para la discusión que se inicia. Hará una presentación sobre el proyecto y luego responderá consultas. Se ha recabado también su opinión sobre dos temas más: arancel diferenciado para la PSU y ley de financiamiento para la educación superior. Distribuirá a los Sres. Consejeros un documento elaborado por el DEMRE que es un estudio que demuestra que los costos superan los ingresos en alrededor de 800 millones de pesos, lo que impide pensar en imponer un arancel diferenciado, al margen de las dificultades que habría para implementarlo. Hay que considerar que la Universidad de Chile da 11.000 becas, a las que hay que sumar las 20.000 becas del Mineduc. Ello entraña, de hecho, la existencia de un arancel diferenciado porque hay 30.000 estudiantes que no cancelan los 19.000 pesos que cuesta la PSU. El proceso es muy caro y también lo es su aplicación. Con relación a la ley de financiamiento recientemente promulgada, le llama la atención la petición tomando en cuenta que nunca fue invitado cuando se discutió la iniciativa legal y su opinión será, por tanto, ex post.

Cuenta Sr. Prorrector

  • Medalla Juvenal Hernández: se ha abierto el plazo para presentar las postulaciones. Se otorga anualmente a un ex alumno de esta Corporación que haya prestado servicios distinguidos a la Universidad en dos menciones: Artes Letras y Humanidades y en Ciencia y Tecnología. Las postulaciones pueden ser presentadas por los Decanos y Directores de institutos Interdisciplinarios y por los Presidentes de las Academias del Instituto de Chile. Recibirán hoy la convocatoria.

Cuenta del Sr. Vicerrector de Asuntos Económicos y Gestión Institucional

  • Recaudación por retención de impuestos efectuada por el SII a los morosos del sistema de créditos. La última información disponible es que esta Corporación recuperaría 458 millones de pesos sobre un total de alrededor de 5000 millones que capturó el sistema. La estimación del déficit inicial de la Universidad para este año era de 2.150 millones de pesos, pero se habían incluido 400 millones de pesos por ese concepto. Por lo que se están obteniendo 58 millones adicionales, lo que reduce el déficit a alrededor de 2100 millones de pesos.

El Sr. Rector ofrece la palabra sobre el punto Cuenta.

El Decano Sr. Las Heras desea dar cuenta sobre el rol que le tocó desempeñar como miembro de la Comisión designada en la última sesión de este Consejo e integrada por el Sr. Prorrector y el Sr. Decano de la Facultad de Artes. A su entender, la tarea de la Comisión era la redacción de la declaración que salió posteriormente en la prensa y establecer contacto con los estudiantes para lograr un acuerdo respecto a la toma de la Casa Central. Fue citado a una reunión por el Sr. Prorrector y trabajaron en la redacción de la declaración con el Decano Sr. Oyarzún. En esa ocasión también tomó conocimiento de una carta del Presidente de la FECH que éste presentaría al Pleno de la Federación y, según la respuesta, existía la posibilidad de que abandonaran la Casa Central. Cuenta que al día siguiente, luego de publicada la declaración en la prensa, conversó con el Sr. Prorrector quien le informó que ese mediodía se reunirían con los estudiantes de la FECH y que él ya no formaba parte de la Comisión que llevaría adelante tales conversaciones. Agrega que el Decano Sr. Oyarzún le confirmó que efectivamente no formaba parte de esa Comisión y que desconocía las razones de la exclusión. Posteriormente, recibió un mail del Sr. Rector en el que le encarga realizar gestiones, junto con los Decanos Sr. Aspillaga y Sr. Nahum, para lograr acuerdo con los estudiantes. Comenta que no pudo comunicarse con los Decanos y después supo que el Decano Sr. Nahum nunca supo que había sido designado. Añade que no tuvo una explicación adecuada respecto a las decisiones que sobrevinieron, porque entiende que se formó otra comisión a la que se integraron representantes del Senado con otro Decano en su reemplazo. Reconoce el derecho del Sr. Rector a integrar las comisiones como le parezca, pero le parece que si el Consejo lo había designado a él, correspondía comunicarle directamente que sería reemplazado. Deseaba poner esta situación en conocimiento del Consejo Universitario porque de alguna manera se sentía delegado por éste para formar parte de ese proceso.

El Sr. Rector señala que, como consta en el acta, la comisión de la que se le pidió formar parte era la que se encargaría de redactar la declaración y así se hizo. Estimó que la otra tarea era necesario llevarla a cabo con una representación transversal, sobre todo después de la declaración publicada el 9 de junio en que el Decano Sr. Las Heras sostuvo que había disenso en el Consejo Universitario respecto a la decisión del Rector de no desalojar la Casa Central. Era un momento muy delicado y la lectura que de él pudieran hacer los estudiantes en toma no facilitaba un diálogo constructivo. Por eso estimó que la mejor manera de abrir las puertas a una conversación con la directiva de la FECH era con la Comisión que encabezó el Decano Sr. Oyarzún. Este punto se puede discutir en el contexto del tema de la tabla.

3.- Análisis del conflicto estudiantil.

El Sr. Rector cree necesario analizar lo sucedido en orden a sacar algunas lecciones para el futuro. Señala que hará una cronología del desarrollo del conflicto para luego escuchar las opiniones de los Sres. Consejeros.

Cronología del conflicto:

  • Declaración pública del Consejo Universitario con participación del Presidente de la FECH. 17 de mayo.
  • Toma de la Casa Central. 18 de mayo
  • FECH no participa y señala a las autoridades que se trata de un grupo pequeño que no responde a directrices de ninguna instancia de la FECH
  • FECH se hace cargo de la toma sin que medien discrepancias explicitas y declara su acuerdo con la medida de fuerza.
  • Panorama nacional confuso. Agenda diversificada con paros en un buen número de Facultades, algunas llegando a parar 5 semanas.
  • Acuerdo de la FECH para parar completamente toda la Universidad que no se cumple integralmente.
  • Reunión del Consejo Universitario. 7 de junio.
  • Comunicación epistolar con el Presidente de la FECH insistiendo en la necesidad de clarificar los fundamentos de la medida cuando la FECH había declarado que no era contra la Corporación.
  • Posteriormente se declara que hay un grave problema con la morosidad no obstante haberse estado trabajando intensamente, con la participación de los estudiantes desde hacía bastante tiempo. No se habían aplicado medidas. Había incluso un principio de acuerdo con los estudiantes.
  • Solicitó a los Decanos Sr. Pablo Oyarzún y Sr. Raúl Morales que junto con los senadores Dr. Bahamone y Dr. Vivaldi, conversaran con los estudiantes en para ver las posibles salidas de un conflicto que no estaba claro para las autoridades
  • Conversación fue larga y complicada. Esperaba tener conversaciones independientes con los directivos de la FECH y los alumnos en toma, pero estos últimos se sumaron. Participaron los Presidentes de la Facultad de Odontología y de la Escuela de Diseño, de la Facultad de Arquitectura. El domingo a la noche se logró un acuerdo en el sentido de debatir el lunes en el Pleno, lo que ocurrió, y la FECH acordó retirar su apoyo a la toma de la Casa Central y entregarla a las autoridades previa firma de un Acuerdo que explicitara:
    1. Que la Universidad no estaba favoreciendo las políticas públicas de financiamiento
    2. Que se instalará un proceso de discusión interna sobre la temática de financiamiento universitario, en especial del financiamiento estudiantil. Realización de un Encuentro Universitario, lo que está en el nuevo estatuto a cargo del Senado. Definición de política universitaria sobre el tema.
    3. Que se trataría urgentemente el tema de la Morosidad
    4. Que habría un cuestionamiento a la nueva ley de financiamiento universitario.

El Sr. Rector señala que ese fue el desarrollo de un conflicto que, como se aprecia, no justificaba en absoluto la utilización de medidas de fuerza, como la toma de la Casa Central, que impactaron a la opinión pública dando la impresión de que no había diálogo con las autoridades sobre los temas en cuestión. Reitera que lo ocurrido fue lamentable y que las acciones no tenían respaldo real. El día de la entrega de la Casa Central hubo un enfrentamiento entre los alumnos que quedaban en el recinto y la directiva de la FECH. Hechos también muy desgraciados.

Con respecto al estado en que se recibió la Casa Central, puntualiza que hubo descerrajamiento del Salón de Honor, de la Sala Sazié y de la Dirección Jurídica. En esta última también se descerrajaron muebles y, aparentemente, hubo sustracción de documentos, situación que está aún en evaluación. Más grave que lo anterior es, a su juicio, el daño a la imagen de la Corporación, en circunstancias que hay un conflicto nacional ineludible y un tema de fondo, como el de financiamiento estudiantil, en que esta Universidad ha venido haciendo planteamientos desde hace mucho tiempo y con mucha fuerza y consistencia. Estima inaceptable que se deteriore el frontis de la Casa Central, pero más todavía que se le haya dado una entrevista exclusiva de la toma al canal 13, de la Universidad Católica, en la que participó el Presidente de la FECH. Todo lo que en ella se mostró dio una imagen deplorable de lo que ocurría al interior del recinto. Esto no es justo con la institución. Todos han hecho un gran esfuerzo para hacer frente a una competencia creciente y profunda con todo el sistema privado y esta gratuidad en el daño es inadmisible. Ha distribuido copia de las declaraciones del Consejo Universitario (2) y de las cartas que envió a la comunidad universitaria durante el conflicto. Insiste en que no le teme a los conflictos pero le gusta que sean de frente y con el adecuado procedimiento. Esto fue una puñalada por la espalda a la Universidad y a la buena voluntad de este Consejo. Por cierto, esta no es una responsabilidad inicial de la FECH, pero sí lo fue posteriormente. Esta no es la forma de trabajar los conflictos. Ha sido una afrenta a la Universidad y una provocación a la comunidad universitaria. Estas conductas no conducen a nada y son absolutamente irresponsables. Ha sido un conflicto que ha tenido sólo costo para la institución sin beneficiar a nadie, porque no hay ningún elemento distinto; los puntos planteados se vienen discutiendo al interior de la Universidad desde demasiado tiempo. Nadie ha aprendido de este conflicto. Realizar un Encuentro Universitario sobre el financiamiento universitario o sobre cómo seguir discutiendo con un sentido de equidad el tema de la morosidad -que es algo que se ha hecho permanentemente- se podía lograr sin necesidad de esta clase de medidas de fuerza; es un sinsentido total. Sabe que todas las unidades han tomado medidas para que las exigencias a los alumnos en materia de pago se hagan con la mayor equidad posible.

Cómo se enfrenta este tipo de situaciones en el futuro es, a su juicio, la pregunta fundamental ahora. Declara que no se aceptará más ninguna acción de esta naturaleza. No habrá más tomas de la Casa Central o de la Torre. Se adoptarán medidas de seguridad para que todos los funcionarios estén identificados y para que también se identifiquen las visitas. Se suspenderán actividades con estudiantes en la Casa Central. Le parece muy desafortunado llegar a estas medidas. Ha solicitado a la Vicerrectoría de Asuntos Académicos que se pongan en prácticas sistemas electrónicos para impedir la suspensión de las actividades académicas y lograr que éstas puedan continuar de la forma más normal posible. Han surgido, además, amenazas de demandas judiciales por incumplimiento de los contratos de servicios educacionales convenidos.

Estima esencial que los alumnos encuentren formas distintas de expresar sus demandas. Propondrá que este tema sea también parte del diálogo del “Encuentro sobre financiamiento universitario”.

Reitera su planteamiento sobre la necesidad de abordar en profundidad el tema del Fondo de Crédito Solidario. Insiste en que el Gobierno no lo ha enfrentado debidamente y que el próximo año se avecina una profundización de esa crisis.

En cuanto al proyecto de ley aprobado, señala que éste provee instancias de financiamiento privado para estudios superiores, lo que no soluciona ningún problema sino que crea más problemas porque la Universidad debe ser aval de estudiantes de 1º, 2º y 3º año, que son estudiantes con riesgo de deserción. Se sabe que la deserción existe en la Universidad y los compromisos que generaría constituirse en aval lleva a plantearse si habrá que bajar los estándares académicos para disminuir los costos. Ello es, desde luego, inaceptable. Se requerirá decidir si esta nueva ley se aplicará o no a la Universidad de Chile. Es cierto que hay muchos estudiantes de institutos profesionales, centros de formación técnica y universidades privadas que ahora tienen un instrumento posible para acceder al financiamiento de la educación superior, pero no resuelve ningún problema a una universidad como esta Corporación, que aspira a contar con los mejores estudiantes y tiene una enorme diversidad social y que no está dispuesta a sacrificar niveles académicos para reducir la deserción. Informa que esta Universidad, a través del Decano de la Facultad de Derecho, hizo una presentación al Tribunal Constitucional respecto a este proyecto de ley, que no fue considerada.

Sabe que el país tiene un grave problema de financiamiento de la educación superior y que esto es contradictorio con la opinión de las autoridades respecto a la creciente inclusión de estudiantes en el sistema universitario. Le parece bien esa mayor participación, pero el problema es que la pagan las universidades como esta Corporación, porque las demás tienen un régimen absolutamente regulado por la oferta y la demanda. Estas universidades que son públicas, concepto que tiene que ver con la intervención del Estado, ya que no existen universidades privadas de interés público. Esta Universidad ha planteado el tema del financiamiento estudiantil en innumerables ocasiones y no ha sido oída. Se han cerrado las puertas a debatir un problema que es central para el país. Tiene claro que si la opción fuera un arancel diferenciado, eso cuesta en régimen alrededor de 300.000 millones de pesos al año, lo que no es financiable, a menos que se establezcan nuevos impuestos. Continuar con el sistema de financiamiento actual vuelve cada vez más inviable a la Universidad, porque la presión es para reprimir costos y la única manera de hacerlo es disminuir calidad. El reajuste del presupuesto continuará siendo por debajo del IPC como todos los años y nuevamente habrá que ver cómo se reajustan las remuneraciones de los profesores que ya han sido suficientemente castigados por el sistema de financiamiento global. El Fondo de Crédito Solidario continuará sin cambiar y esto no tiene un horizonte claro. Ha observado que los candidatos presidenciales no se han pronunciado en absoluto sobre estas materias. La progresiva privatización de la Universidad continuará de manera sutil como hasta ahora. Hay una presión constante para generar más recursos con el fin de que esta institución funcione. Cree que los conflictos con los estudiantes son reales y comparte el punto de vista de ellos porque sabe cuán frustrante es estar en un sistema que no comprende ni acoge. No comparte las acciones de violencia de los estudiantes, pero sí las razones de la movilización estudiantil. Cree que nadie puede estar de acuerdo con los actos oprobiosos que se cometieron.

Ofrece la palabra.

El Decano Sr. Las Heras declara que no se puede hacer cargo de lo que los periodistas digan en los diarios. Sólo expresó su opinión personal que no difería en nada de lo que había dicho en el Consejo Universitario y consta en acta. Se refirió al daño que la toma de la Casa Central causaba a la imagen de la Universidad de Chile; que su Facultad había hecho un gran esfuerzo para conquistar un sector de alumnos que se estaba yendo a universidades privadas y que este año era irrecuperable porque esas acciones dilapidaban esos esfuerzos. Por eso estima que si esa fue la razón para haber quedado fuera de la Comisión, lo lamenta, pero cree que debió haber recibido la explicación oportunamente. Le llama la atención que se lo haya excluido de esa Comisión y se lo haya incluido en otra. No entiende bien el sentido de todo eso. Considera que en ningún momento fue desleal con respecto a la autoridad del Sr. Rector en relación a la posición que tenía. Sólo dio a conocer su opinión como académico, como universitario. Cree que hubo un malentendido, porque otros Decanos también entendieron que la Comisión era para ambos objetivos: la declaración y conversar con los alumnos.

Cree que han ocurrido cosas muy desagradables Entiende la posición del Sr. Rector respecto a la violencia y cree que lo último que se desea es responder con actos de violencia que dañan la imagen pública de la institución, pero cree que hay un límite en la participación y el diálogo estudiantil y las medidas de fuerza que impiden que uno entre a su casa. En una democracia se tiene el sano y legítimo derecho de exigir que se le permita a uno ingresar a su propia casa. Está convencido que si el desalojo se hubiera llevado a cabo dentro de las primeras dos horas que se tomaron el recinto, cuando ni la FECH estaba aún involucrada, habría concluido más rápido el conflicto. Opina que por ningún motivo se puede permitir la ocupación de las instalaciones universitarias. Cree que eso es válido respecto de toda la Universidad. Debe adoptarse la decisión de que nunca más se aceptarán estas medidas de fuerza, provengan de quien provengan.

La Consejera Sra. Zeran se alegra de la aclaración del Decano Sr. Las Heras porque, junto con otros académicos, se sintió sorprendida por sus declaraciones, ya que planteaba la existencia de una división al interior de la institución entre Facultades ricas y pobres. Aparecían cuatro grandes Facultades ricas, exitosas, serias, con excelencia académica en oposición a otras Facultades sin esas características. Para ciertos medios de comunicación es bueno introducir divisiones al interior de la institución que son ciertamente odiosas. Llama la atención sobre este tema para que no vuelva a ocurrir, porque quienes no tienen mucha experiencia en materia de declaraciones o de manipulación de ciertos medios suelen caer en estas trampas que introducen elementos molestos en la convivencia universitaria. Se vio obligada a explicar a sus académicos que probablemente estas declaraciones no eran ciertas, porque conocía al Decano Sr. Las Heras y que seguramente había sido tergiversado. Recuerda que la comisión se formó para redactar la declaración porque el Rector señaló que formaría una comisión transversal para enfrentar el diálogo con los estudiantes.

La Decana Sra. Flisfisch cree que no tiene demasiado sentido rasgar vestiduras sobre distintas cuestiones porque los hechos son la demostración de lo que ha ocurrido, independientemente de las responsabilidades. Estima que el Rector tiene el justo derecho a expresar su malestar. Entiende que su pregunta es qué se hace en el futuro. Lo único que queda claro como propuesta es que hay que arbitrar los medios para impedir que se tomen los recintos centrales de la Universidad. Se propone también hacer este Encuentro universitario, que no logra visualizar claramente.

Comenta que en su Facultad -que ha estado cinco semanas en conflicto, cuatro de paro y una de toma, con grave daño académico pero no de otro tipo- se esta preparando una agenda de entendimiento para enfrentar los problemas. Resulta difícil saber qué es lo que hay que hacer como comunidad; existe el sentimiento de que hay que trabajar en conjunto pero cada estamento lo visualiza de modo distinto. La violencia política es un elemento adicional en el caso de su Campus. No hay fórmulas mágicas. Hay una percepción de que no existe sentimiento de comunidad al interior de la Facultad aunque en el discurso retórico se hace referencia constante a ella; las posiciones de los estamentos son difíciles de hacerlas coincidir.

Se acordó que el viernes próximo habrá un foro sobre financiamiento, al que invita a toda la comunidad. Uno de los aspectos relevantes es que si se quiere discutir fundamentadamente es básico estar bien informados porque existe una ignorancia bastante generalizada sobre las distintas materias. Se requiere hacer una discusión inteligente e informada. Están invitados el Sr. Rector, la Directora de Educación Superior y se cubrirá un abanico completo de temas en un Seminario, desde las 9 a las 19 hrs. Entiende que el Encuentro universitario debería ser también algo similar. Se decidió que cada estamento iba a hacer su propia discusión y referéndum. El estamento estudiantil también abordará la violencia política con la idea de que el resultado sea respetado por todos indistintamente. Piensa que hay que instalar un equipo triestamental para definir una agenda.

Sobre medidas concretas, cree que no se puede distinguir entre la Casa Central, la Torre y el resto de las instalaciones. Es un tema complejo. Las políticas deben ser similares para la institución. Comenta que le molestó mucho lo que apareció en el diario sobre los 4 Decanos porque provoca diferencias carentes de sentido. El propósito debe ser unirse y trabajar la transversalidad, que es un tema difícil y muy complejo. Si se va a hacer un Encuentro, debe ser organizado y servir para la institución. Se requiere ver como se recupera el tiempo perdido, qué medidas de consenso se adoptan; hay que discurrir cuáles son las medidas más eficientes en las que todos los estamento se comprometan. Debe haber un acuerdo respecto a qué se entiende por comunidad. Hay una responsabilidad de formación con los estudiantes. Es preciso alcanzar un consenso y obrar en consecuencia. Se requiere una reflexión profunda. Le parece fundamental prepararse para el Encuentro, porque de lo contrario no habrá un debate verdadero. Cree, por ejemplo, que nadie tiene claro que significa el arancel diferenciado ni cuál es su costo. Hay un tema de país, de políticas públicas y no se saca nada si no hay un esfuerzo mancomunado para lograr las propuestas adecuadas. Se ha llegado a un límite que no puede volverse a sobrepasar y en eso respalda el planteamiento del Sr. Rector. Hay que buscar salida enfrentando los temas, reflexionándolos responsablemente y alcanzar consensos que se traduzcan en propuestas institucionales. No hay que precipitarse adoptando decisiones que pueden significar daños adicionales.

La Consejera Sra. Devés también estima que este es un problema de país y no exclusivo de la Universidad de Chile y ello debe tenerse en cuenta para lograr ese balance entre cuánto dialogo y cuánto resguardo. Se ha hablado de la necesidad de expresarse democráticamente pero es necesario considerar que esta es una sociedad muy imperfecta, desde el punto de vista de la democracia, y que hay sectores importantes que no tienen ningún canal de expresión y eso es lo que genera la violencia política. Por eso la Universidad de Chile es un magnífico escenario para esa expresión legítima. No está de acuerdo con la forma, con la violencia en la que se da, pero es un hecho que debe ser tomado en cuenta para mirar el futuro. Por eso, en este balance de diálogo y resguardo de la violencia, quiere poner énfasis en que se privilegie el diálogo. La ley de financiamiento aprobada en el Congreso casi por unanimidad no representa, en verdad, la voz del país. La actitud del Presidente de la República fue, a su juicio, tan violenta como la voz del joven que lo interrumpió en su discurso en el Congreso el 21 de mayo. No entendió a qué se refería el Sr. Rector cuando dijo que no habría actividades estudiantiles en la Casa Central. Su propuesta es la contraria; hay que convocar a los estudiantes, abrirse al diálogo, porque se continuará siendo el escenario para las voces que no se pueden expresar en este país, se pongan o no guardias. Hay que trabajar en el diálogo de la manera más conducente posible y entendiendo que aquí se expresan muchos que no tienen otra forma de expresarse.

El Decano Sr. Ramos celebra la postura del Sr. Rector en cuanto a impedir, finalmente, las tomas en la Casa Central y en la Torre. Sin embargo, echa de menos la función educadora. No le persuade sino utilitariamente que la razón porque estas medidas de fuerza están mal es porque dañan la imagen de la Corporación. Tampoco le persuade el argumento de que están mal porque lograron muy poco con ella. A su modo de ver, la Universidad es el templo de la razón y el uso de la fuerza es violentar la esencia misma de su ser. Las medidas de fuerza no tienen cabida en la Universidad y en eso hay que ser categóricos. Lo único que vale es la razón. Concuerda con los demás Decanos en que esto no es un tema de la Torre o de la Casa Central sino de todas las instalaciones universitarias. Invita a definir un protocolo de las formas legítimas de protestar. A su juicio ese protocolo debería contemplar: Discusión, toda la que se desee; Huelga, siempre que no impidan que otros asistan a clases, si quieren; Tomas, ninguna; Encapuchados, ninguno. Es fundamental hacer un esfuerzo por educar a la comunidad universitaria respecto a que hay situaciones que no son toleradas por razones de principios y no por sus consecuencias. A ese protocolo -para el evento de que no sea respetado- hay que sumar medidas sancionatorias que pueden ir desde desalojar los recintos por la fuerza pública a sanciones aplicables individualmente a quienes participan. Le resulta inconcebible que nunca alguien haya sido sancionado por estos hechos. El protocolo actual es que la sanción es cero y esto es una invitación a actuar a los grupúsculos. Cree esencial consensuar este tema.

El Decano Sr. Oyarzún expresa su beneplácito por la consecuencia que ha demostrado el Sr. Rector frente al tema del financiamiento universitario y de las políticas públicas de educación superior y ello lo reafirma en la adhesión que tiene hacia esa postura.

Cree que todo lo relativo al resguardo está sujeto a la discusión de este Consejo y le agrada la prudencia con que se ha planteado. Cree que hay que hacer una diferencia entre actos de autoridad, que deben tener una orientación de resguardo y seguridad respecto de las dependencias, de la integridad física de las personas, etc. y la reflexión y el análisis que debe llevarse a cabo para que se puedan tomar de la manera más adecuada posible las medidas de resguardo que la autoridad debe adoptar. Comparte completamente las palabras de la Consejera Sra. Devés y lo señalado por la Decana Sra. Flisfisch acerca de la necesidad de una reflexión madura que permita llegar a decisiones de fondo sobre el tema de los actos de violencia, como se los ha descrito, que no pueden ser desconectados de una violencia generalizada en el país. Ya había mencionado anteriormente que percibía en el país un recrudecimiento del autoritarismo que provoca necesariamente respuestas que provienen de esos sectores que tienen escasas posibilidades de expresión ordenada y que tienen sus propias demandas. Le parece que este es un tema de análisis propio de una Universidad como ésta. Debe ponerse con urgencia en la agenda para lograr una toma de decisiones apropiadas. Si bien, a riesgo de ser muy impopular, cree que las tomas per se no son ilegítimas, porque pueden darse ciertas circunstancias que las legitimen, desea dejar en claro que lo ocurrido con la Casa Central ha sido muy serio ya que se estuvo al borde de una situación muy crítica. Celebra la prudencia con que el Sr. Rector se condujo y su ánimo permanente de diálogo. Fue con ese ánimo que le encargó el trabajo que realizó la Comisión que, finalmente, llegó a acuerdo con los estudiantes. Cree que el diálogo logró restituir algunos elementos mínimos de tejido de comunidad universitaria para los efectos de la decisión que se tomó. Demostró que ese es el mejor camino que tiene la Corporación para enfrentar los problemas.

Plantea que la idea del Encuentro universitario, al que hizo alusión la Decana Sra. Flisfisch, forma parte del acta de acuerdo suscrita por el Rector, el Prorrector, los representantes de la FECH y dos Decanos que participaron en la Comisión. La realización de dicho evento está delegada, en cuanto a la organización, al Senado Universitario, como corresponde al proyecto de nuevo estatuto y ya hay experiencia sobre Encuentros. Recuerda que el 98 se realizó el Encuentro Universitario que tuvo una alta participación y fue muy bien organizado, con estupendos resultados. Es importante que se constituya a la brevedad la comisión triestamental que se encargará de diseñar la agenda y establecer las condiciones y temáticas más precisas del Encuentro. Ese mismo clima de diálogo, de búsqueda de entendimiento, es el que debe imperar para resolver estas situaciones particularmente conflictivas, dolorosas y dañinas para la Corporación.

La Dra. Sepúlveda entiende que cuando el Sr. Rector se refería a actividades estudiantiles en la Casa Central, aludía a algunos cursos de formación general que se imparten aquí y que, debido a la toma, sufrieron un gran retraso. Hay cinco cursos muy transversales que han debido ser reprogramados a raíz de este conflicto. Comparte el juicio de la Dra. Devés en cuanto a que la vuelta a la democracia es todavía incompleta y que estos jóvenes que hoy participan en estos actos de violencia son quienes nacen durante la dictadura y no han tenido una formación de convivencia democrática suficientemente acabada y este es un aspecto importante de tener en cuenta. Como Universidad, debiera pensarse en como intensificar el apoyo formativo para una incorporación ciudadana y democrática más plena de los jóvenes; habría que pensar el año que viene en acciones concretas que ayuden a que la juventud se sienta participando de una comunidad y vea un modelo de ejercicio democrático. Cree que con Bienestar Estudiantil se puede elaborar un programa. Es positivo planificar este Encuentro, que debería contar con un alto nivel de participación. Pero no se podrán realizar anualmente y por eso hay que buscar mecanismos que contribuyan con acciones más permanentes a establecer una auténtica convivencia democrática.

El Dr. Vio señala que el Sr. Rector ha planteado claramente en su exposición que esta es una Universidad pública que demanda políticas de financiamiento público en un modelo que no es público. El modelo imperante es distinto y se va, por tanto, contra la corriente, lo cual explica que todo lo que se haya hecho desde esta Universidad, especialmente por el Sr. Rector, haya tenido poco eco en la sociedad. De hecho, el futuro no se presenta promisorio y eso debe tenerse en cuenta porque está en el trasfondo de todo lo sucedido. Hubo una política coincidente del estamento académico y de la Universidad en su conjunto con los estudiantes y se llegó a un acuerdo que se expresó en una declaración. Posteriormente a este acuerdo se produjo la toma y ello creo un problema muy serio porque ha habido pérdida de las confianzas entre los estamentos, lo cual es muy difícil de reparar, de recomponer. Es como un cristal roto; hay un quiebre en la comunidad universitaria y esto es igual que una catástrofe que exige esfuerzos para reparar. Está de acuerdo en que haya un Encuentro pero coincide con la Sra. Vicerrectora de Asuntos Estudiantiles en cuanto a la necesidad de realizar un trabajo sistemático con los estudiantes, para que entiendan y conozcan a la Universidad desde adentro. Debe ser un trabajo que se realice a través de todas las actividades que desarrollen los estudiantes. Esto tiene que ver con formar ciudadanos en un país que trabaja fundamentalmente con consumidores.

El Decano Sr. Urcelay está de acuerdo con el Sr. Rector aunque haya discrepado con relación a las medidas para desocupar la Casa Central, pero ha respetado su posición y estima que ha sido muy coherente. Le parece que, desafortunadamente, cuando se llega a un momento de desentendimiento, alguien debe actuar con autoridad -no autoritarismo-, porque hay que enseñar. A veces hay que hacer una presión para que el otro entienda que hay acciones que no se aceptan. Cree que debe extenderse a todas las instalaciones universitarias la prohibición de su ocupación porque la Universidad es una sola y no una federación de Facultades. Hay que resguardar los recintos para dialogar, para hacer democracia y ciudadanía; para aprender entre todos cómo se debe caminar hacia el futuro. Desgraciadamente hay grupos pequeños que no entienden ni valoran el juego democrático. Hay que darse más tiempo, abrir instancias de comunicación en un respeto mutuo y un diálogo abierto. Hay que fijar reglas del juego claras y señalar la manera cómo se impedirá que se adopten medidas que son inaceptables para la convivencia universitaria. Apoya que se incorpore en ese proceso reflexivo el tema de establecer reglas claras para impedir que grupos pequeños sean los que manejen a la ciudadanía.

El profesor Babul plantea que siempre ha pensado que la visión que cada uno tiene del mundo es compleja y depende de la historia personal, pero cual más cual menos basa su visión del mundo en la razón y el sentimiento. Por eso, como conjunto, las decisiones están tomadas en la razón y puede que no coincidan con los sentimientos que se tienen y de ahí surge parte del problema en relación al entusiasmo con el cual cada uno cumple con los acuerdos. Este país, nosotros en general y los estudiantes, vivimos con el sentimiento de que nos arrebataron muchas cosas y si bien se esta viviendo en un mundo nuevo, aquello de que nos deprivaron aún nos duele. Los jóvenes han logrado traspasar ese sentimiento a sus compañeros. Hoy han tomado como bandera de lucha la del financiamiento, pero hay muchas otras que legítimamente podrían haber elegido. Es importante sobre todo para individuos que han estado encerrados en círculos pequeños y la Universidad representa una apertura de posibilidades.

Comenta que leyó todos los documentos que sirvieron de base a la ley de financiamiento universitario y le parece que los antecedentes fueron nutridos y variados –muchos de los cuales convendría difundirlos al interior de la Universidad- y que el debate fue, por tanto, un debate informado pero, por lo que señalaba anteriormente, queda la sensación que en las discusiones hay un dejo que hace pensar que lo que se dice le conviene directamente a quién lo dice.

Plantea que la ley hace referencia, por ejemplo, a la acreditación y debe reconocerse que la UDI logró doblarle la mano al Ministro de Educación en lo que respecta a la carrera de Medicina y a las Pedagogías, porque la aspiración era que este proceso no fuera voluntario sino obligatorio. Se establecía en el proyecto que habría una Comisión Central y una Comisión que va a cada institución. La oposición al Gobierno logró que no fuera la Comisión Central la que dijera la última palabra sino la Comisión particular de cada universidad y ya han empezado a aparecer comisiones de acreditación en las que participan incluso colegas de esta Universidad. Se sabe que hay personas que participan en los Directorios de las universidades privadas y que tienen por lo tanto intereses personales comprometidos. Esto es algo que se sabe pero que nadie se atreve a mencionarlo abiertamente. Entonces, queda esa sensación de falta de claridad.

La contribución que esta Universidad hace al Ministerio de Educación se ha vuelto escasa. Esta Universidad se ha separado de las actividades del Ministerio y éste trabaja no con instituciones sino con personas independientes que no tienen el espíritu de la Universidad en cuanto a lo que debe hacerse en educación. Por todo lo anterior, cree que la única respuesta posible es no sólo ser los mejores sino hacer las cosas bien. Reitera la necesidad de ocuparse de los alumnos, pero en todos los aspectos y esto es una cadena sin fin de hacer las cosas bien. Esa es la mejor presentación ante el país y el público en general. No puede dejar de reconocer que las movilizaciones estudiantiles han cambiado a esta Universidad y eso tiene muchos aspectos positivos. Recuerda que hay tareas incumplidas, compromisos que no se han llevado a cabo.

El Dr. Braghetto esta de acuerdo con hacer un trabajo sistemático de educación al alumno. Cree que no se hacen jornadas de inducción a los alumnos. Propone que se realicen esas jornadas al inicio de cada año para mostrar lo que es la universidad, lo que hace, sus problemáticas y, también, para fijar los limites en la convivencia, de manera de llegar a consensos y entenderse con los alumnos. Eso abre la puerta a la comunicación.

Por otra parte, le preocupa el futuro y, considerando que se está ad portas de las elecciones presidenciales, propone realizar un foro con cada uno de los candidatos para plantearles los problemas que tiene esta Universidad y conocer sus respuestas.

La Consejera Sra. Zeran está de acuerdo con la necesidad de una mayor comunicación con los estudiantes y cree que hay que adoptar toda clase de medidas que favorezcan el diálogo. Se requiere reconstruir comunidad y dialogar triestamentalmente de verdad. Es fundamental reparar este déficit de participación democrática, de cultura cívica que falta y ello se relaciona precisamente con ese rol formativo de la Universidad que se ha señalado. Con respecto a la actitud a asumir frente a las tomas, señala que han conversado con los Decanos del Campus y el Director del Bachillerato sobre cómo parar la violencia que viene desde fuera y que crea un circulo de provocación y también cómo enfrentar el tema de los encapuchados. Hay claridad de que hay que abordar estas materias triestamentalmente. Estima que, en la medida que se logre una comunidad con buenos y expeditos canales de comunicación, de participación y entendimiento con los alumnos, las tomas desaparecerán. Estuvo totalmente en contra de la toma de la Casa Central y concuerda en que ese hecho rompió las confianzas establecidas porque los académicos estaban apoyando a los estudiantes. Le parece que el no uso de la fuerza fue una estupenda señal porque cree, como dice el profesor Ramos, que a la fuerza no se puede responder con la fuerza sino con la razón y el diálogo. No se evitan estas medidas con guardias armados o con un decreto. Se evita construyendo un diálogo que nos rearticule como comunidad. Cree que el único protocolo posible es intentar una mayor sintonía con los estudiantes que vienen con déficit de democracia y educación cívica, sin ejercicio de ciudadanía. Hay que intentar ser formadores en un ámbito más amplio. Al enfrentarse a situaciones de fuerza, cada uno sabrá como reaccionar. Si el Decano Sr. Las Heras llega algún día a ser Rector, seguramente desalojará la Casa Central. Cada uno sabrá, como autoridad, cómo responder.

El Decano Sr. Brieva confiesa que tiene sentimientos muy mezclados luego de escuchar las intervenciones de los Consejeros. Oyendo al Rector, siente solidaridad y comparte esa sensación de impotencia que se tiene cuando a uno lo golpean luego de que ha hecho todos los esfuerzos por un mejor convivir. Comparte también la defensa de minorías políticas que existen en este país, porque es parte de la sociología actual y le gusta la imagen del cristal roto usado por el profesor Vio, para calibrar el tema de las confianzas. Pero junto con este sentimiento solidario se ha llenado también de indignación frente a este discurso romanticón de una Universidad que sigue levantando las grandes banderas encerrada en su cápsula, sin asumir que más allá de esta Casa hay otro país, otro mundo.

Recuerda que la educación pública, tal como la definió el Sr. Rector, esto es, aquélla cuya propiedad está en manos del Estado, la componen 16 universidades en todo el país y, de ellas, solo hay una que califica como tal y es la Universidad de Chile. Las demás no califican, no satisfacen estándares mínimos razonables. La USACH, por ejemplo, obtuvo apenas tres años de acreditación, siendo una de las más antiguas del sistema. El sistema público universitario no existe realmente y la única que queda es la Universidad de Chile que, en su instancia más pensante, intenta reflexionar darse un apoyo pero, finalmente, para que todo siga igual, sin moverse de su lugar ni cambiar su discurso. No ha escuchado a nadie plantear en qué proyección está mirando la Universidad; cómo se piensa que será esta Corporación dentro de 20 años ni qué país enfrentará entonces. Ya no puede repetirse la experiencia de los años 70’s. La obligación es ahora pensar en qué va a pasar en este país, qué rol va a jugar esta Universidad en la medida en que sea publica. Pero también hay que tener claro que el rol no es de centro del universo, de núcleo en torno al cual se mueve el país porque, por una razón u otra, ese rol se ha perdido.

Hoy vivimos en una sociedad con múltiples influencias y múltiples enfoques, con identificaciones complejas, porque cambian constantemente y, muy particularmente en educación superior. Que visión tiene esta Universidad, qué defiende como discurso sano es lo central. Y esta es una responsabilidad que no es triestamental –aunque a muchos no les guste- no es tema de comunidad, es tema del cuerpo académico. Debe considerarse que esta comunidad es muy especial, porque hay un pedazo grande de ella que cambia todos los años y que no tiene memoria. Todo el estamento estudiantil tiene esa singularidad. Y por eso es imposible construir comunidad en estricto rigor. Hay una contradicción en el uso y el abuso de este término. La realidad es que quienes de verdad constituyen comunidad son los cuerpos académicos. Ellos, en su percepción, son los que deben asumir la responsabilidad, iluminar, con colaboración, con intercambio, con la generosidad, y con todos los elementos que sean razonables de incorporar a este quehacer. Esa es su reflexión hoy. Hay molestias que comparte, pero recuerda que siempre se ha contado con las herramientas para actuar y, por un motivo u otro, no se han usado. Más que enfatizar protocolos, porque ellos existen finalmente, hay que plantearse hacia donde se quiere ir. No se puede ser ajeno al propio Estado. Es verdad que el Congreso apoyó la ley casi por unanimidad contra la opinión mayoritaria del país, y de este Consejo en particular, pero esto es propio de la democracia que se está tratando de construir. Le gustaría que si se ha de hacer un Encuentro el tema central sea cómo nos paramos como Universidad de Chile. El Senado Universitario no ha cumplido ese rol y el documento La Universidad de Chile hacia el siglo XXI tampoco responde esa pregunta. Se hacen esfuerzos, se generan tensiones pero todavía falta focalizarse debidamente. Se disculpa por no haber seguido la rutina.

El Decano Sr. Silva concuerda con muchos de los planteamientos y reconoce la complejidad del tema. Está de acuerdo con que no ha habido una buena formación en esta juventud y en que los gobiernos no han apoyado a la Universidad de Chile en sus requerimientos. Está de acuerdo en que se invite a los candidatos para saber qué piensan porque no se puede seguir contra la corriente. No se puede terminar al margen del resto. Apoya al Sr. Rector en su exposición y le parece muy necesario apoyar a los estudiantes a través de acciones permanentes; hay que intervenir más activamente en el proceso de formación. El protocolo de acuerdo es necesario. El asambleismo no conduce a nada. Tiene que haber una manera democrática de entenderse. Hay que saber cómo se mira a la Corporación a largo plazo; es fundamental abordar estas materias con un alto nivel de reflexión.

El Decano Sr. Chesta tiene la sensación de que todavía se está al garete hacia el futuro. Hace algunos comentarios sobre el desarrollo del conflicto en su Facultad y el acuerdo logrado con los estudiantes. Se crearán comisiones para que participen los estamentos de manera relevante y hay que concientizar. Hay que implementar mecanismos permanentes y no sólo reaccionar frente a la contingencia. Cree que comenzar a discutir es un avance. No hay que continuar haciendo declaraciones y no hacer nada.

Cree que la opinión pública percibe que, luego de hechos de violencia como la toma de la Casa central, no hay manifestación de autoridad y, finalmente, reina la impunidad. Leyó unas declaraciones atribuidas al Sr.- Rector en que señalaba que se expulsaría a los alumnos. Pregunta si es efectivo porque uno de los responsables de la toma es Presidente del Centro de Alumnos de la Escuela de Diseño, de su Facultad.

El Presidente de la FECH no sumará palabra al posible ánimo confrontacional que puede existir entre académicos y estudiantes. Le ha parecido muy interesante la reunión y expresa que los estudiantes están dispuestos a conversar con quienes lo deseen, porque parece que hay más aristas de los problemas que se desconocen y que es importante conocerlos precisamente para la discusión que busca respecto a cómo se plantea la Universidad hacia el futuro. Qué tipo de Universidad se vislumbra de aquí a 10 años es, sin duda, un tema fundamental.

Reconoce la voluntad de los Decanos Sres. Oyarzún y Sr. Morales, de los profesores Vivaldi y Bahamonde, porque fue fundamental para alcanzar acuerdos y dar solución al conflicto. Celebra este espíritu dialogante. Cree que ahí está la clave del entendimiento. Cómo evitar que se repitan estas situaciones es una aspiración también de los estudiantes. También es de opinión que los guardias no solucionan el problema; hay que subir un peldaño más en el análisis del conflicto y ver dónde está la raíz de manera de posibilitar el acuerdo y la reconstitución de la comunidad universitaria. Comparte el planteamiento de los Decanos en ese sentido. Después del año 98, con el Encuentro Universitario, el referéndum, a ningún grupo se le hubiera ocurrido adoptar ninguna medida de fuerza puesto que la postura de la comunidad se había expresado en un Encuentro, hubo expresiones locales y centrales y hubo un referéndum con una participación altísima de todos los estamentos. Ese espacio de encuentro no ha vuelto a existir desde entonces y por eso una provocación exógena muestra las distintas posturas existentes al interior y algunos no saben diferenciar al amigo del enemigo. Es necesario ese trabajo sistemático que reclamaba la Sra. Vicerrectora. No sólo es el padre el que entrega al hijo la educación cívica sino que muchas veces es el padre el que aprende del hijo. Estima esencial que se desarrolle el Encuentro Universitario porque generará y permitirá volver a entrelazar a la comunidad universitaria. De lo contrario, habrá que lamentar este mismo tipo de conflicto todos los años.

El Sr. Rector informa que no había invitado al Presidente de la Fech a esta reunión, como él lo sabe, porque no quería que se sintiese en el banquillo de los acusados. Le parece bien que haya venido y expresado su opinión. Agrega que hay que mirar los problemas de contingencia y también los temas trascendentes que planteaba el Decano Sr. Brieva. Siente que en la sociedad hay un caldo de cultivo que favorece estos comportamientos. Hay insatisfacción respecto a cómo se vive y ve con preocupación que estas cosas cunden. Las instancias de expresión están un poco ausentes y la reacción a veces puede ser disparatada. No tiene problema en enfrentar discusiones pero debe reconocerse que la Fech es estructuralmente débil y a veces está presionada por grupos con agenda propia. El problema es como manejar el violentismo de los grupos pequeños porque es un problema para la Federación de estudiantes y para la Universidad en su conjunto.

4.- Varios.

El Decano Sr. Las Heras comenta lo señalado por la Decana Sra. Flisfisch respecto a que, según una declaración publicada en la prensa, habría cierta alianza entre las Facultades ricas. Expresa que carece completamente de fundamento una acusación así ya que no hubo en momento alguno ni siquiera una conversación especial con los Decanos de las Facultades de Derecho, Ciencias Económicas o Ciencias Físicas y Matemáticas. Se trató de un montaje periodístico que respondió exclusivamente a motivaciones que desconoce. No vino a la entrega de la Casa Central porque estaba enfermo. No ha habido de su parte jamás un ánimo de mostrar discrepancias o desacuerdos. Sólo mencionó el perjuicio que estos hechos ocasionaban a la Universidad y a su Facultad que había hecho grandes esfuerzos para recuperar imagen. Esa es una preocupación legítima.

Siempre ha tenido la misma posición respecto de las tomas aunque ahora se lo tilde de reaccionario. En los 7 años que ha sido Decano nunca ha enfrentado una toma y ha habido diálogo con estudiantes y funcionarios de modo permanente para evitar confrontaciones. Se realizaron tres claustros en su Facultad y se discutió en extenso el tema. Hubo un consenso en que este era un problema de toda la Universidad. Hubo declaraciones de apoyo a los estudiantes en su demanda fundamental. Cree necesario establecer los límites claramente; esa es una tarea educativa. Apoya el análisis del Sr. Rector y respeta la posición que ha tenido así discrepe con ella en algunos aspectos. No se puede restringir de dar opiniones porque esta es una Universidad y una sociedad democrática. Hay que terminar con esas diferenciaciones entre Facultades porque esta es una sola Institución. Está pendiente la formación de la Comisión que se acordó para hacer planteamientos sobre financiamiento en un documento.

El Sr. Rector señala que El Mercurio sabe muy bien que crear cuña al interior de la Universidad es un instrumento potente porque resiente a la institución. Nadie se puede sentir sorprendido por eso. El Encuentro es un compromiso. El Senado se reunió y tiene una propuesta sobre el punto.

El Sr. Prorrector informa que el jueves próximo a las 12.00 hrs. se inaugurará el ascensor de la Casa Central e invita a concurrir a todos los Consejeros.

El profesor Vio señala que no se ha tratado el tema de cómo revertir el problema de imagen de la Corporación después de este conflicto. Hay que hacer una fuerte campaña en pro de la Universidad.

Se levanta la sesión a las 11:55 hrs.

ANTONIO ZAPATA CACERES
Secretario General (S)
Secretario Consejo Universitario

Compartir:
https://uchile.cl/u40014
Copiar